Obviamente que el gobierno revolucionario, liderado por el comandante Chávez, no tiene responsabilidad absoluta en la fuga del imputado por la Justicia, el ex gobernador Eduardo Lapi.
Podríamos endosarles esta fuga a las autoridades competentes y responsables del cuido y custodia de estos delincuentes de alta peligrosidad, no tomar las debidas previsiones y precauciones para mantener en forma segura el encierro de este ápatrida y sicario del erario público.
No podemos desconocer que estamos infiltrados hasta el tuétano en todos los entes del Estado de seudos revolucionarios, enquistados, y funcionarios de la IV República, que son presas fáciles del cáncer maldito de la corrupción.
La historia se repite, fuga de Pedro El Breve, el Charro Bingo Ortega, los hermanos coroneles Faría Rodríguez, su sobrino el capitán Faría, y otros que sin estar presos, lograron escapar de las manos de la justicia, como son los Poleo, Orlando Urdaneta, entre otros.
Creo que las autoridades competentes, deben hacer una profunda reflexión al respecto, para evitar así, ser el hazme reír de los oposicionistas y de la opinión internacional.
LEY SECA.-
Como opinión muy subjetiva, debo manifestar, que faltó más comunicación e información a la ciudadanía, el compañero ministro Pedro Carreño, debió hacer una disertación amplia en cadena nacional, los alcances y objetivo de dicho decreto.
Creo que la esencia y espíritu de dicho decreto es totalmente humanista, y esperamos que se cumplan los objetivos propuestos.
Lo que debería haber mencionado dicho decreto, son las zonas de excepción, como por ejemplo el Estado Nueva Esparta.
Los Margariteños, comerciantes, empresarios, se preparan en esta época para ofrecerles a los turistas nacionales y extranjeros, actividades que les han significado altas sumas de dinero, en contratos previamente firmados, que no alcanzaron a cancelar por lo intempestivo de dicho decreto.
Creo responsablemente que se pecó en exceso, Margarita zona turística por excelencia y punto referencial como opinión internacional de este nuevo proyecto país, debió haber quedado fuera de este decreto.
Debemos decir en honor a la verdad, que cada vez que se decreta Ley Seca, es cuando el venezolano más “caña” compra, y es vendida en forma clandestina.El meollo central y fundamental de este problema es la educación ciudadana, que nos llevará “lustros” en acondicionarla, la esperanza está en las nuevas camadas que tendrán y lograrán tener conciencia de esta tragedia, que es el alcohol, mal que enluta a tantos hogares venezolanos.
Plausible es el decreto de la Ley Seca, en carreteras y los sitios que se requieran para evitar más muertes y tragedias en esta Venezuela que tanto queremos, pero aunado a esto debe haber más control y fiscalización en carreteras por parte de las autoridades competentes.