Renace por ahora y por siempre la esperanza
Nuestro comandante Chávez, surgió como la luz que ilumina a los oprimidos y explotados de esta tierra.
Su ejemplo y carácter son de tiempos indomables.
Su amor y solidaridad no la contuvo la miseria de los poderosos.
Su voluntad derribó todos los obstáculos impuestos como
acondicionamientos mentales, jurídicos, procedimentales e institucionales.
Por ello, seguirá en los corazones de los Pueblos libres, rebeldes y solidarios, que dan ejemplo de dignidad y de autodeterminación.
Estarás por siempre en las manos que construyen solidaridad y esperanza.
Lo veremos eternamente en la sonrisa inocente de los niños y niñas que merecen un mundo más humano y digno, en las acciones de los hombres y mujeres que luchan día a día, por un mundo con rostro humano.
Nos enseñaste que la opresión y la explotación, la podemos derribar y vencer, cuando existe consciencia, organización y acción colectiva.
Te damos un fuerte abrazo, que traspasa los tiempos y las circunstancias, y te agradecemos por llamarnos como voluntades a hacer Patria.
Tú vivirás por siempre, porque sembraste esperanza y solidaridad.