"El hombre es un dios cuando sueña
y un mendigo cuando reflexiona"
Friedrich Hölderlin
La desbandada de personas hacia los Estados Unidos, todavía no se detiene y por momentos, lo que llaman migrantes, parece una competencia entre hermanos de distintas nacionalidades latinoamericanas para ver quién contribuye más, para aumentar inconscientemente las estadísticas de calamidades y sufrimientos de los engañados por el llamado "sueño americano", el cual ha venido embelesando a la mayoría de los que emprenden ese camino, aún, cuando corran el riesgo de morir en una travesía llena de miles de obstáculos.
Los cuentos no paran en medio de las aventuras emprendidas y los que logran llegar por los llamados caminos verdes, nunca se imaginaban, que se las iban a ver verdes para pasar la frontera, para después seguir con el sufrimiento, ya que, llegar a otra tierra con costumbres diferentes y donde la muerte se pasea de distintas maneras, hasta hacerle la vida prácticamente un calvario a sus mismos moradores, nos podemos imaginar a los que llegan de aventureros y, el primer trago amargo lo pasan, cuando respiran profundamente de manera jubilosa, como un desahogo ¡Llegué!
A partir de ese momento, es cuando empiezan los amarguras y cada persona al despertar se encuentra en una jungla y muchos piensan en el regreso, pero hasta ahí y los que se devuelven no miran para atrás, si siquiera a buscar el depósito del alquiler, cuando logran instalarse, para terminar hablando de lo poco visto, conmocionados de un país totalmente anarquizado y no es fácil vivir, con unas estadísticas, que espantan y la mayoría de los protagonistas, son gente del pueblo, sin recursos económicos y lo más peligroso, sin cultura política y la capacidad suficiente para entender, lo que significa la sociedad estadounidense, algo propio para las películas de terror.
En los Estados Unidos, puede faltar cualquier cosa, menos la iluminación de las grandes ciudades y ahí, empieza el proceso de seducción del que llega. Tan es así, que el desbordamiento del derrape van en constante crecimiento y, en algunas grandes ciudades, entre ellas la más apetecible por los latinos: Miami, a pesar de no ser la capital del estado Florida, las autoridades han tomado medidas drásticas, porque el desbordamiento en contra de la moral y las buenas costumbres, había tomado ribetes de alarma, aún, cuando no es algo nuevo, pero todo tiene su límite y más, cuando se estaban paseando, como Eva y Adán, sin estar en el paraíso terrenal.
Todo migrante, cuando llega y empieza a buscar algo que hacer, sea donde sea y de lo que sea, se tropieza con escenas desbordadas propias de un país, en el cual la prostitución, la drogadicción y el alcoholismo forma parte de una sociedad totalmente desmoralizada y a la vez contribuye a la economía del vicio y por algo el papa San Juan Pablo II (Karol Józef Wojtyła) de procedencia polaca, quien no tenía absolutamente nada de comunista, se atrevió a calificar el capitalismo, como salvaje, ya que, la fetidez llega a todos por igual y, se necesita ser muy insensible para no denunciar o espantarse.
Eso es precisamente el grave y gran problema del capitalismo en su máxima expresión proyectado por los gobiernos estadounidenses y no estaba errado el gran pensador Karl Mark, cuando dejó pensamientos, en el cual se encierra parte de la verdad. 1-"La desvalorización del mundo humano crece en razón directa de la valorización del mundo de las cosas" 2- "No es la conciencia del hombre la que determina su ser, sino, por el contrario, el ser social es lo que determina su conciencia" y la otra para que no quede duda de su capacidad para analizar el pensamiento 3- "Si amas sin despertar amor, esto es, si tu amor, en cuanto amor, no produce amor recíproco, si mediante una exteriorización vital como hombre amante no te conviertes en hombre amado, tu amor es impotente, una desgracia". Creo, que, por estas razones, cuando le pregunte a un amigo ¿Cuándo te vas para la tierra del tío Sam" me respondió con una sonrisa pícara ¡Dele, que yo lo sigo!