Nada es tan peligroso como
hechos y palabras fuera de contexto. Nuestros ciudadanos deben temer
con sobrada justicia que los mismos personajes que los han manipulado
por tanto tiempo lo sigan haciendo permanentemente. Lo hicieron con
el vacío de poder, el paro cívico, el fraude, la dictadura, la falta
de libertad de expresión y la virgen de Altamira. Ahora lo hacen con
la enmienda.
“… nada es tan peligroso
como dejar… largo tiempo en un mismo ciudadano el poder.”
En su contexto, lo que Bolívar
consideraba peligroso era la permanencia de un ciudadano en el poder
sin elecciones periódicas. Nunca tuvo problemas con la larga
estadía del poder en sus manos.
Por 25 años Bolívar jugó
el papel de protagonista, 18 de ellos como máxima autoridad. A esta
posición fue elegido en 1813 y 1816 en Venezuela, en 1824 en Perú
y en 1825 en Bolivia. El Libertador fue elegido Presidente de la Gran
Colombia en 1819 y reelegido en 1821. Mantuvo esa posición por 11 años
a pesar que constitucionalmente estaba limitado a 8.
Si Bolívar en Angostura trató
de establecer un principio, ese fue el de “legitimidad”.
Las palabras de Cúcuta fueron
diferentes:
“Si
un hombre fuese necesario para sostener el Estado, este Estado no debería
existir, y al fin no existiría.”
Aquí el problema no es lo
que Bolívar quiso decir sino lo que la oposición quiere decir. Si
los meritocráticos de la oposición creen que nadie es imprescindible,
¿por qué Gente de Petróleo sí lo es?
Con la Constitución el enredo
es mayor. Dicen que la propuesta fue rechazada y que proponerla de nuevo
es inconstitucional. El Artículo 345 de la Constitución dice:
“La iniciativa
de reforma constitucional que no sea aprobada, no podrá
presentarse de nuevo en un mismo período constitucional….”
En el 2007
se presentaron para su aprobación cambios a varios artículos separados
en dos propuestas. La propuesta de ahora consiste de una enmienda a
uno de esos artículos. Una torta entera es diferente a todos y cada
uno de sus pedacitos. Y viceversa…
También se dice que la propuesta
viola el Artículo 6 de la Constitución:
“El gobierno…,
es y será siempre,…, alternativo….”
Buen argumento. El problema
es que dentro del contexto de la Constitución, el carácter alternativo
del gobierno es prerrogativa del pueblo que lo elige. Así lo establece
el Artículo 5:
“La soberanía reside
intransferiblemente en el pueblo, quien la ejerce…, mediante el sufragio…”
Además, como
está escrito, el Art. 230 limita la soberanía que “intransferiblemente”
debería residir en el pueblo. Excluye a un ciudadano que podría ser
nuestra mejor opción.
¡Y no se deje
manipular! No es que malo conocido es mejor que bueno por conocer. Simplemente,
mejor que ambos es un BUENO CONOCIDO.