DIALECTICA PARA COMPRENDER Y PARA GOBERNAR
Cada día más, va formándose la convicción de que la Revolución Bolivariana es un proceso con particularidades y singularidades, propias de Venezuela, también de generalidades revolucionarias, por supuesto. Ello es un avance ideológico como resultado de las propias transformaciones sociales (políticas, económico-financieras, culturales, jurídicas) que se van realizando en todo el país. Ninguna particularidad, ni tampoco ninguna singularidad, se debe observar o estudiar independiente una de otra, y mucho menos independientes de las generalidades de cualquier otro proceso revolucionario ocurrido en el mundo, ni tampoco en la propia Venezuela. Lo particular separado de lo general sólo puede existir como abstracción en el proceso del conocimiento, es decir, como fase transitoria hacia la comprensión de uno u otro objeto de estudio. Y la relatividad de una o de otra propiedad no está en entredicho pues para el socialista bolivariano no es difícil comprender –por ejemplo- que varias particularidades del proceso de transformaciones venezolano iniciado en 1999, ya son también propias de otros procesos revolucionarios en América y entonces, lo que fue particular se va convirtiendo en general.
Ello lo sintetiza y lo expresa el pueblo, popular y emocionadamente, cuando corea y repite una y otra vez: "la espada de Bolívar por América Latina". Otra forma de expresarse esa misma realidad lo observamos cuando el Obama imperial acusa cínicamente a Venezuela de estar obstaculizando a otros países latinoamericanos. ¿Habrá Obama preguntado antes a los líderes latinoamericanos y caribeños –como antes debió hacer un político honesto y responsable- acerca de ese juicio extraído de las lecturas de la Heritage Foundation? ¿O es que el Obama imperial va a relacionarse con América Latina a partir de sus vínculos hegemónicos con unos pocos gobiernos corruptos que quedan en esta región? ¿O es que también pretenderá usar a sus lacayos y marionetas políticas en hechos violentos en Venezuela quienes sólo subsisten gracias al carácter paciente y equilibrado del socialismo bolivariano?. Obama debería siempre recordar la dialéctica si es que quiere comprender y lograr recuperar la dignidad, la honestidad y la justicia perdidas en la norteamérica sajona, la de raíces germánicas, precisamente las mismas que abonaron la cruel colonización y esclavitud de los ancestros kenyanos de Obama. Por ello, la Enmienda es una verdadera acción de la propia espada de Bolívar en el siglo XXI y esas declaraciones de Obama son expresión de las reminiscencias ideológicas de los esclavistas del siglo XVII en la mente de un asimilado.
Una de las particularidades de la Revolución Bolivariana por la cual se distinguirá este proceso social respecto a los de otras latitudes, y quizás tal propiedad vaya detectándose más claramente en otros procesos de la región, tal y como pudiera observarse en estos últimos diez años, es que al haber alcanzado la mayoría del pueblo un grado de comprensión, es decir, de conciencia política de la necesidad de buscar otra alternativa al sistema imperante capitalista basado en humillantes desigualdades, crueles represiones e ilusiones o sueños irrealizables, ahora se encuentre en la fase de comprender las bondades del socialismo propuesto por el líder de esa mayoría, el Comandante Chávez, y como es lógico, se encuentre buscando las vías y los instrumentos más idóneos -según sus ideas y creencias también en proceso de cambios- para garantizar que aquellas represiones, desigualdades y sueños irrealizables dejen de serlo, y ello, a su juicio, sólo lo pudiera alcanzar si se mantiene unido como un bloque compacto y sigue siendo mayoría política para garantizar las decisiones del país acorde a sus intereses y deseos de igualdad, paz y felicidad. Es aquí donde entonces la mayoría del pueblo comprende que su líder y Presidente debe permanecer incólume, inamovible en el cargo y continuamente dialéctico, es decir, continuamente con una conducta dirigida a cambiar lo que debe ser cambiado, y a sostener lo que ya se ha logrado. Y así espera de los restantes hombres y mujeres con cargos de elección popular también incluidos en ese instrumento aprobado por la misma mayoría del pueblo en 1999 y denominado: enmienda constitucional.
REFUTAR LAS FALACIAS CAPITALISTAS
De manera que quien comprenda lo anterior, puede refutar con éxito y rechazar esa gran mentira de los contrarrevolucionarios y sus disociados capitalistas que andan difundiendo que "la enmienda es para la reelección indefinida" y que es "inconstitucional", lo cual demuestra sus temores de represores sin poder y de demagogos, que con "cantos de sirena" tuvieron a Venezuela a sus pies para convertirse –sólo algunos de ellos, sus cabecillas- en millonarios magnates con empresas, varios autos, helicópteros, yates y grandes quintas por casa, mientras que el pueblo trabajador era reprimido, mancillado, discriminado, separado a vivir en ranchos, explotado económicamente, mal educado, sometido y cercado en los cerros y barrios, con escaleras y salidas únicas, para controlarlo. Sólo aquellos o aquellas "aptos" y "capaces" de servirle al gran capital y subordinarse a los capitalistas en oficinas públicas, empresas, escuelas o universidades, pequeñas empresas, podrían aspirar a vivir –si tenía capacidad de resistir ser hipotecado a futuro- fuera de los ranchos, cerros y barrios.
Ahora, ese mismo grupúsculo de cabecillas multimillonarios –aprovechándose de la paciencia y el interés pacífico de la mayoría- utiliza los términos de "reelección indefinida" en su campaña publicitaria para tratar de causar miedo, pensando que la mayoría del pueblo es ignorante y no entiende que si es elección no puede ser indefinida porque la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela establece de forma muy clara los lapsos para cada cargo, y que, si fuera reelección, en todo caso sería según la propia decisión y por la propia voluntad del pueblo, y si el pueblo comprende y desea mantener en el cargo a un líder, lo podrá elegir cuantas veces lo desee. Incluso, ello es más coherente con la evolución y desarrollo de la especie humana que ha sabido siempre aprovechar las experiencias alcanzadas, reducir al mínimo los riesgos y garantizar al máximo los logros. A los venezolanos y venezolanas, y a cualquier pueblo de Nuestra América, les viene llevando poco más de medio milenio eliminar de una vez y para siempre los obstáculos para alcanzar los sueños y las ilusiones humanas. ¿Qué significa ese tiempo comparándolo con las decenas de milenios de esas sociedades dividas en clases de explotados y explotadores, y sobre todo con el capitalismo atroz que preñó al mundo de guerras de conquistas, saqueos y muertes, "chorreando lodo y sangre por todas partes"?.
¡Cuánto ha enseñado este proceso revolucionario al pueblo! ¡cuánto ha contribuido a ello el Comandante Chávez! ¡cuánto ha contribuido a formarse la ideología bolivariana esas inmensas manifestaciones populares de apoyo al líder y a sus propuestas! ¡cuánto han fortalecido las capacidades de análisis del pueblo esas conductas delictivas, malsanas y abominables de los grupúsculos opositores violentos que proclaman con cinismo y demagogia que la enmienda es inconstitucional!
¡Compadre,! –como exclama frecuentemente Chávez- lo único inconstitucional es ese conjunto de conductas y acciones delictivas que a diario cometen esos canales privados de radio y televisión que no cumplen la ley porque vomitan mentiras, lanzan blasfemias y producen efectos altamente nocivos a sus radioescuchas o televidentes. ¿Qué más efecto nocivo para las familias honestas aunque disociadas y confundidas que los cultos mediáticos y llamados al odio, a la venganza y a la violencia contra un gobierno revolucionario que trata de garantizar lo mejor para un pueblo y que lo hace más feliz con sus Misiones, con sus Movimientos Sociales y con sus costumbres pacíficas y alegres, bailando salsa, joropo, cumbia o vallenato, y con sus nuevos trenes, con sus amplios metros, puentes, carreteras, autopistas, con sus bonitas y amplias casas de bajo costo, con sus pujantes universidades gratuitas y con sus miles de Módulos de Barrio Adentro, centenares de Centros de Diagnóstico Integral (CDI) y decenas de Centros de Terapia Física, con amplios, seguros y honestos servicios en salud, sin costo alguno para todos, sin distinción de clase, y con la amabilidad propia del carácter y la conducta socialista?.
DECIDIR POR EL PUEBLO SOBERANO
Por todo ello, la enmienda es una necesidad histórica que debe hacerse a la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela para elevar las capacidades populares de transformación integradoras socialistas a través de la no prohibición de la postulación del líder y Presidente de la República en los procesos electorales presidenciales. Con la Enmienda propuesta, no se le priva al pueblo de ratificar o no volver a elegir a sus líderes en los cargos, sea de una u otra tendencia o posición política, porque será el pueblo quien decidirá. Por tal razón, al existir siempre alternativas la susodicha "alternatividad" queda garantizada y sólo el pueblo decidirá. No habría verdadera alternatividad si al pueblo se le priva de poder contar con TODAS las alternativas posibles y PODER reelegir a quienes han hecho una buena gestión. Eso está, o debe quedar claro, es decir, profundamente comprendido en los debates populares y en cualquier batalla de ideas. La Enmienda es más poder para el pueblo.
Esa particularidad está muy vinculada a la generalidad de los procesos electorales en el mundo pues en toda sociedad satisfecha con su sistema democrático y electoral, así lo cree y así lo permite la Constitución, es lógica la reelección continua del Presidente que ha tenido buen desempeño humano, buena gestión social y el pueblo está convencido de que ningún otro puede conducir los complejos procesos económicos y políticos del país, en y con las condiciones que cada momento se requieren, y la disponibilidad de los recursos nacionales. ¿Quién no va a elegir a un líder que colocó y sitúa, cada día más, las riquezas naturales del país en función del desarrollo integral de la nación y de sus ciudadanos y ciudadanas?. Si se estudia detenidamente los procesos políticos en América Latina se encontrarán las verdaderas causas de las decisiones legales en los órganos de las clases dominantes capitalistas para limitar a los presidentes –de uno u otro partido burgués- a uno o dos mandatos y de esa manera satisfacer a las masas insatisfechas con sus sistema político y electoral. En esos casos, la limitación burguesa a un nuevo período presidencial constituyó una válvula de escape a la presión social. No es el caso de la Venezuela actual, la real, la de verdad, la de la V República, donde el pueblo comienza a sentir y padecer su propia obra, iniciada por la vía pacífica y mantenida a toda costa, porque hasta ahora es necesaria y posible.
No obstante, la historia no debe ser olvidada, y quien olvide la historia, a sus héroes, a sus batallas por la independencia y por la verdadera libertad, a sus antecesores, a las políticas excluyentes de la 4ta República, sólo tendrá derecho a lamentarse si se diera el caso de formar parte de una mayoría olvidadiza o sólo tendrá derecho a reflexionar y a corregir su conducta y rumbo si forma parte de la mayoría patriota que impulsa y votará por la aprobación de la Enmienda Constitucional.
En el próximo artículo continuaremos con algunas reflexiones sobre las raíces históricas de esta necesidad histórica y esta decisión política.
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