Entramos en la última curva para Rosalinda, es ya un hecho el término de la campaña electoral y la afinación de estrategias por ambos bandos.
Los patrulleros, los comités, los frentes, toda esa gran maquinaria roja llena de amor, esperanza y compromiso con su pueblo.
Pero sabemos que la derecha también afina sus guarimbas, mentiras y estrategias de caos para esta última semana llena de movilizaciones, encuentros y foros, donde la burguesía rancia y chocante, sin argumentos claros, con un odio hacia sus semejantes y la manipulación de los dueños de medios privados de comunicación.
Es necesario queridos hermanos, que revisemos todo nuestro arsenal, verificar nuestros votantes, garantizar la movilización y la motivación de quienes creen en este gran proyecto nacional, que no se trata de un hombre, sino del futuro de nuestro país, que solo el camino del socialismo nos permitirá la continuidad de todo lo que hemos construido hasta ahora.
Es necesario decirle a aquel que no voto en el referéndum pasado por miedo, manipulación, intimidación de otros que siendo parte de este gobierno bolivariano, traicionaron la voluntad del pueblo.
No se puede quedar nadie sin votar, es la patria que esta en juego, es la vida misma, es el sentimiento hermoso y grande que tiene en cada mirada nuestros niños, es el latir de nuestra alma a ir a una universidad, el ver con alegría de ver como crece el árbol que con tanto amor sembraste, la fortaleza de lograr lo que en el pasado era imposible.
Ellos no creen en el poder popular, no les importa si tu hijo desayuna o almuerza, si tiene buena salud, si se viste, o su techo no gotea cuando llueve en su cama, la mirada tierna de una anciana, el surgir de un gran deportista, tanto así queridos hermanos, ni los que tienen sotana son dignos de Dios.
Olvidémonos esta semana de la rumba, la novia, la película del momento, el chisme del día, si el concejal, o el diputado no va a los eventos, no importa, después del 15 de febrero removamos las entrañas de esos seres insípidos que solo viven de la revolución, vamos todos a defender lo que dios y la providencia nos ha dado, cuidemos con la vida si es necesario cada voto nuestro, respetemos al adversario, pero no nos dejemos intimidar, en nuestras sangre corre ese sentimiento y esa fuerza irreverente de Bolívar, y ese amor y lecciones que nos a dado Chávez.
Un llamado a todos aquellos que hoy gracias a este proceso están revindicados, y su derecho se defiende cada día que pasa.
Ellos si vuelven al poder no tendrán piedad y nos quitaran todo sin pensar en nada.
No nos quedemos en nuestras casas, salgamos con conciencia a votar este 15 de febrero, defendamos nuestra revolución bolivariana.
*Militante del PSUV
Caracas, Venezuela.
