“Una causa no triunfa por su bondad y su justicia; triunfa por el afán de su adeptos”
Gilberto Guerrero…
La Escalada de violencia de toda índole que se vive en Venezuela parece estar permisada, como política de estado, para someter al ciudadano en su diario trajinar por una vida alegre y en libertad. Cada día vemos como nuestros jóvenes caen asesinados en las calles del país como moscas, sin que haya el más mínimo asomo de un verdadero plan gubernamental que frene la masacre. Ya sea por asaltos, secuestros, por ajustes de cuentas entre bandas, por tener diferencias políticas distintas, por ser ciudadano, por ser obrero, sindicalista, militar, policía. Aquí no se está salvando nadie en este paredón del siglo XXI. El hampa esta arrinconando al pueblo venezolano a un callejón oscuro y sin aparentes salidas. De nada vale que se grite a todo dar que este gobierno ha subsanado la deuda social, el hueco existencial que tenía Venezuela si esta “Revolución Bonita” no se puede disfrutar ni traducir en calidad de vida. De que le vale a los más pobres-y los ricos también- de la nación tener un fajo de reivindicaciones sociales si no pueden disfrutarlas, no pueden salir de las puertas de sus casas a respirar y a disfrutar esos logros obtenidos, porque al solo asomar la nariz los acaba el hampa, la intolerancia y la desidia. La violencia con que actúa el hampa común, al no existir una efectiva política de seguridad ciudadana, no se están percatando que esta desidia estratégica se lleva como gran lote a los más desasistidos y pobres del país por el simple hecho, que numéricamente es el grueso de la población y el principal soporte electoral del Gobierno Bolivariano. Y los demonios desatados no les importan si las propiedades arrebatadas son productos del libre mercado o de las políticas socialistas. Ellos arrasan con todo, la violencia en forma de hampa, es como la langosta que pasa y devora la tranquilidad de pobres y ricos, de chavistas rojo rojitos y oposición azul azulita, dejan sin respiro y sumida en profundo dolor a la madre en el hospital, la morgue y en la clínica, deja vacía de esperanza a la familia rica o pobre. De nada vale las clases televisadas al pueblo hablando de la dialéctica, porque en la realidad la única dialéctica que se está percibiendo es la dialéctica del caos hamponil, la destrucción de la familia, y su efecto irreversible, el plan tierra arrasada para construir al “hombre nuevo” que al final se quedará sin lógica sin ‘identidad’ y sin ‘inclusión’ porque todos estaremos excluidos por el ángel exterminador de la violencia hamponil desatada. Por eso este “boomerang” que hoy se le devuelve a la sala situacionales del “PSUV”, ya que un pueblo acosado por el hampa, no entiende de revolución bonita sino que está viendo a la revolución bolivariana, como símbolo de muerte y abandono en el más importante capítulo de los Derechos Humanos: El Derecho a la vida.
Señor Presidente Hugo Chávez, ha estado en estos 10 años en situaciones muy difíciles saliendo siempre victorioso, porque siempre ha contado con el apoyo del pueblo venezolano. Pero ahora tenga mucho “cuidado” hay una especie de “Gripe Porcina”, que se le está convirtiendo poco a poco, en su propia espada de “Damocles”. Y es Sr. Presidente la “aberrante inseguridad”, que sufrimos el día a día todos los habitantes de este bello país llamado Venezuela. Sr. Presidente de que le sirve a un pensionado, a un trabajador el incremento del salario mínimo, que sus hijos tengan educación gratuita, comprar barato en los Mercal, que les den asistencia médica gratuita en los módulos de Barrio Adentro, en los CDI, comprarse un celular el “Vergatario”, acceso a la vivienda digna con precios solidarios. Si cuando salen al trabajo, a la escuela o a una fiesta, o cuando regresan a sus hogares, llega el hampa y les quita la vida. ¿De qué sirvieron para esas víctimas y sus seres queridos, familiares que son víctimas del hampa todos sus cambios y beneficios por usted promovidos en su gestión? Sr. Presidente nadie le quita lo bailado y los avances y transformaciones en lo: Social, económico y político. Pero si usted no acaba con la INSEGURIDAD, que cada día cobra más víctimas, honestamente no le arriendo las ganancias. Pareciera que en el Alto Gobierno no hubiera nadie con las BOLAS bien puestas que acabe con este flagelo que esta exterminado al noble pueblo venezolano.
Porque no se promueve una Ley desde la Asamblea Nacional que mande a cadena perpetúa a los hampones asesinos. Así como usted Sr. Presidente trae del exterior expertos para construir fábricas socialistas, casas, tractores, vehículos etc. Porque no se trae unos expertos en seguridad pública, para exterminar: asesinos, hampones, violadores, secuestradores etc. Que diariamente llenan de luto a muchos hogares venezolanos.
Sr. Presidente Hugo Chávez, los próximos triunfos electorales, serán exitosos solamente si van a la par o de la mano, en la lucha y exterminio del hampa.
Percasita11@yahoo.es