Maza Zavala
y Bravo, a contrapelo de la tendencia general, por los criterios vertidos
en declaraciones públicas han roto lanzas con el proyecto chavista,
situación que los ha llevado, quieran o no, a coincidir con los más
acérrimos opositores del gobierno bolivariano, a quienes, últimamente,
se les ha ocurrido la peregrina idea de exigir la renuncia de Chávez,
planteamiento evidentemente concordante con la estrategia golpista y
desestabilizadora que impulsan los mas rancios sectores de la derecha
venezolana y de los centros de poder imperial.
Por supuesto
que no creemos que Maza Zavala y Bravo estén enmarcados dentro de la
estrategia derechista pero si tenemos claro que ambos son utilizados
por sectores de la derecha para apuntalar el proyecto político restaurador
que les anima, que en este momento se expresa en la simple idea de que
“hay que salir de Chávez a como de lugar”. La derecha sabe hacer
acopio de toda voz disidente para presentarla como integrante del coro
opositor, muestra de ello son las entrevistas que frecuentemente le
hace Marta Colomina, vía telefónica, al profesor Maza Zavala para
su programa en la cadena Unión Radio. Poniendo énfasis, en las últimas
semanas, en el cuestionamiento que el Dr. Maza le hace a las medidas
económicas cambiarias establecidas por el gobierno nacional, medidas
que, a juicio del profesor universitario, están dirigidas a aumentar
los ingresos que le permitirían al gobierno chavista obtener un triunfo
contundente en las venideras elecciones parlamentarias.
Evidentemente
en una sociedad democrática como la venezolana cada quien tiene derecho
a expresar y defender sus puntos de vista, claro está, teniendo presente
que en el fragor del debate político esas opiniones pueden ser utilizadas
a conveniencia de los factores políticos en pugna.
El peor
gobernante
Periodista,
poeta, académico, exparlamentario, exdirector del Banco Central de
Venezuela, investigador y autor de varios libros sobre la realidad económica
venezolana y latinoamericana, de vida austera y conducta cívica ejemplar,
el profesor Maza Zavala en estos últimos años, ya en el otoño de
su vida, se ha erigido en un acerbo critico de la gestión económica
y de la orientación que despliega el gobierno venezolano, tan es así,
que cataloga al presidente Chávez como “el peor gobernante que ha
tenido Venezuela” ya que en su opinión “no ha hecho nada bueno
por Venezuela. Creo que mejor fue la dictadura de Pérez Jiménez que
el gobierno actual de Chávez porque el dictador levantó una serie
de obras de construcción muy representativas”. (1)
Estatismo
ineficiente
Para Maza Zavala
el propósito gubernamental de implantación de un sistema calificado
como Socialismo del Siglo XXI no esta bien encaminado y hasta
ahora lo que se ha logrado con las acciones de gasto público desmedido,
el creciente déficit fiscal y la intervención generalizada del Estado
en el espacio económico, es un estatismo ineficiente, que no permite
el normal desenvolvimiento del sector privado cuyas actividades constituyen
el 65% de la economía venezolana.
Siendo mixta
la composición de la economía, donde el sector público es productor
de bienes y servicios y poseedor de medios de producción, circulación
y distribución importantes y donde el Estado tiene la facultad de regular
y orientar al conjunto con el fin de promover equilibradamente el desarrollo
económico – social. De acuerdo con el Dr. Maza, lo pertinente es
que el gobierno concerte con el sector privado en base a un plan viable
y de interés común donde además, los trabajadores y las comunidades
tengan una especifica participación; pero el gobierno liderado por
Chávez se ha orientado a cambiar el orden constitucional, que define
al sistema económico vigente como de economía social de mercado por
un sistema, el del llamado Socialismo del Siglo XXI, en el que el espacio
económico es copado por el Estado de manera determinante y la actividad
privada queda reducida a una dimensión marginal.
Etapa del desarrollo capitalista
Siguiendo a
Marx, según el enfoque del Dr. Maza Zavala, el socialismo no se establece
por decreto ni por empeño personal de un individuo o grupo sino en
virtud de circunstancias históricas que hacen posible el reemplazo
del capitalismo cuando este ha agotado su potencial de desarrollo y
entra en crisis; pero en Venezuela, según Maza Zavala, el capitalismo
no se ha desarrollado a plenitud, de donde se desprende que lo que procede,
en el marco de reformas profundas, es impulsar un desarrollo (capitalista)
que tenga como objetivo el bienestar integral del ser humano. (2)
¡Más claro
no canta un gallo! dice la expresión popular. El Dr. Maza Zavala pretende
con una visión etapista del proceso revolucionario que la presente
etapa esté caracterizada por el impulso al desarrollo de las fuerzas
productivas capitalistas para con su agotamiento posterior poder plantearse,
en esa nueva etapa, la meta socialista; de allí su desden al planteamiento
del Socialismo del Siglo XXI, que en su criterio no se corresponde ni
con el modelo teórico marxista ni con la realidad económico – social
del país.
Revolución
bolivariana antiimperialista y socialista
Ciertamente,
este no es el espacio para debatir o rebatir esta visión pero si es
necesario adelantar que el sector privado capitalista venezolano, históricamente
caracterizado, al igual que sus pares latinoamericanos, como dependiente
y atrofiado, sin “conciencia en si” como para impulsar o encabezar
un desarrollo autónomo, nacionalista del país, ha dado muestras más
que evidentes de su vocación entreguista y de su manifiesta tendencia
a la sujeción del capital extranjero, del capitalismo transnacional.
Desde el comienzo del proceso bolivariano, el sector privado, se negó
a incorporarse a un esfuerzo concertado promovido por el gobierno nacional,
dirigido a emprender un plan de desarrollo integral del país, más,
por el contrario, se ha negado a invertir y a participar de cualquier
iniciativa desarrollada por el gobierno nacional. Su disposición como
clase social, siempre ha estado volcada a la acumulación desmedida
de ganancia, a la especulación, al saboteo y a la desestabilización.
De allí, que
el esfuerzo del gobierno destinado a estimular la producción nacional
no puede ni debe estar en función de un sector que se resiste a dar
su concurso para el desarrollo del país concebido en términos de beneficiar
o favorecer a las grandes mayorías nacionales. El nuevo sector privado
inserto en la producción ha de surgir del propio pueblo, impulsado
por las políticas públicas diseñadas por el estado venezolano, de
las nuevas empresas de producción social con una nítida orientación
socialista.
La revolución
bolivariana tiene una definición antiimperialista y socialista simultáneamente.
En el contexto geopolítico mundial actual no se puede mantener una
posición persistente antiimperialista sin avanzar coherentemente en
la construcción de la sociedad socialista. La etapa del desarrollo
capitalista autónomo de los países dependientes solo sería posible
en otro contexto mundial, en el mundo de las maravillas, pero, en el
mundo real, el de las correlaciones de fuerzas concretas, el imperialismo
y las oligarquías lacayas no nos han dado ni nos darán cuartel.
¡Y tampoco lo pedimos!!
Por su parte
Douglas Bravo, avezado y legendario excomandante guerrillero, fundador
del Partido de la Revolución Venezolana – Tercer Camino, también
ha estado últimamente muy solicitado por los medios de difusión de
la derecha, como nunca antes en su larga trayectoria política. En este
caso tomaremos como punto para el análisis la entrevista que saliera
publicada en el semanario “La Razón” Nº 786 del domingo 31 de
enero de 2010.
Burguesía
paraestatal
Parte Douglas
Bravo en su análisis de que Venezuela vive una profunda crisis política
y económica que se expresa, por un lado, en el “desenamoramiento”
del pueblo con el gobierno, lo cual obliga a éste, en un año electoral
como el presente a hacer trampas para ganar las elecciones parlamentarias,
a promover un referéndum revocatorio o a escenificar un conflicto ficticio
con Colombia para justificar la suspensión de las elecciones. Y, por
otro lado, en cuanto a la crisis económica, el gobierno se ve impelido
a establecer una devaluación que le permita tener mayores ingresos
a costa de la alza brutal del costo de la vida no importando para ello
el detrimento de las condiciones de existencia de la población, a lo
que hay que agregarle, la creación de una burguesía paraestatal o
boliburguesía que se ha enfrascado en un combate con el sector bancario
financiero tradicional por el reparto de la renta petrolera aunque,
según el excomandante de las FALN, en la Venezuela actual el factor
real de poder siguen siendo las multinacionales petroleras cuyas ganancias,
ahora, son superiores al periodo anterior, el de la cuarta república.
En consecuencia, considera Douglas Bravo, por encima de la parafernalia
discursiva (Chávez llamó pendejo a Bush y al día siguiente entregó
la Plataforma Deltana) lo que esta en el tapete realmente es un pacto
con el imperialismo estadounidense al cual se han agregado nuevos imperialismos
como Brasil, China, Rusia. Lo que ha hecho Chávez es diversificar la
dependencia.
Nueva oposición
Sostiene Douglas
Bravo, que Chávez es el creador de un nuevo modelo de dominación en
el que tienen cabida empresas multinacionales, empresas mixtas, la boliburguesía
generada desde el Estado, sectores tradicionales de la burguesía (Cisneros)
y el populismo representado por Chávez.
En este cuadro,
teniendo como fondo el descontento popular que también rechaza a la
oposición tradicional, esta surgiendo una nueva oposición integrada
por sectores que se están desprendiendo del chavismo y por los revolucionarios
tradicionales, inclaudicables, que nunca han estado con este gobierno.
Una nueva oposición revolucionaria que es la expresión política de
una alianza social que se esta gestando con la participación de civiles,
militares patrióticos y religiosos revolucionarios. Una alianza cívica
– militar – religiosa.
Huelga general
Al profundizarse
la crisis, con la agricultura desplomada, la CVG quebrada, el aparato
industrial en el suelo, la crisis de energía eléctrica acentuándose,
etc, se producirá un descenso enorme de la popularidad de Chávez,
sostiene Bravo, de esta manera se estarán creando las condiciones para
el llamado a una huelga general que necesitan los obreros, empleados,
profesionales, campesinos y estudiantes que ya comienzan a entender
que no hay socialismo en el país.
Bases colombianas
Arguye Bravo
que las bases militares estadounidenses ubicadas en Colombia no están
destinadas para una invasión a Venezuela, sino para la dominación
en cualquier parte de la región y se activarán sólo cuando sean afectados
sus intereses, que no es el caso de Chávez que le hace favores al imperio.
Reflexiones
al canto
En la óptica
de Douglas Bravo, se esfuma o minimiza la amenaza que representa el
imperialismo estadounidense para los intereses nacionales, esta amenaza,
al parecer, solo serían vapores de la fantasía. Como hemos dicho,
enfoque como éste, quieran o no sus voceros, le sirven a los planes
imperiales y a sus oligarquías lacayas.
En el caso
de Maza Zavala llama la atención como un hombre de su entidad moral
y espiritual pondera el reclamo de obras de infraestructura o de concreto
desdeñando, en todo caso, los avances alcanzados en la lucha contra
la pobreza y la exclusión, es decir, para este científico social no
cuentan como logros sustanciales de este gobierno los resultados que
arrojan el Índice de Desarrollo Humano y el de Gini, certificados por
la Naciones Unidas y que son el reflejo tangible de la profundidad de
las políticas sociales impulsadas por el gobierno bolivariano; desconociendo,
de paso, los avances acumulados en renglones infraestructurales.
Pero yendo
más al fondo de ambos enfoques observamos que mientras el profesor
Maza Zavala reclama el escaso apoyo que se le ha brindado al sector
privado de la economía, es decir, a la burguesía nacional; el exguerrillero
Douglas Bravo, precisamente, pone el acento en la critica al surgimiento,
durante este gobierno, de lo que él llama la boliburguesía o burguesía
paraestatal. En todo caso, lo que si queda suficientemente claro, es
que disidencias como éstas, provenientes de sectores de izquierda,
son utilizadas provechosamente por la derecha para aupar su estrategia
desestabilizadora convirtiéndolas en buena caña para su molienda golpista
y conspirativa.
Notas:
(1) Entrevista en el periódico Notitarde, reproducido por Reporte de la Economía en la edición del18/01/2010
(2)“Economía
en suspenso”, periódico “El Nacional”,
cuerpo A, Pág.8. 28/01/2010