Entre socialistas, entre militantes maduros, sabiendo que el voto es estratégico en esta etapa de la Revolución, concientes que este proceso interno debe posicionar al PSUV como el Partido de la participación de la democracia socialista, hoy más que nunca debemos saber resolver las contradicciones. No somos enemigos. No son necesarias las descalificaciones inmaduras.
Lo cierto es que en una campaña tan corta es difícil lograr el número de actividades necesarias para llegar a la mayoría de la militancia de base.
Las agendas de los precandidatos se elaboran en un pequeño comando para poder coordinar y poder ser lo más eficiente posible. Lo primero es crear equipos parroquiales y cuantificar los aportes voluntarios (tiempo, vehículos, logística, propaganda). Lo siguiente es planificar en cada parroquia diversas actividades, que puedan dar la mayor cobertura territorial en los sitios de mayor militancia PSUVISTA.
Creemos que, en esas actividades puntuales se cumplan las metas de: cobertura al mayor número de militantes, de transmitir las líneas fundamentales de un programa revolucionario coherente y necesario en el nuevo escenario parlamentario, mostrar una campaña humilde y modesta, pedagógica y que tribute a la unidad en torno al Líder Presidente, Comandante Hugo Chávez Frías y al programa del PSUV.
Lo ideal es que las actividades se planifiquen y se cumplan las metas planteadas, pero no siempre es como esperamos. Muchos precandidatos aprovechan las actividades programadas por el Comando de campaña de Fernando Soto Rojas, se presentan en los actos, e intervienen con un derecho de palabra, el comando de campaña caracterizado por su amplitud y solidaridad, organiza el derecho de palabra a los precandidatos, -algunos invitados y otros autoinvitados-, con la condición que nuestro candidato cierre el acto, por ser quien hizo el esfuerzo de conseguir el local, organizar el acto, convocar, garantizar sonido, organizar la participación de cultores populares que voluntariamente se presentan en apoyo al candidato Fernando Soto Rojas.
Lamentablemente algunos precandidatos aprovechando el esfuerzo de un equipo de trabajo ajeno, creen merecer privilegios y pretendidos derechos de participación. Ejemplo de ello fue lo acontecido en el Cuartel San Carlos: Se retira a mitad de actividad, no participa como los demás en el derecho de palabra previo al cierre, luego regresa en pleno cierre del acto, acompañado de un grupo de jóvenes a exigir un derecho de palabra, -recordamos en esa actitud, los viejos métodos y maniobras partidistas del siglo pasado-. Lo peor es que al negársele el derecho de palabra para cerrar el evento, comienza a vociferar ofensas, poniendo en entredicho la condición revolucionaria y la ética de Fernando Soto Rojas y su equipo de campaña. Y lo peor es que incorpora el insulto como contenido en su campaña.
Queremos recordarle al compatriota precandidato que somos militantes del mismo partido, que luchamos por los mismos objetivos, que no somos el enemigo, que no hay que perder la calma y excederse en insultos y descalificaciones innecesarias, mucho menos al combatiente Fernando Soto Rojas, quien ha tributado su vida a la Revolución, y que tiene una historia de vida impecable y coherente, el respeto es fundamental en esta coyuntura electoral interna, la madurez es fundamental para el equilibrio, la racionalidad debe imperar y si hay alguna contradicción y una posible violación de normas, existen las vías y medios en el Partido para canalizarlas.
Sin embargo insistimos que, a pesar de las emociones exacerbadas propias de situaciones de presión, que puedan generar contradicciones, que por lo demás creemos son frecuentes en situaciones de “competencias electorales internas”, donde se manifiestan las diferencias y visiones políticas. Debemos ser capaces de resolverlas con madurez, no ceder por la presión, actuar con la razón, con equilibrio y con mucho respeto. Vendrán situaciones de presión mayores en la Asamblea Nacional, de confrontación, de lucha psicológica intensa. Y para enfrentarlas es fundamental una gran madurez, preparación y sobre todo racionalidad.
Ahora es fundamental concentrarnos en la convocatoria para la movilización del voto PSUVISTA, en poner a un lado las pasiones, vernos como compañeros e iguales, prestos a consolidar la unidad dentro del PSUV.
POR UN PUEBLO LEGISLADOR, CON LA CONVICCIÓN QUE LA MILITANCIA ES CONCIENTE, Y QUE ELEGIRÁ CON MADUREZ Y RACIONALIDAD EL CANDIDATO DE SU PREFERENCIA, SIN PASIONES.
PATRIA SOCIALISTA O MUERTE
VENCEREMOS
Abril 2010