Pildoritas 195 (año VII)

También en la guerra económica hay funcionarios que se han dejado reclutar por el enemigo

Las revelaciones hechas por el Presidente al pueblo venezolano y a la comunidad internacional, relacionadas con el horrendo crimen del diputado más joven de la AN, no dejan duda de que el mismo, forma parte de una conspiración internacional  que tiene su centro de operaciones en Colombia y cuyo operador no es otro que Álvaro Uribe, padre de ese monstruo llamado paramilitarismo, que tantas muertes ha causado, antes con el cuento de combatir la guerrilla y ahora después de un parapeto de entrega de  las armas y reinserción, convertidos en células para el sicariato  y a la orden de la ultraderecha no sólo en la propia Colombia sino en toda la región. Esa gente, adoctrinada y entrenada no sabe hacer otra cosa de matar, son mercenarios y brazo armado de la ultraderecha, que lamentablemente ha aparecido como una de las formas para intentar minar a la revolución con operaciones criminales como las perpetradas, contra personajes destacados del Proceso Revolucionario, la más reciente contra una figura como la del diputado más joven de la AN, quien se había convertido en icono de la juventud venezolana y latinoamericana y en un potencial humano inscrito entre quienes con toda seguridad, con sus características y dotes de liderazgo,   garantizarían la irreversibilidad de la Revolución.

No cabe duda que en la lista de la que habló uno de los terroristas confesos, como es Lorent Gómez Saleh, pupilo de Uribe, estaba Robert, no cabe duda que los atentados contra Diosdado y Héctor Rodríguez, también forman parte de las estrategias implementadas y ordenadas por la mente maléfica de un personaje como él, que ha sido designado por el imperio para que juegue el sucio papel de exterminio de cuadros políticos abiertamente anti imperiales y conductores de un pueblo hacia destinos de libertad y verdadera independencia. Por otro lado no olvidemos  que ha quedado demostrado, por propia confesión de personajes  que conforman el mismo equipo con Uribe, como es María Corina Machado, en los mails dados a conocer hace algún tiempo por el Ministro Rodríguez Torres, que tienen mucho dinero, tanto que los montos son ”superiores a los del gobierno” y se supone que ese dinero no es para obras sociales, sino para eventos  destinados a causar terror como el terrible y más reciente contra Robert y su compañera.

Así pues, que una vez descubiertos los macabros planes, una vez ejecutada una de las primeras muestras de que ya no son simples presunciones o rumores de que la estrategia es a muerte y cuando no quedan dudas de donde es que vienen las ordenes para proceder, y quienes son los ejecutores, se hace necesario y urgente la toma de medidas y acciones contundentes y extremas, como las que una vez tuvo que tomar nuestro primer Libertador y que seguramente tomaría nuestro segundo si estuviese  físicamente entre nosotros, como fue el decreto de guerra a muerte, acción parecida a la  que  nuestra Constitución prevé en situaciones de suma gravedad como la que hemos comenzado lamentablemente a experimentar  

Por un lado una guerra económica que se está enfrentando con éxito en algunas aéreas, pero que no logre bajar los índices de inflación ni plenar los anaqueles de los expendios, grandes, medianos y pequeños de todos los rubros, en los que se ga logrado ese objetivo no son los más sino la excepción, por lo menos es lo que observamos aquí en el Táchira y que por lo que sabemos también en otros estado del país, hay areas como las de medicamentos, artículos ferreteros, repuestos para vehículos y todo tipo de maquinarias, ropa y calzado, útiles escolares a los cuales no lega la mano de la justicia y si llega apenas  da la espalda, siguen en su empeño unos de enriquecimiento rápido, otros sumados a la conspiración pues por ejemplo cuando los multan, simplemente pagan la multa u en menos de lo que canta un gallo reponen su monto con creces.

Aquí por ejemplo,  en las calles, siguen las ventas de combos de leche y la primera autoridad del SUNDEE antes INDEPABIS, ni siquiera procesa las denuncias, los comercios donde se venden cauchos lo hacen con precios escandalosos de hasta 6 mil bolívares la unidad por los de ring 13,14 y 15. Se denuncia y jamás sucede nada y así en todo, la fallas en medicamentos son cada vez mayores, buscar anti hipertensivos resulta imposible y cuando por casualidad se encuentran es a precio de oro, eso lo sabe la delegación del SUNDEE pero no se ven acción tendentes a frenar la locura que se ha desatado como una plaga en todo el comercio regional..

Es verdad que se le han dado duros golpes al contrabando en lo macro, pero ello no se ha reflejado para nada en precios justos para el consumidor.

Por otro lado la guerra silenciosa a través del turismo que está dejando saldos dolorosos en nuestras filas revolucionarios, y que no cabe duda es la respuesta de la sociedad  macabra que se ha constituido entre los contrabandistas en su mayor número también paramilitares y sectores políticos de derecha que ven la oportunidad de por la via de la violencia crear condiciones para asaltar el poder con la venia y el respaldo de factores internacionales al servicio del imperio.-

Esto es la verdad verdadera, que en muchos casos recibe abono, por la ineficacia o complicidad de funcionarios que por su pasividad dentro de la batalla nos obliga a pensar que se han dejado reclutar por el enemigo, igualito que lo hizo el escolta de nuestro amado Robert Serra.



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Saúl Molina


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