Las colas que se forman en la frontera de Venezuela con Colombia, a raíz del cierre decretado por el Presidente Maduro, muestra de manera efectiva cual es la verdadera causa de la crisis inducida por la guerra económica que se aplica contra nuestra patria y, quien la promueve, articula y perpetra siguiendo un macabro plan de destrucción contra la Patria venezolana, ideado por el imperio gringo en sus tanques de pensamiento, y aplicado con absoluta saña y maldad por la derecha venezolana.

Si alguien hubiera abrigado alguna duda sobre las razones de la supuesta escases y la generada falsa inflación que le induce la derecha fascista a la economía venezolana, manipulando todos los aspectos relacionados con el suministro de la cesta básica y otros elementos de la vida cotidiana de los venezolanos de todos bien conocidos, además, extrayendo ilegalmente derivados de hidrocarburos producidos en Venezuela, a precio subsidiado por el estado venezolano, que eventualmente han convertido al hermano país en un exportador de gasolina sin tener capacidad de refinación de petróleo en esa país hermano, solo, para culpar al Presidente Maduro y la revolución como causantes de esta supuesta crisis. La consecuencia de ésta medida de cierre de la frontera y el Decreto que impone el Estado de excepción en los Municipios, Bolívar, Ureña, Junín, Capacho Libertad, y Capacho independencia, marcado con las colas desesperadas de personas esperando el cese de la medida del gobierno de Maduro, para entrar a nuestro territorio a realizar las fechorías que dañan nuestra economía, demuestra lo acertado de la medida y el error que cometen algunos desprevenidos venezolanos quienes ante un ataque a su estómago y a deseo de ponerse en unas monedas, le hacen el trabajo a la oposición de desestabilizar al Gobierno revolucionario y socialista del Presidente Maduro.

La consecuencia del cierre de la frontera, ha afectado todo ese nefasto tinglado de negocios ejecutado por venezolanos vende patria y colombianos que traslada a nuestra Patria sus falencias a las cuales les somete un estado que se rige por las indicaciones de la potencia hegemónica gringa, que se caracteriza por inducir a otros pueblos a satisfacer sus intereses – del Imperio- con la complicidad de gobiernos y castas que durante siglos se han dedicado a depredar sus propias patrias para entregárselas al imperio sin que este haga mucho esfuerzo, su único esfuerzo es enamorar y comprar las voluntades de estas castas y gobiernos, con espejismos y dadivas. Ello deberá hacerle cambiar su percepción acerca de la situación deplorable que muestran las colas la especulación y la humillación de los consumidores venezolanos, quienes hasta ahora sumisamente le han estado abonando el camino de la destrucción de la revolución al hegemónico, hambriento y voraz imperio gringo y adláteres europeos.

Con esta demostración los confundidos venezolanos, deben ahora, asimilar la verdad, al comprobar que estos actos delictuales con los cuales nos agrede la derecha fascista son un vector que usa el imperio para desestabilizar la patria, para conseguir que sea el propio pueblo que en un acto de suicidio, se inmole destrozando su revolución libertadora. Debe el pueblo venezolano ver y aprender de las experiencias del Norte de África, donde varia naciones pasaron de ser naciones constituidas y en franco y evidente progreso, en Estados fallidos gracias a la acción destructiva de sus propios ciudadanos quienes oyendo las predicas mediáticas del imperio derrocaron directa e indirectamente sus propios gobiernos, convirtiéndose, por no saber defender sus patrias en unos parias que hoy vagan por océanos y territorios ajenos arriesgando y perdiendo la vida, en busca de la seguridad que no supieron defender con dignidad patriotismo y enjundia.

Ese es el futuro que nos depara la indigna actitud de muchos conciudadanos que se han entregado a la moda ridícula de bachaquear, raspar cupos y conspirar contra la revolución. Quienes no ven estos ejemplos y se creen el cuento, que el planeta es una aldea global que ya cuenta con un jefe de estado que detenta el propio gobierno imperial. De no asumir, este sector de la población, una actitud decorosa que demuestre que tiene más dignidad que hambre, esta patria se perdería y, el destino para este pueblo será enfrentarse a las piedras, las balas, los escupitajos y el desprecio del imperio cuando en busca de salvar sus vidas intenten superar los muros que el imperio les colocará a sus intenciones de llegar a esa meca para lograr una mejor vida que ya ellos tenían en sus naciones y que no supieron defender ni proteger, o, ¿Es que acaso, no es ese el ejemplo que nos muestra la migración miserable que protagonizan agonizantemente los pueblos africanos? Ello hoy nos hace recordar que "solo el pueblo salva al Pueblo" y como dijo el Presidente Chávez en la toma de posesión de la presidencia de Venezuela ante la nueva Constitución que se dio nuestro pueblo en libérrimo ejercicio de soberanía: "Sin pueblo, no hay Patria". Debemos ser firmes para evitar seguir usando la cultura capitalista para tomar decisiones, que produzcan justicia social, ello es una aberración. Por ello insistiremos, que el Socialismo del siglo 21 solo será un hecho de Justicia social, cuando todo el pueblo asuma a plenitud que la Salud, la educación, la alimentación, el ocio y recreación y todos los otros derechos humanos del pueblo sean objeto de lucro para una minoría capitalista.

¡INDEPENDENCIA Y PATRIA SOCIALISTA Y SOBERANA!

¡CHÁVEZ VIVE!

¡LA PATRIA SIGUE!

¡VIVIREMOS Y VENCEREMOS!

William castillo Pérez (el indio)