Un caso mas a la larga lista de decisiones y conductas de la administración de justicia actual (Incluye Fiscalía y policías), se ha dado en Ciudad Guayana, Estado Bolívar, en la parte laboral, por parte de la Jueza Primera de Juicio de ese circuito, de apellido Rivero, en donde a esta ciudadana no le importó la justicia (Fin ultimo del derecho en un estado socialista, o sea, favorecer al débil jurídico), y de paso dando a demostrar que no tiene ni la mas mínima idea de la diferencia que existe entre utilidades convencionales y utilidades legales, en materia del trabajo, cuestión esta que un estudiante de derecho entiende muy bien; esta jueza, sin importarle el socialismo, repito, sentenció en contra de los trabajadores de SIDOR, en el caso de las utilidades liquidas; en otras palabras, se pudiera decir que también sentencio a favor de la transnacional Techint, antigua privatizadora, ya que las utilidades liquidas reclamadas, es de la época de esta (2004, 2005, 2006 y 2007), y la nación, hoy propietaria, tendría una acción de repetición en contra de esa empresa precarizadora y neoliberal.
Pero resulta que el caso del cual estamos hablando, no es un caso cualquiera, en donde la jueza de marras pudiera alegar que ese es “su criterio” y del expediente no trascendería. Estamos hablando de un caso importantísimo, vital, ligado a la vida de las tres principales ciudades del Estado Bolívar (Ciudad Bolívar, Ciudad Guayana y Upata), en donde mora el 85% del electorado Guayanés, y en este año electoral, de unas elecciones que no son cualquier cosa, el 26-S, en donde el mismo comandante ha dicho que allí se juega el proceso revolucionario.
Esta es una decisión, tomada conscientemente por una jueza, que seria infantil pensar que ella no sabe las consecuencias políticas, y sobretodo electorales de las mismas, una jueza realmente de derecha, de las tantas y tantos que hay (Aunque griten como locos “Uh, Ah Chávez no se va”, en el auditorio del TSJ), y en el resto de la administración publica. Infiltrados y enemigos a todo lo que huela a izquierda, socialismo o tan solo pueblo o trabajador.
Pero seria ingenuo, pensar que esta jueza actuó sola, o que la decisión no fue “sugerida” o “consultada”; aunque en el poder judicial es mas notorio, por ser de mayor penetración la infiltración, pero estamos ante un entrismo de toda la administración publica y del aparato político, por parte de la derecha, la cual es monitoreada y tutelada desde la embajada de USA, en Caracas, que Mario Silva (El de La Hojilla), ha llamado “Operación Desencanto”, que consiste, en que funcionarios subalternos y no tan subalternos y de cierto peso, en donde estarían los casos de los jueces, toman decisiones y realizan actuaciones y conductas no solo contarías a la ética y al espíritu progresista y de avanzada de la constitución bolivariana sino que lesionan y agreden al pueblo, a las comunidades, al colectivo, como es el caso de la sentencia de las utilidades liquidas de SIDOR de la era de la nefasta y contra natura privatización. Decisión que por supuesto le arrima la canoa a la derecha, y en especial a quienes tienen planteado una guarimba sindical en Guayana, en lo inmediato y por supuesto mas todavía, a quienes quieren sacar ventajas electorales, en contra del proceso, en Guayana, el próximo 26-S; y no debe quedar la menor duda que esa es la intención de la decisión de la jueza Rivero.
Estamos ante una serie de jueces de derecha, aunque se mimeticen como el camaleón, que saben muy bien el “trabajo” que están haciendo, pero siempre yo digo; para que haya un vivo tiene que haber un tonto, cuando el tonto no quiere, no hay vivo que valga.
franciscosierracorrales@yahoo.com.ar
