La cultura de la impunidad sigue imperando en nuestra patria. Si en algún
sector de la sociedad la huella de la vieja república sigue intacta es
justamente en este. Quedé atónita, anonada, consternada cuando Guaicaipuro
Lameda, uno de los promotores del asalto a Miraflores al 11 de Abril de
2002, dijo que: “Sí el Fiscal Danilo Anderson estuviera vivo lo demandaría
por “daños y perjuicios”. Seres viles, como este, no se han conformado con
su vil y canallesco asesinato, sino que aún después de muerto quieren
seguir vilipendiándolo y continuar manipulando la opinión pública.
Todos vieron a este señor el 11-A con un megáfono dirigiendo la marcha que
partía desde Chuao, ex sede –por fortuna- de Maraven, con todos los otros
connotados “dirigentes políticos”, ahora “dizque” perseguidos por el
régimen...como Carlos Ortega, el vicealmirante –marinerito de agua dulce-
Molina Tamayo, la gentuza del petróleo y otros que se hacen llamar
“dirigentes de la política nacional”, entre otras cosas, porque en esos
momentos reclamaban pantalla y pase de su factura por sus méritos. Negar que
este sujeto estuviera en Miraflores es como querer tapar el sol con un dedo.
Además, cuando no logró su objetivo, en cuanto sintió la presencia de
pueblo, escapó como cobarde que es, de parrillero en una moto de la Policía
Metropolitana y salió corriendo a los medios televisivos haciendo llamados a
la colectividad y a sus compañeros de armas.
De los testimonios ofrecidos por los protagonistas acerca de las filmaciones
efectuadas en la casa de José Ovidio Rodríguez, alias Napoleón Bravo, donde
se filmó el vídeo del general González González llamando a desconocer el
gobierno constitucional del Presidente Hugo Chávez, supo Venezuela y el
mundo. Igual el de los militares golpistas anunciando desconocer el
gobierno del Presidente Hugo Chávez Frías, por estar “masacrando al pueblo”,
-para esa hora (2:30 P.M. del 11-A) ya habían 6 muertos según estos
golpistas, cuando el primer muerto, como todos saben fue Jorge Tortoza y
ocurrió a las 3:25 P.M. ¡Claro! Ellos sabían todo pues ellos habían
contratado a los franco tiradores ya que todas las muertes fueron certeras,
sólo posible con disparos hechos con mira telescópica . Todo esto ocurrió
amparado y apañado por los y las periodistas de los canales de televisión
comprometidos con la masacre.
El Alcalde Leopoldo López (de Plumero Injusticia), se lució explicando como
habían sustraído las llaves de autobuses de modo que los autos que bajaban a
Caracas desviaran su tráfico hacia Fuerte Tiuna para congestionar éste y que
no pudiera salir ningún vehículo en auxilio del Presidente. El país vio al
general Rosendo haciéndose el loco cuando el Presidente le llamaba por
radio, igual que se hace el loco hoy para no pagar los dineros que le debe
al Banco Industrial de Venezuela y haciéndose la víctima cuando le pidieron
que desalojara la vivienda que ocupaba en el mismo Fuerte Tiuna.
Verdaderamente cosas que no ocurrirían en ningún país del mundo sin que
estos personajes estuvieran tras las rejas. Angustioso.
Siendo la Justicia la Reina de todas las virtudes como decía nuestro Genio
de América, Simón Bolívar, a Venezuela tendrá que llegar un príncipe azul y
despertar a la princesa con un beso en los labios. Tenemos ya más de cien
años esperando que se haga justicia para los miles de crímenes cometidos por
los delincuentes de cuello blanco, mientras que el hijo de Juan Pueblito se
pudre en las cárceles por no tener fortuna para hacerse de un abogado que
los defienda.
La Fiscalía General de la República tiene a los “presuntos autores
intelectuales” del asesinato del Fiscal Danilo Anderson. Un crimen horrible
de terrorismo. Sin embargo, por gracia de la justicia, se encuentran siendo
juzgados en domicilio, mientras la otra que mejor baila, la Poleo, se
escapa de Venezuela, pasando las mil y una, cual Indiana Jones, para sacar a
su “hijita” y liberarla del trauma que estaba sufriendo la “pobrecita
criatura”.
Es abominable, detestable, aborrecible hablar de las cosas que ocurren en mi
país. En Venezuela hay más crímenes impunes que habitantes tiene el
país...sin exagerar...es una vergüenza también que el “presunto” homicida
del único Medallista Olímpico en Natación Rafael Vidal, aún se encuentre en
autos. Para no mencionar las “vacaciones que disfrutará en casa” el
monstruo de los Palos Grandes en el caso de la señorita Linda Loaiza. Por
fortuna, muy amablemente, Capriles Radonski ha dicho que “Linda no está
sola, que ellos están con Linda” ¿Pero? Será la Linda de Daniel Santos...
Aunque la conseja popular dice que la justicia tarda pero llega...espero que
estos criminales paguen por sus crímenes y que al fin podamos decir que como
decía nuestro Padre Libertador: “...El ejercicio de la Justicia es el
Ejercicio de la Libertad...”