En el proceso revolucionario hay muchas cosas que funcionan bien y otras tantas lo hacen menos. Un proceso como el bolivariano signado por la originalidad está sujeto a andar y desandar muchos caminos. Eso es comprensible y esperar una suerte de autopista lisa y simple es poco menos que una majadería. Hay mucho por inventar, ensayar, corregir y volver a intentar. Eso está muy claro. Que los errores surjan en el ámbito del ejercicio cotidiano del proceso creativo es comprensible. Lo que es incomprensible e inaceptable es que algunas "cosas" estén pasando para el máximo aprovechamiento de enemigos jurados de la Revolución. Lo intolerable es estar enriqueciendo al enemigo, haciéndolo poderoso sabiendo que lo es.
Hay un sector revolucionario que invoca una supuesta oposición democrática a la que hay que tenderle puentes. La memoria inmediata sugiere que esto no es así. Acontecimientos terribles como el golpe de estado de abril de 2002 o el brutal sabotaje petrolero los mostró juntos y bien ligaditos en los fines y propósitos criminales. No se sabe cual es el propósito de semejante política del perdón a ultranza. Lo que si es de bulto es que la impunidad y el perdón sólo propician nuevos delitos. ¡A lo que vamos! Cada semestre la banca hace pública su gestión y resultados. El último semestre de 2006 muestra una banca con utilidades espléndidas que rayan en lo grotesco. No deberíamos sorprendernos. En general todos los sectores de la economía nacional vienen presentando saldos positivos históricos, no en vano la economía venezolana lleva once trimestres continuos batiendo récords. ¡Que los bancos estén ganando no es sorpresa! Lo sorprendente, incluso lo inaceptable, es que esas ganancias estén siendo proporcionadas por el gobierno revolucionario. ¿Hay alguien que haya olvidado a esos banqueros exaltados, saltando como adolescentes ante un grupo musical y gritando "te amamos Pedro", mientras se asesinaba el estado de derecho en aquel salón y al pueblo en los barrios?, ¿Acaso ya se olvidaron las colas y el secuestro a que sometieron a los usuarios durante el "paro patronal" de diciembre de 2002?
De acuerdo con el informe financiero de SUDEBAN, el banco Mercantil (Gustavo Marturet) obtuvo ganancias por 925 millardos, fruto de los depósitos del gobierno que ascendieron a un aproximado de 11 billones de bolívares. Esto traducido a dólares arroja un aproximado de 431 millones de dólares de ganancias en un semestre…¿nada malojillo…cierto?. Banesco, el banco del insigne demócrata Juan Carlos Escotet, recibió depósitos de entes estatales por 10 billones, significándole ganancias por 1.292 millardos de bolívares. Otro a quien no le fue nada mal ¿cierto? ¡Qué sabroso es conspirar! De tercero en la lista está el Provincial, propiedad del Banco Bilbao Vizcaya. A este ¡pobrecito! sólo le correspondieron 9 billones en depósitos de entes públicos… ¿seguimos? Se dirá que debemos incluirlos, que hay que olvidar, que es bueno el borrón y cuenta nueva, pero…nos hacemos algunas preguntas:
a) ¿No existen los bancos del Estado para hacer esas transacciones?
b) ¿No es dinero de los venezolanos y por tanto es a los venezolanos a quienes debe beneficiar?
c) ¿Cuántas casas, simoncitos o módulos de Barrio Adentro se podrían construir con ese dinero?
d) ¿Por qué hay que hacer estos depósitos en bancos que sabemos utilizan su poder para seguir conspirando?
e) ¿Esto significa alguna forma de vacuna?
f) ¿Hay que hacerlo con estos banqueros porque son "democráticos" para premiarlos por no ser "golpistas"?
g) ¿Habrá quienes estén recibiendo una buena tajada de estos negocios además de los banqueros?
Entendemos -eso se nos ha dicho- que estos banqueros son "buenos". Puede que lo sean. Vamos a concederle la presunción de inocencia contra toda la memoria histórica. ¡Aún así! ¿Por qué? ¿Por qué hay que llenar las alforjas de unos enemigos naturales del socialismo? ¿Por qué no se dicta una providencia que obligue a manejar todas las transacciones bancarias a través de los bancos del Estado? ¿Falta la plataforma tecnológica? ¡Instalémosla! ¡Construyamos el sistema financiero que maneje los recursos mil millonarios del Estado y por ende de todos los venezolanos! Pretender que con eso se está comprando la aceptación de estos canallas es semejante a darle pautas publicitarias a Globovisión o RCTV –hasta eso se ha hecho- pensando que dejarán de conspirar. No cejarán en su empeño. Un gobierno revolucionario es enemigo de los intereses de estos criminales y no abandonarán jamás la tarea de extirparlo. Todo lo demás es una estulticia y un crimen.
