La cobardía del clan que conforma el círculo perverso del alto gobierno no tiene tamaño, no sólo se esconden tras la falda de fusil para arremeter contra cualquier venezolano que se atreva a disentir de sus atolondradas medidas, es mucho tamaño catalogarlas como políticas, desconocen y violan la constitución cada día, Cobardes incapaces de someterse a su texto. Humillan, vejan, maltratan, torturan y matan sin que les tiemble el pulso, ni se despeinan, Cobardes que recurren al exterminio del contrario como vía de escape al debate y la confrontación de ideas.
Los venezolanos no sólo debemos soportar las consecuencias de tanta incapacidad, maldad, inhumanidad, ineptitud, crueldad, ruindad, bajeza, encima tenemos que oír a un funcionario del círculo de poder amenazando a cualquier venezolano que se atreva a pensar que un preso político murió en las manos de sus carceleros como consecuencias de los excesos y maltratos infringidos. No sólo se equivocan de punta a punta cuando creen que pueden decretar la conducta de la economía, mucho mas grave aun es creer que pueden decretar el estado de conciencia de los venezolanos.
¿A qué investigaciones hacen referencia cuándo intentan dar credibilidad a sus amenazas? ¿A las realizadas por el mismo circulo perverso que se despacha y se da el vuelto? entiendan que lo que dicen contrasta con una realidad que no pueden ocultar, con sus amenazas pueden callar una que otra voz, pero somos millones que cada día vemos, oímos, sentimos y lo más importante, pensamos. Sus amenazas plasmadas en decretos económicos nos tienen en la ruina material, pero nada podrá arruinar nuestro estado de conciencia.
Hablando de estados de conciencia, hay una pregunta, entre muchas, que diariamente me formulo y no tengo la respuesta ¿Cuántos de los miembros del alto gobierno avalan y respaldan las torturas y maltratos a los presos políticos? Quiero creer que son una minoría que atrapa a una mayoría que no sabe como salir del laberinto. Esta fase oscura de la Republica tiene su fin, como todas, tendremos que empezar de nuevo y para ello estamos la mayoría de los venezolanos.
