Nos ha sorprendido el año 2006 con los desempeños de las salas judiciales, que según el criterio de los oposicionistas al gobierno y la revolución liderada por Hugo Rafael Chávez Frías son afectos al gobierno ejecutivo central. Los hechos desdicen tales afirmaciones y nos aflora un panorama de total impunidad por un lado y de injusticia por el otro, sembrando desesperanza entre todos. Los hechos, entre otros, que colmaron las malas noticias judiciales los citamos:
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En este año se escaparon unos condenados por los hechos de 2002, entre ellos "el charrasquea´o" Ortega.
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Muy a propósito que hoy se conmemora la movilización del barco petrolero "Pilín León", hoy "Negra Matea", recientemente un juzgado dejó en libertad a los irresponsable que ocasionaron el varamiento terrorista de ese barco frente a la costa de Maracaibo (frente al parque paseo del lago y puerto de Maracaibo, costa de la avenida el Milagro) sin cargos que lamentar para ellos.
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Los resultados incompletos del caso del fiscal bueno
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Los resultados del juicio contra Capriles Radonski por el caso de cercar un punto fortificado (en este caso la embajada de la hermana república martiniana de Cuba), para impedir que salgan quienes están en él o que reciban socorro de fuera, que según el dicicionario de la real academia de la lengua española se llama asediar (http://buscon.rae.es/draeI/SrvltGUIBusUsual?TIPO_HTML=2&LEMA=asediar)
De tal manera que 2006 se pudiera llamar el año de la impunidad, incluido en un período, históricamente hablando, que comienza desde la caida de la dictadura de Marcos Pérez Jimenez hasta la actualidad.
Creo que entre los deseos de las 12 uvas del tiempo el 31 de diciembre a las doce de la noche, una será para que se sustituya el poder y sistema judicial por uno que se identifique con la filosofía de la constitución expresada en su preámbulo, de justicia social, que suponemos incluye a toda la comunidad de Venezuela y su responsabilidad con un verdadero poder y sistema judicial que haga justicia real.
