El siguiente relato corresponde a la experiencia de un amigo a quien pedí permiso para recogerlo en esta entrega, dice: fui a firmar por los migrantes en la Plaza Bolivar de Barquisimeto y, especialmente por quienes engañados y vejados han sido enviados a El Salvador, donde un cachorro del imperialismo ha construido una tenebrosa cárcel y ahí fueron a parar unos 250 inocentes y valientes migrantes venezolanos; al momento de ofrecer mis datos personales me puse a llorar, literalmente. No me pude contener.
Entonces los miembros de organizaciones gubernamentales y populares que promueven la actividad me ofrecieron agua y golpecitos en la espalda para que me tranquilizara; no tengo familiares en esa condición de arrestados o expulsados como enemigos de USA, aunque sí en otro país del sur, que si no fuera por él no hubiera tenido para los remedios y la comida diarios en el mes en estos últimos años, por lo que no me imagino cómo estaríamos de tristes en la familia si fuera uno de los expulsados del norte. Una tragedia!
Es lo que viven las familias particulares de esos amigos de todo el país con sus hijos, primos presos en San Salvador. El gobierno bolivariano tendrá que hilar muy fino para liberar a todos esos hermanos nuestros presos; y ya está en esa tarea diplomatica.
Por otra parte, sí tengo algunos amigos y ex alumnos que viven y trabajan en USA, aunque están muy bien por allá, gracias a Dios. Eso sí, escondidos o poco visibles. Osea, no es que estén muy bien, tienen que andar con mucho guillo.
Eso no es vida, como bien dice Álvarez Guédez, el humorista cubano que describe a su modo las vivencias de los latinos en esas tierras del Tío San.
Llenar esa planillas da sentimiento, en verdad, no es una cosa automática y fría, un trámite burocrático con esos cuadernos gruesos, es una actividad vital a modo de un desagravio a los valientes migrantes venezolanos que en una miríada de espíritus desencantados del "Socialismo del Siglo XXI" buscaron progresar en otros lares con su trabajo honesto y bien remunerado en varios países de América Latina, Europa y Estados Unidos de Norteamérica;
Aquí en su propio país la economía fue destruída, por responsabilidad de unos y otros actores políticos y agresiones externas, lo que ha determinado salarios precarios, dígame el sueldo de los docentes universitarios y de todos los niveles educativos venezolano; por eso un buen grupo de obnibulados por la ideología liberal y hasta odiando hasta más no poder las ejecutorias del gobierno bolivariano, creyeron que migrar era una opción válida de progreso. En parte sí.
Repetimos que a muchos les ha ido muy bien, a costa de grandes sacrificios, claro está. Igualmente porque algunos han sido más estratégicos, la toma de decisiones ha sido mejor, Pero como en eso siempre hay un gran riesgo, a un grueso número en verdad no les ha ido bien del todo.
Una jovencita abogada con quien compartía la escolaridad de la Maestría en Seguridad de la Nación señalaba por ahí en 2022 o 2023, en una sesión que este asunto de la migración era también parte de un plan macabro ideado por lo más precario de la oposición venezolana, además de ser parte de la guerra cognitiva o de cuarta generación, cuyo objetivo principal era y es las neuronas y el cerebro de la juventud, las emociones, crear desencanto y decepciones en varios frentes, crear falsas ilusiones, dejar de querer la Patria, burlarse de esa categoría fundamental de la vivencia en el territorio, como ejemplo, está aquel joven que de Venezuela decía que "Me iría demasiado".
Inicialmente nos pareció un poco exagerada semejante tesis, aunque el tiempo parece confirmarla, ahora resulta que los "coyotes" eran los jefes de la oposición más conspicuos, inclusive de la juventud que se decía muy democrática, mentira, eso sí la más corrupta de entre ellos. En fin, lamás patente paradoja.
Cuando vea la noticia de que todos nuestros compatriotas regresen de El Salvador será una gran fiesta del espíritu, además de demostrar lo aguerrido que es el pueblo venezolano y que en mucho debe rectificar, también por fin su gobierno siga apoyando al pueblo, que sea pueblo, en una palabra, además vencer a un verdadero tirano y violador de los derechos humanos como ese tal Bukele o como sea que se llame ese traidor de la izquierda y el Frente Farabundo Marti; uego habrá que seguir en unión de todos los venezolanos, crear nuevos consensos y desarrollar la economía. Junto a ver cómo el susodicho tiranuelo se empezará a secar.
