Después del 19 de abril de 2020, fecha de publicación en aporrea, de la carta que Olys Velásquez le envía al gobierno, donde solicita garantías para que su esposo Javier Vivas Santana pueda contar con medicamentos y comunicación con sus familiares; no solamente se supo algo del articulista detenido; que alegró bastante a los que se preguntaban con interés solidario sobre su incertidumbre jurídica y personal; sino que también, aflojó las riendas para que varios colegas de aporrea, se dieran a la tarea de atacar, distanciarse o hablar mal de Santana, darle la razón al gobierno y cuestionar e insultar a los defensores de Vivas Santana.
Estas críticas, han llenado los titulares principales de aporrea, durante los últimos dos días. Han referido el caso, Néstor Francia, José Sant Roz, Cécil Gerardo Pérez y otros.
Se cuestiona el visceral anti madurismo, el grado académico, las fallas lingüísticas, el ataque al género y se subestima su cautiverio. Desde este plano, parece que el gobierno está en todo su derecho a joderlo.
Es decir, que, para los críticos de Santana violar la Constitución, no seguir el Debido Proceso, mantener incomunicado y sin medicinas al reo, violando sus derechos humanos, es algo que no cuenta y que lo tiene bien merecido por hablador.
Creo que esta es una manera grotesca de interpretar las leyes, un cinismo aterrador en sus auto consideraciones como revolucionarios y un menosprecio exagerado por los que no comulgan con su manera de pensar y actuar frente a los fenómenos sociales, en los que están implicados todos.
En otras palabras, si lo que se está ejercitando en Vivas Santana es lo mismo que se le aplica a Chirinos, Torrealba, el médico Luis Araya, al obrero de ferrominera Rodney Álvarez (lleva 9 años detenido con un montaje judicial sin juicio y sin sentencia) y a muchos más; entonces, el menosprecio a la detención de Vivas Santana, es la manera más descarada de acompañar al gobierno en su política antiterrorista y de censura, no solamente contra los que piensan diferente; sino, de acompañarlo también en la lucha contra el chavismo auténtico; política gubernamental que ya causó mucho daño al pueblo. Ver las denuncias actuales de Rafael Ramírez y de Yury Valecillo.
