"Como a nadie se le puede forzar para que crea,
a nadie se le puede forzar para que no crea"
Sigmund Freud
Lo último de Tocorón: una supuesta cortina de humo. Ya, no es precisamente la demolición o desmantelamiento de una cárcel, que parecía un sitio exclusivo para hacer turismo ¡pa´goza! Aunque preso ni en la casa de uno, como siempre repite un ex presidiario o ex privado de libertad, quien pagó una larga condena y cuando le preguntan los amigos en son de chanza, ya que, no esconde su pasado y no tiene problemas con la justicia ¿Cuándo regresas nuevamente a tu antigua residencia, porque saliste gordo? Sonríe de manera reflexiva para dar la respuesta, el cual parece utilizarla, como un consejo y sin mucho titubeo la suelta ¡Ni a buscar remesas de dólares!
Ya, no es solamente un amigo de años, que piensa en la tal cortina de humo. La oposición ha echado a correr la bola y uno, que no pierde el tiempo por su condición enfermiza y contraria al presidente Nicolas Maduro, quien lo carga en la boca, como una chupeta en todas las conversaciones lo primero que hace es nombrarlo para atacarlo, pasándose de imprudente, ahora repite la tal cortina, como si estuviera echando un cuento de infancia. Hace 3 o 4 días, lo único, que me sirvió para callarlo, fue soltarle una, el cual va a recordar, como una noche, con un grillo de madrugada en la memoria, si es que todavía la tiene buena ¡Olvida a Maduro, aunque sea un instante, porque va llegar el momento, que, hasta haciendo el amor lo vas a nombrar! La primera reacción salió de la esposa, quien, dejó escapar una soberana carcajada y moviendo la cabeza de arriba abajo me dio su aprobación.
La oposición aprovecha cualquier movimiento del gobierno para atacar. Olvidan, que en la época de los otrora grandes partidos –AD y COPEY– las cárceles se convirtieron en unas verdaderas "carnicerías". Solamente en Sabaneta –Maracaibo– en una acción de protesta por el hacinamiento un grupo de guajiros, encendieron unos colchones y esa acción dejó más de 150 muertos. Por eso, creo y lo sostengo, el error del comandante Chávez, en su afán de cambiar al país, fue proclamar y repetir, que estábamos viviendo en el socialismo, desde el mismo momento de llegar al poder y cualquiera persona sin conciencia embelesada por las redes al desvirtuar los hechos, cuando ven estos casos increíbles, tipo Tocorón se pregunta ¿Si, esto es el socialismo, mejor me devuelvo?
¿Por qué sostengo esta opinión, a pesar que choca con algunos compañeros a quienes se la he hecho saber personalmente? Porque simplemente le dio a la oposición el arma para defenderse y atacar antes cualquier fracaso del gobierno por adecentar al país. El capitalismo no desaparece por deseos ni buenas ni malas intenciones, es cortándole las raíces a los problemas y el carcelario, es uno de los más graves en cualquier país del mundo, ya que, depende de la educación del hogar, en la justa distribución de la riqueza, más desajustes sociales propios de la incitación a la violencia y las malas costumbres a través del aparato mediático, creando la anarquía, el cual le conviene al capitalismo en su intento desesperado por no desaparecer. En Venezuela se llegó al poder por la vía de los votos y todo el aparataje de la descomposición quedó intacta y apenas la burguesía y los dirigentes opositores de los grandes partidos se repusieron del trauma, buscaron los mecanismos para propiciar un golpe y casi se les dio en el 2002.
El gran aliado de la oposición es el olvido, intensificado por las redes sociales de acuerdo a la conveniencia del gran capital. Ningún gobierno en este país, ha buscado la manera de frenar la delincuencia y mejorar las condiciones de vida de sus habitantes, como lo inició el comandante Chávez y ahora el presidente Nicolás Maduro, pero entre el deseo y la intención se encuentra un poderoso enemigo capaz de rechazar cualquier intento: el capitalismo y sus mecanismos para crear el consumismo y escasez, cuando le conviene ¿Quién propicio la escasez de alimentos con un bloqueo criminal? Ese episodio triste y perverso todavía es recordado con miedo por muestras personas y casi se lo hicieron ver, como un problema del socialismo, cuando era el imperialismo y la oposición los impulsores; fracasaron, pero siguieron en el mismo objetivo. Ahora, cambiaron de estrategia, cualquier fracaso del gobierno se lo achacan al socialismo y en esto contribuyó una corrupción dolarizada, agravando más el problema.
La corrupción y la delincuencia a través del avance electrónico no ha parado en ningún momento, algo que daba sus primeros pasos en la cuarta República y sin embargo, la corrupción y la delincuencia ocupó espacios alarmantes, a pesar de haber sido en moneda venezolana y de ahí salió en parte el triunfo del comandante Chávez. De esto no dicen nada los opositores y menos los candidatos a las primarias. En Estados Unidos, la delincuencia ha desbordado la prevención y la solución no aparece por ninguna parte. Nadie puede esperar en Venezuela a la vuelta de la esquina, lo que no han podido los gringos con todos sus métodos represivos en todos los años del capitalismo salvaje. En Venezuela se empezó por humanizar las cárceles. Lo de Tocorón se sale del libreto y el gobierno a tomado las medidas urgentes, pero ahora, para una parte de la oposición es una CORTINA DE HUMO. Entonces, en qué quedamos ¿Cuál es la solución? Esto demuestra, que oposición e imperialismo es una mescla perversa sin sentido de patria y solamente piensan en el poder por los dólares. Aquí, no estamos en socialismo, estamos en un periodo de cambio por rescatar el país del estado en que lo dejaron AD y COPEY.