Como parte de la estrategia contrarrevolucionaria desatada en nuestra patria el fascismo se ha propuesto acelerar la desestabilización economica y política. Contando para ello con poderosos instrumentos como son los monopolios productivos, de importación y distribución de productos de primera necesidad.

Dentro de esta estrategia juega un papel fundamental el acaparamiento y la especulación en los precios que en menos de un mes se han disparado casi en un 200%. Causa asombro por ejemplo que en un poblado como Tucani, Municipio Caraciolo Parra y Olmedo, Estado Mérida, el kilo de leche cueste 40,000 bolívares o 40 bolívares fuertes al tiempo que de las vitrinas de los negocios hayan desaparecido el pollo, el azúcar y otros productos de primera necesidad.

A esta estrategia le han sumado la paramilitarización de la vida social y política de extensas zonas de nuestra frontera donde desde hace varios años vienen imponiendo a sangre y fuego sus leyes los grupos paramilitares (colombianos y venezolanos) aliados y financiados por terratenientes y empresarios. Por ejemplo casi todo el norte del estado Táchira incluido su capital San Cristóbal, los municipios fronterizos del estado Zulia y los municipios del sur del lago del estado Mérida están siendo sometidos a una fuerte presión y operaciones de ablandamiento en el objetivo de que caigan bajo control de l que nosotros denunciamos la narco-parapolítica que peligrosamente se viene incubando en nuestra patria inspirado en el sangriento modelo colombiano.

Parte de esos planes fascistas consiste pues en someter o liquidar a los dirigentes sociales y políticos de estas zonas que se interpongan o sean obstáculo a sus siniestros planes.

Es en la implementación de esta estrategia que denunciamos el asesinato del cual han sido víctimas nuestros compañeros Alfredo Montiel Presidente de la Federación de Consejos Comunales de Tucani, municipio Caraciolo Parra y Olmedo, estado Mérida, acribillado el día 12 de enero y el compañero Freddy Ascanio, Concejal del Municipio Caraciolo Parra y Olmedo, estado Mérida, asesinado el día 16 de enero. Asesinatos que se enmarcan los intentos paramilitares por controlar políticamente dicho municipio, en alianza con ricachones locales aspirantes a los cargos de elección popular.

Denunciamos ante el alto gobierno estos asesinatos de luchadores sociales comprometidos con el socialismo bolivariano, alertamos sobre el avance de los siniestros planes de la parapolítica en nuestra frontera bajo el silencio cómplice de quienes se ven beneficiados por sus sucios negocios.

Denunciamos los planes desestabilizadores de la oligarquía terrateniente y los grandes empresarios y comerciantes, agrupados en FEDENAGAS, FEDECAMARAS Y CONSECOMERCIO, para provocar un estallido social de grandes magnitudes en base a jugar con el hambre del pueblo para manchar de sangre a esta revolución y para lo cual han optado por aliarse con los narcoparamilitares.

Llamamos a los poderes públicos, las fuerzas armadas, a investigar estos asesinatos, expresión del sicariato político que ya ha llevado a la tumba a más de 190 compañeros campesinos y que al sol de hoy los culpables gozan de total impunidad.

Llamamos al movimiento popular a pronunciarse frente a estos sangrientos hechos y expresar su solidaridad activa pues no podemos seguir impávidamente viendo como se nos desangra nuestra revolución bonita.

Ante esta situación el FRENTE NACIONAL COMUNAL SIMON BOLIVAR Y EL FRENTE NACIONAL CAMPESINO EZEQUIEL ZAMORA planteamos lo siguiente.

• Organizar los comités contra el acaparamiento.
• Activar la inteligencia social.
• Conformación de los comités de defensa popular en los consejos comunales.
• Depuración de los cuerpos de seguridad de estado.

JUSTICIA PARA NUESTROS CAIDOS
NO A LA IMPUNIDAD,
NO AL SICARIATO, NO AL PARAMILITARISMO
NO A LA NARCO- PARAMILITARIZACION DE LA POLÍTICA