El enfoque económico e ideológico político del gobierno norteamericano, bajo la presidencia del magnate Donald Trump tiene una visión netamente militarista y, las zozobras en sus colonias como Estados de la alianza, conllevan a un nivel de adecuación mediante zigzagueos que le son propios, pero que representa sin contrapelo a los procesos objetivos de la sociedad internacional para deslizarse a la clarificación y definición de una política económica globalizada., lo que quiere decir que estamos en una dirección de permanente conflictividad comercial por la intromisión de los chinos en Latinoamérica. El diagnóstico del FMI a principios del año 2017, está vigente y fue el siguiente: “Los riesgos para las perspectivas mundiales, que siguen tendiendo a la baja, están vinculados a los actuales ajustes en la economía global: una desaceleración generalizada en las economías emergentes, un reequilibrio en China, los bajos precios de las materias primas y la salida gradual de las condiciones monetarias extraordinariamente cómodas en EE.UU. Si no se gestionan con éxito estos desafíos clave, el crecimiento global puede descarrilarse".
El concepto económico clave, luego del referéndum sobre el Brexit, que ganaron los detractores de la permanencia en la Unión Económica Europea por parte de Gran Bretaña, era y es incertidumbre. Cuando Donald Trump hacía sus propuestas y estigmatizaciones económicas a la integración económica y al libre comercio multilateral, luego de su triunfo electoralmente, la incertidumbre creció exponencialmente. Y había completa razón: a la incertidumbre macroeconómica persistente, se agregaron otros signos negativos luego de la Gran Recesión (2008-09); se sumaron los bajos precios de las materias primas, la reducción del comercio global, la volatilidad de los tipos de cambio, la disminución o estancamiento de la productividad en los países post-industriales y, la entrada de “burbujas bursátiles” y otros procesos. Una apuesta importante fue que la Reserva Federal de los EUA lograra estabilizar una política monetaria clara, que ayudara a reducir la propia incertidumbre macroeconómica, la volatilidad cambiaria y las fluctuaciones en el valor de los activos financieros, lo cual aunado a una menor presión a la baja sobre el precio de las materias primas (sobre todo, del petróleo), podría favorecer el replanteamiento de la actividad de inversión y crecimiento, favorablemente en las economías muy dependientes de tales ingresos internacionales, como son las “emergentes”. Pero, actores fundamentales del mercado petrolero optaron por caminos distintos para aumentar la certidumbre.
En suma, gravitan cuatro aspectos coyunturales (más uno estructural antes comentado) en EUA, con proyección hacia la economía global: endurecimiento de la política monetaria, inflación controlada, liberación de recursos públicos para inyectarlos a la economía nacional y mayor dinámica económica que favorezca a la economía global (se estima en 2.7% el PIB mundial para 2017, que remontaría la tendencia de caída del PIB en 2016), lo cual sería la contribución de la economía líder a la recuperación sostenida de la economía global, que se pospone una y otra vez. Veremos si los objetivos son compatibles con los instrumentos de política anunciados. No lo parece. Pero, además, es necesario agregar la incertidumbre geopolítica, que juega su rol dentro de esta falta de solidez de la economía global.
Lamentablemente, Venezuela a pesar de tener conocimiento de esta fase histórica, obvió su programación financiera y el aparato militar que controla institucionalmente el país, el narcotráfico, paramilitarismo y los bachaqueros crearon una especulación e inflación inducida, la cual fue aprovechada por los empresarios para aumentar sus costos y suspender de sus cargos direccionales a parte de su personal, tal como sucede con Corimon y Axalta, compañías o Corporaciones de pintura plástica y anticorrosivos.
Las variables centrales del modelo macroeconómico seguido por China, es distinto al ajuste de la economía de EEUU, son de carácter expansivo, para generar los resultados antes comentados (no endureciendo la política monetaria) para favorecer la inversión, la exportación y el crecimiento. Expansión fiscal y monetaria que ha provocado un repunte considerable de la economía desde el último semestre de 2016: crédito barato, rebajas fiscales, más gasto en infraestructura, impulso a la inversión estatal, ciertas regulaciones, vía precios en el sector inmobiliario para desviar la demanda hacia las ciudades medianas, absorbiendo así de mejor manera el ligero aumento del precio internacional de las materias primas, ampliamente demandadas por China, favoreciendo la recuperación de su poderoso sector industrial y de las exportaciones (a pesar de la disminución en el comercio mundial), Todo un complejo de ingeniería económica orientada al crecimiento, aunque moderado, pero sostenido.
Ahora, nos preguntamos, ¿Dónde, están esos dólares excedentes y quienes se beneficiaron? Esto, indica que China, ni EEUU son culpables de la hiperinflación en nuestro país y, a su vez, nos preguntamos, quien trajo las cepas de control de la difteria sin el mantenimiento refrigerado requerido y , que ha ocasionado ya muertes de jóvenes. En Puerto Cabello, autoridades sanitarias se mantenían preocupados porque algunos sanitaristas, saben de lo sucedido y, quienes estuvimos en La Cruz Roja Venezolana como socorristas, entendemos de esta situación. Hace años atrás me asignaron dos ambulancias para el eje costero Tucacas- Morón- Palma Sola y pude darme cuenta que el toxoide reflejaba una viscosidad mínima y tuve que regresarlo, porque no reflejaba su acuosidad explicita en las normas sanitarias. Así, sucede en la economía, un simple error se convierte en un factor destabilizador. Pero, menos mal que hay hombres como Pedro Carreño e Iris Valera para limpiar las zonas de incongruencias e irrespetar a hombres de la visión del ex fiscal Isaías Rodríguez.
Evidentemente, estas dos economías (EEUU y China) son las que proyectan una mayor influencia sobre el comportamiento de la economía global y, China espera el alcance real de las medidas comerciales de carácter proteccionista desde EEUU para reaccionar, pero no son las únicas economías influyentes. Está también el otro gigante asiático en el sur de la región, India, cuya expansión en 2016 fue muy importante, llegando al 7.1% del PIB, quién prevé una caída de su crecimiento que ronde el 5.0% del PIB. (FMI: “Actualización de las Expectativas de la Economía Mundial, Julio 2017). En cuando a la moneda china, en 2016 el yuan (renminbi internamente) sufrió la mayor caída frente al dólar americano desde 1994, un 7%. Y en agosto de 2015 el yuan había sufrido una devaluación. La debilidad de la moneda china y la salida continuada de capital del país, erosionan las reservas internacionales, aunque el primer factor (devaluación) favoreció el aumento de exportaciones. Pero sí es importante estabilizar el tipo de cambio y a ello se han abocado las autoridades centrales de ambos países y México. El país azteca, es el punto de visión hacia el Sur, controlando políticamente a Centroamérica y dejando a Los Sandinista tranquilos y se alimente, además de China y EEUU, de Venezuela y Rusia, muy ávido, el comandante Daniel Ortega.
Por su parte, el Banco Popular de China ha actuado durante este 2017 abocándose a la neutralización de la tendencia al crecimiento y estallido de la burbuja financiera originada en el sobre endeudamiento de las empresas privadas, y en febrero de este año elevó la tasa de interés, evitando “incrementos acelerados del ratio de apalancamiento y burbujas de activos, bajo la premisa de mantener un crecimiento económico razonable y una inflación básicamente estable”, dijo Ma Jun, economista jefe del banco central. Estamos ante una política de estabilización no recesiva, sino de mantenimiento del crecimiento pero a niveles que no sobre caliente la economía vía endeudamiento excesivo, dispare el valor real de los activos (se impulsa una mayor desregulación del mercado financiero chino para favorecer la apertura a inversionistas extranjeros), por ejemplo inmobiliarios (se prevé una desaceleración de este mercado durante este año), y que provoque presiones inflacionarias severas (se estima en 2.5% de incremento para 2017), que obliguen a profundizar las medidas anteriores y una mayor caída de la tasa de crecimiento.
Lo que indica que la guerra económica hacia Venezuela es falsa y los cubanos lo saben. Al igual que los militares, hay desaguisados y Tarek Williams Sabb nos lo viene aclarando.
*Psicólogo, especializado en filosofía y semántica del lenguaje jurídico. Es investigador jurídico y ha sido docente de La Misión Sucre en las Escuelas de Comunicación Social Estudios Jurídicos y Educación. Escritor. Miembro activo de Aesca- Carabobo