La oposición no termina de comprender que el siglo XXI es el año de los cambios políticos de carácter globalizado y de la tecnología educativa y que estamos en un proceso histórico trascendente, donde se esta cumpliendo un conjunto de ciclos que determinan un pensamiento económico e ideológico. En el siglo pasado se dieron políticas erradas donde algunos dirigentes de la vieja democracia comprometieron el futuro del país y fijaron posiciones con Estados Unidos para que en esta región continental no se invirtieran recursos para la industria, lo que obligo a los estadounidenses mirar hacia Europa en aquellos años del 1945 y 1949. En este sentido, limitaron el desarrollo humano y a su antojo empezaron a movilizar los pequeños capitales a sus propios bancos, dañando el sentimiento de un colectivo y del pueblo en sí.
Estamos frente a una esperanza de cambio ante un colectivo que le da todo su apoyo al presidente Chávez Frías, cuyo único interés es el crecimiento de nuestra nación. En tiempos pasados vivíamos en una completa oscuridad y constante engaño por quienes se auto-nombraron nuestros representantes como gobernantes. Existe el seguimiento de un nuevo signo de lucha. En el pasado reciente, muchos gobiernos democráticos gozaron de impopularidad hasta irrumpir el derrumbe gubernamental del presidente Carlos Andrés Pérez.
La tecnología televisiva ha provocado grandes cambios socioculturales en la identidad del pueblo venezolano, gracias a canales promocionados por el gobierno nacional y que refleja en su estructura un orden verdaderamente tecnológico, siendo Internet un instrumento cada vez más indispensable en las instituciones educativas y oficiales, donde, se provee al pueblo a través de los Infocentros de presentaciones multimedias muy expresas y de gran contenido informativo.
Todo lo anterior ha permitido una autonomía en el campo educativo y diseños didácticos que llegan al campo didáctico donde la interacción y el aprendizaje refleja el interés de un colectivo de estar apegado a las leyes bolivarianas, mientras otros se dedica a un mediatismo para dañar nuestra imagen en el exterior.
Los Consejos Comunales, son parte de ese interés colectivo para darnos un punto de vista clave para contrastar y construir el nuevo país que siempre hemos deseado para la nueva generación que vio nacer el proceso bolivariano y revolucionario en el país. Por otra parte, existen grupos de ciudadanos que se dedican crear desconfianza entre el pueblo y enfrascan los problemas cotidianos con el único fin de crear confusión en la base social de nuestro pueblo y que constituyen una minoría según sus propias encuestas.
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Edo Carabobo, Venezuela, ICQ
