Cuán difícil se les hace a algunos mantenerte presente en lo
cotidiano del actuar, ahora cuando precisa y oportunamente el tiempo y
el alcance de tus hechos y logros confirman la razón, la fuerza y la
validez de los sacrificios de esos muchos que han comportado hasta el
martirio y la muerte la verdadera esperanza y procedencia de tu futuro,
de esos que eternamente sembrados continúan luchando por el
visionario sentir de tu decisivo caminar en este palpable y merecido
presente, reivindicado y reivindicándose a partir de la consolidación
de tus propias necesidades de protagonismo, la humanista propiedad y
cordura sapiensal de las utopías, de esas próceres e hidalgas locuras sacrificadamente cabalgadas en el destiempo… “La gloria es en ser grande y útil” Simón
Bolívar.
Al Instituto Universitario de Tecnología de Maracaibo
llegamos siendo invitados por la emergencia que suscitaba el hecho que
aparte de ser considerado para la fecha uno de los más conflictivos y
violentos del país, y que varias salas de inteligencia situacional en
formación evidenciaban que conocidos y recalcitrantes sectores de la
reacción seriamente alentaban estrategias para reeditar guarimbas a partir de él.
Convendría situarnos por los días de marzo del 2005, y bajo el esperado
torbellino sensacionalista, comunicacional y político que cobraba
fuerza por la inminente aprobación de la nueva Ley de Educación
Superior. Bajo las amargas enseñanzas obtenidas a partir y en
consecuencia del 11 de abril
muchos de nosotros, conscientes del compromiso de todos los días, nos
obligábamos estar atentos y vigilantes a lo pretendidamente
concatenativo y nada casual de ciertas manifestaciones mediáticas de
los laboratorios de guerra de la reacción y de la clara actuación de
ciertos renombrados personajes tanto en el Instituto como de la región.
Igualmente oportuno sería registrar que para esos mismos días en otro
conflictivo Instituto Universitario de Cabimas era tiroteado e impactado (en cuatro oportunidades) una de las autoridades recientemente escogidas para dirigir tal Instituto de Educación Superior.
Para
nadie puede ni debe ser un secreto que actualmente la degeneración y la
delincuencia común, con ciertos e interesantes rasgos de organización
política, avanza peligrosamente por los Institutos y Universidades del
país. La falta de valor en el compromiso y concreción del carácter
disciplinario y ético, además de la poca voluntad de una propuesta
programática en lo político e ideológico por parte de algunas de sus
autoridades (o simplemente por el evidentemente escaso y nulo respaldo
de las encumbradas autoridades del M.E.S.) han hecho que estas
manifestaciones de vandalismo estén siendo tácticamente, o incluso ya
hasta estratégicamente, reclutadas y fomentadas por sectores con claro
arraigo en las pretensiones de desestabilización internacional. Estas
actitudes vandálicas por los momentos de tan sólo un reducido grupo de
estudiantes, auxiliado tanto por sectores del crimen organizado,
profesores y autoridades como de reconocidos personeros de la
oposición, de modo bochornoso y escalofriante están siendo proyectados
hacia niveles superiores de organización a razón de verdaderamente
auspiciarles su consolidación y alcance al momento de irresponsablemente transar con ellos una permisible y bien vacunada gobernabilidad. Cabimas, Caripito, Valencia y Maracaibo son
precisamente los Institutos Tecnológicos que, a criterio del propio
Ministerio de Educación Superior, mantienen o han mantenido críticos y
crecientes estados de conflictividad. De igual modo no podemos dejar de
reseñar lo sucedido tiempo atrás con el Prof. Roberto López en la Universidad del Zulia.
Un
correspondiente y necesario sondeo de la prensa escrita de la
región durante los últimos dos años –bajo la gestión de los Profs.
Neida Atencio, Dámaso Mujica y Antonio Pacífico: 2004 y 2005- nos
precisan la significativa evidencia que el Instituto Universitario de Tecnología de Maracaibo,
en estos años, no tuvo hechos violentos que hayan trascendido ni
causado perturbación más allá de sus portones y del control mismo de
sus autoridades. Lo cual no equivale a decir que el clima haya sido tan
confortablemente parecido o igual que el de fuera de sus predios.
Precisamente los dieciséis años ininterrumpidos en que la Democracia Copeyana Universitaria (DCU) (y el no muy grato testimonio de su salvaje política desarrollado por el célebre grupo Cobra) marcó
un historial sangriento que oportunamente quedó, algunas veces,
registrado en los diferentes medios de comunicación de la región. Nada,
por ejemplo, sorprendente fue ver a estos líderes sin remordimiento ni
vergüenza pasearse por los pasillos de la institución luego de tan sólo
días de haber circulado la fotografía de ellos en los principales
periódicos de la región (Panorama,12-06-02 P 4-9 y La Verdad, 12-06-02, P. D-7 ) en pleno mandato de nuestro actual Gobernador, esposados, cabizbajos y junto a la camioneta de Hidrolago
por ellos robada, según lo reseña el testimonio de los policías que
tuvieron que responder al fuego de las armas de estos" líderes"
estudiantiles. Para colmo uno de los integrantes de este grupo figura
como flamante directivo de la COMISIÓN NACIONAL DE ESTUDIANTES DE EDUCACIÓN SUPERIOR (CONESES), principal contendora de la UNIÓN DE FUERZAS ESTUDIANTILES BOLIVARIANAS
(UFEB).
No
es para juego pero esta revolución, y para que lo siga siendo, debe
afianzar los niveles de corresponsabilidad para con su propia seguridad
y futuro. Es realmente tétrico lo que en ella viene sucediendo, nos
sumamos a todos los que de manera estoica y valiente sufren o han
sufrido descalificaciones por los que manteniendo un evidente y
criticable desempeño nos acusan de ver y anunciar a cada momento la
presencia de la sombra del lobo en todas partes, aun cuando sabemos, y bien saben ellos, que éste siempre preñado de buenas intenciones no sabrá desaprovechar ni despreciar cualquier desliz o parpadeo de nuestra arrogancia.
Sabemos lo necesario y las implicaciones que tiene para este proceso la meta de los diez millones,
pero oportunamente alertamos que bajo esta pertinente pretensión,
propia evidencia del sentimiento y voluntad inclusionista del proceso
bolivariano, peligrosamente está siendo utilizado para minar nuestras
bases con fines ya antes visto en otros procesos que han sucumbido por
lo evidente de su inocencia. Quiénes, sino los que en el pasado
mantuvimos el decidido y frontal disentir en la lucha contra lo obsceno
y oscuro de sus aparatos de represión, sabemos cuales precisamente han
sido sus mecanismos de coerción. Y no es que en absoluto estemos
pretendiendo proponer el dulce trato recibido; somos por lo
demás ajenos de emplear métodos que tiendan a vincularnos o parecernos,
y por ello legitimar, a los Possada Carriles o los López Sisco; estas
aberraciones por siempre nos resultarán insoportables aunque de seguro
ya están siendo consideradas para nosotros cuando puedan conseguir sus
macabras maquinaciones.
La búsqueda por limpiar precisamente estos dieciséis años que tanto caracterizaron al I.U.T. Maracaibo –antiguo C.U.M.-
implicó una lucha frontal y consecuente contra una corrosiva práctica
tanto en lo administrativo, académico, obrero y estudiantil. De todos
lados vinieron los ataques a la gestión liderada por la Prof. Neida
Atencio, todos promovidos por la inercia del pasado y la poca esperanza
y apreciación de un futuro mejor; la conveniencia por mantener ese
determinado orden de cosas involucraba grandes intereses tanto en lo
económico como en lo político. Interesante sería recoger y sopesar los
diferentes testimonios sobre la actuación directa e indirecta de
algunos personajes ligados a este Instituto en hechos como el Paro del 2002, el 11 de Abril,
y otros nefastos sucesos. El tráfico del boleto preferencial (tenemos
noticia que actualmente se presenta nuevamente esta irregularidad), el
cobro por matricular a los nuevos estudiantes, denunciada ante la
actual directora); cabalgar e incumplimiento de horarios; nepotismo;
utilización de recursos y propiedades de la institución para
actividades fuera de su interés y pertinencia (nótese que la anterior
gestión logró la recuperación de una unidad vehicular por mandato del
Ministerio Público, ilegalmente cedida a la alcaldía adeca Jesús
Enrique Losada, y la actual directiva la cedió nuevamente; alquiler de
espacios del instituto con fines comerciales. El dossier es tan amplio
y significativo que, por razones de espacio, preferimos detallar los
más escandalosos en la próxima entrega, por los momentos tan solo
referimos que todos estos lucrativos y desvergonzados negocios
despertaron verdadero escozor en determinados sectores tanto dentro del
instituto como fuera de él. El hecho que la pasada gestión haya sido
nombrada por el Dr. Héctor Navarro Díaz, anterior Ministro de Educación
Superior tan sólo pareció explicar por qué se le retuvo los recursos
financieros y se le asfixió presupuestariamente. La proximidad de las
elecciones estudiantiles, las cuales después de 16 años de presencia
copeyana, con la anterior gestión existía una franca posibilidad para
que los estudiantes progresistas del M.U.R.U., M.R.E., M.T.U.,
obtuvieran un aplastante triunfo. Cercanía de los Concursos de
Oposición que vendría, entre otras cosas a sanear los perfiles
académicos del profesorado, lo cual directamente repercutirá en el
fortalecimiento definitivo de uno de los dos sindicatos: SINDIUTM, Sindicato Bolivariano o el de la oposición.
Evidentemente
todas las implicaciones de la lista anterior, aún no completa,
repercutieron definitivamente para que la presencia y logros ( http://www.aporrea.org/dameletr a.php?docid=16729) de la Comisión
de Transformación y Modernización del IUT-Maracaibo fuese no bien vista
y considerada para las autoridades del Ministerio de Educación
Superior; pero aparentemente la gota
que colmó la paciencia del Ministerio de Educación Superior fue que
durante la gestión de la anterior Comisión, el Instituto recibió en el
año 2004 apoyo financiero de la OPSU por lo que se le endosó el epíteto de fuenmayorista, y,
además, esta comisión, con argumentaciones legales, igualmente se negó
el que se hiciera efectiva a una alumna dirigente de la Democracia Copeyana Universitaria, léase Copey, sancionada irregularidades en el supuesto forjamiento de FIRMAS Y SELLOS en
constancias de estudio a 280 alumnos del Instituto, en ocasión de
asistir al encuentro deportivo de Institutos Universitarios en la
ciudad de San Cristóbal en diciembre de 2004, los
viáticos para representar al instituto universitario de Tecnología de
Maracaibo en un Congreso Bolivariano en la ciudad de El Tigre. la
delegación deportiva del IUTM fue descalificada por un sinnúmero de irregularidades (conducta y forjamiento de documentación) por parte de la Comisión Organizadora en San Cristóbal durante los VI juegos deportivos de institutos y colegios universitarios de Venezuela (VI JUDENAICUV) .
La destitución de la Coordinadora de la Comisión
de Modernización y Transformación del Instituto Universitario de
Tecnología de Maracaibo fue argumentada a razón de que la misma había cometido actos de corrupción. En entrevista hecha a La Comisión por parte de
la Comisión de Educación de la Asamblea Nacional de la República Bolivariana
de Venezuela, se determinó que el derecho a la cancelación de sueldo
por las funciones cumplidas al frente de la institución, es
indiscutible y por tanto no constituía delito alguno. En Gaceta
Oficial del día 19 de agosto de 2005 el Ministerio de Educación
Superior en pleno uso de sus derechos legales, no morales, resolvió la recomposición de esta Comisión, es decir que si sus argumentos, sobre la supuesta corrupción fueran ciertas el
Ministerio de Educación Superior no hubiese ratificado a dos de sus miembros porque de hacerlo estaría avalando los hechos de corrupción supuestamente cometidos. En el Zulia todos reconocen la solvencia moral y revolucionaria de la Prof. Neida
Atencio, y para todos los que de una manera u otra nos hemos enterado
de su actuación, junto al digno equipo que la acompañó, fiel a los
prelados revolucionarios de la lealtad y quienes oportunamente
renunciaron, a los cargos para los cuales el Ministro de Educación
Superior sin previa consulta, los había ratificado , y sabemos cuál
injusto ha sido su destitución. UNIPROPAZ, organización
política y gremial a la cual pertenecen los directivos, ha mostrado una
valiente y bien recibida pauta de claridad no solo política sino
ideológica, algo que pudiera parecer insólita en la región. La misma
decidió no apoyar ni postular a
ninguno de sus miembros para que supliera a los referidos profesores,
es más, vetó a dos de sus miembros por no haber mantenido una posición
decorosa y leal frente a este hecho. Las verdaderas causas de tal
destitución no son más escandalizantes que de dónde y de quiénes
lograron tal hazaña. Responsablemente señalamos que nuestra Revolución
está en peligro, en la próxima entrega el resto de la Caja Negra del Ministerio de Educación Superior en el Instituto Universitario de Tecnología de Maracaibo.