Ese vocabulario de Fuenmayor, despectivo y que transpira un cierto odio parecido al de los amargados “bolivarianos” que perdieron algún feudo, es de lo más patético y lamentable. Primero, llamar “ministrillo” a Moncada, luego catalogar de “talibanes”, como lo hace Bush contra sus terroristas, a quienes se oponen a su posición sobre la prueba de aptitud académica.
Yo fui durante 36 años profesor en distintas universidades venezolanas y jamás vi los beneficios que la PAA le trajo al país. Eso sí, un negocio espantoso que mueve millones de bolívares, por ejemplo en la ULA, tanto como lo que produce toda la droga que circula por Mérida. Y esto es viejísimo. Y si usted indaga, aula por aula, curso por curso, usted encontrará que más de un 70% de los muchachos no tienen vocación ni aptitudes para lo que están estudiando, hasta los que tienen cierto talento en lo que cursan, incluso aquellos con calificaciones regulares o buenas.
El asunto a estudiar es analizar si esas universidades autónomas que tenemos le sirven realmente al país, o si están estructuradas para que respondan a un modelo que no se corresponde con nuestra realidad cultural, humana, histórica, social, científica. Para mí son un total desperdicio lo que allí se hace, lo que allí se produce, lo que allí se crea, con su PAA o sin ella. Basta ver la calidad humana de los profesionales que de ellas salen, casi todos dominados por la codicia, impulsados por el más vil egoísmo, en el que nadie se preocupa por el país o por el bien común. Según la filosofía utilitarista sobre la que se sustenta la universidad venezolana, las degeneraciones privadas le producen enormes beneficios al sistema. Yo no sé para qué le vamos exigir la PAA a estudiantes para que ingresen a una universidad dirigida por unos delincuentes tan bajos, inmorales y sinvergüenzas como Lester Rodríguez y su camarilla, como Arnoldo Paris y su camarilla, Benjamín Scharifkr y su cuadrilla. ¿Qué podríamos sacar de una universidad altamente pervertida, con más de tres mil profesores que se embanderan con un sádico, con un criminal y un burdo estudiante como Nixon Moreno que lleva casi tres lustros “estudiando”, por el solo hecho de ir contra el gobierno de Chávez? ¿De qué les sirvió a esto imbéciles y mediocres profesionales el haber ingresado a universidad mediante la PAA, que sin duda la inmensa mayoría aprobó?
Yo estoy seguro que Nixon aprobó la PAA, y con buen puntaje. Que Lester a lo mejor le superó.
Ciertamente, señor Fuenmayor, que usted no es ni reaccionario ni contrarrevolucionario ni elitesco sino extremadamente vago y simplista en lo que plantea. Usted y su pensamiento, únicamente se mueven dentro de los esquemas del pasado, en los que sin duda es muy ducho. Eso sí, le puedo asegurar que usted de revolucionario no tiene un pelo.
En las actuales universidades autónomas hay muy pocos pobres y una exagerada camada de cretinos, muy ufanos y audaces en sus ignorancias, aunque hayan obtenido brillantes puntajes en la fulana PAA.
Piense en estas cosas, busquemos otro modelo de universidad en el que no tenga necesariamente por qué plantearse esa aberración llamada PAA, y estaremos haciendo algo realmente por el país, por nuestra patria. Yo dudo, que a estas alturas, y con la plaga de esas montañas de prejuicios que usted trae encima pueda en verdad aportar algo valioso para esta transformación que requieren nuestras universidades autónomas (autónomas para delinquir, para destruir la educación, para vejar y humillar la inteligencia, para proteger canallas, lacayos y bandidos de todo jaez).