El tuqueque, que es un gran amigo de los momentos en la UCV, me envió el texto con su enlace, donde la oficina de prensa de la Universidad Politécnica Territorial José Antonio Anzoategui (UPTJAA), anunció, que en los núcleos de esta universidad, vivió una total normalidad. Las actividades en sus siete núcleos, se cumplieron con completa normalidad. https://www.instagram.com/p/CnfMRfevy7V/?igshid=YmMyMTA2M2Y=
La nota en cuestión, me hizo recordar a Octavio Lepage u a otro ministro del interior, cuando solía aparecer en momentos de conflictos en el país, anunciando la total y absoluta normalidad. Pensé luego, que todo ha cambiado con el tiempo. Ayer, una cosa como la que hoy vive el país, se leía como un momento de lucha y hoy por estas cosas irónicas de la vida, muchos revolucionarios le dan un toque de normalidad. Normalidad en un país, que el salario de millones de venezolanos está picando los siete (7) dólares. Ayer nada más; el caracazo nos pareció como un despertar desorganizado y hoy la "revolución" es de la idea, que toda manifestación le huele mal.
Si alguien por ejemplo, se toma el tiempo y lee la nota, puede ver un triste "fantasma", que ayer consumió horas de clases en las universidades
En estas universidades de la IV, teníamos la posibilidad de discutir eso que llamábamos Aparatos Ideológicos de Estado (AIE). En la nota se dice, "que más de 22 estudiantes" son parte de una normalidad en completo silencio. Está "total normalidad", puede ser un patético ejemplo de cómo los aparatos ideológicos de Estado son cosas útiles del poder de ayer y hoy. Los Aparatos Ideológicos de hoy, parecen más eficaces. Han logrado hacer desaparecer la rebeldía en los jóvenes, que parecía una situación natural. https://www.instagram.com/explore/tags/ciudadorinoco?igshid=YmMyMTA2M2Y=
Esta "total normalidad", no sé cómo le cabe o cuadra a un "revolucionario", que se "cree", partidario de la lucha de clases. En su "conciencia", esto debe ser una especie de arroz con mango, sin mango. Atrás y en la IV, quedaron esos debates entre los estudiantes rebeldes de La reproducción (Bourdieu y Passeron), que fue un libro que se sintió, leyó, discutió y le metió fuego al fogón. En la V, si algo es visible, es la domesticación de la rebeldía de una juventud, que tiene la bolas de decir que es Bolivariana, guevarista, chavista, fidelista y otro montón de vainas más.
El otro hecho que está nota permite ver y recordar, es que al leer su final, recordé la obra de Héctor Poleo de los tres comisarios. Esta obra hay que verla a luz de esta "total normalidad" y de estos momentos. Esos tres comisarios está copiada está revolución y el protagonismo en esta "revolución".