Lluvia de Tinta

Estudiantes sin argumentos

La camada opositora vuelve a sus andanzas desestabilizadoras, esta vez, como excusa, izando las banderas de Rctv y un supuesto atropello a la libertad de expresión. Son los mismos aquellos que figuraban los días previos al 11 de abril; son los mismitos sólo con las cicatrices que marcan un lustro añejando rabia contra el presidente Chávez y contra las grandes mayorías. Son los mismos con los rostros más secos, más amargos; aunque, paradójicamente, dejan escapar una alegría, muy efímera, que les deja la esperanza de revivir el onírico placer de calentar las calles que, durante un largo tiempo y en tantas elecciones, habían perdido por sus mismas torpezas.

Permitiendo el pleonasmo, los reaccionarios reaccionan con todos sus oscuros maleficios violentos y al margen de la ley. Se asoman a los medios mostrando sus rostros de ovejas y, luego, se congregan como serpientes a planear sus ataques dirigidos y rigurosamente premeditados por las fuerzas del mal del imperio norteamericano. Es el mismo absurdo y la misma desfachatez, es la representación más genuina y exacta del descaro.

El cese de la concesión a Rctv fue una medida soberana del Estado, ajustada a derecho, argumentada por una serie de razones que en mucha tinta se ha explicado y que el pueblo venezolano apoya y conoce; sin embargo, este reducto oligárquico, que reciben su dólares de esa fuerza imperial, se agarra de allí para alimentar a unos estudiantes que, en su mayoría manipulado, se lanzaron a “guarimbear”, creando ya por varios días un clima de intranquilidad con varios focos de violencia y de saboteo en sus propias comunidades. Estos estudiantes no tienen argumentos, hablan de que no hay libertad y tienen casi dos semanas protestando en las calles, hablan de que no hay libertad de expresión y hablan lo que quieren; lo medios retoman el uso de la palabra “régimen” y hacen y dicen cuánto les place.

Globovisión, en su orgásmico deseo de que el gobierno lo cierre, arremete con una sarta de improperios, no reconociendo la legitimidad del gobierno de tomar una decisión acorde a la constitución, sino que utiliza sus poderosas armas subliminales para persuadir, para manipular, para confundir y engañar. Su pantalla magnifica las protestas y, tan semejante al 2002, son rebotadas continuamente en canales reaccionarios de otros países para avivar la tensión internacional.

Como estas protestas obedecen a una reacción ante una decisión justa, como obedecen en contra de la voluntad del pueblo y como carecen de consistencia ideológica y se niegan al debate, al enfrentamiento de las ideas; nuevamente, la oposición fracasará y es por ello que todos deben estar alerta ante cualquier plan que vuelva a irrumpir contra el hilo constitucional y contra los poderes establecidos por el pueblo venezolano.

Condolezza paracutana

El ser humano alberga el bien y el mal, tenemos la potestad de discernir y convencido estamos que esta revolución la guía el amor al prójimo y el bien común. Sin embargo, seguimos siendo esencia humana y a diario nos debatimos en esa lucha interna de amores y desamores. En lo particular, la tristeza la conquistó Condolezza, su frivolidad y maldad es espeluznante que no arranca ni el menor bostezo. A lo mejor juzgarán machistas y feministas.., pera a “esa” no se quiere. Tan arrastrada ella, tan servil del demonio aquel de Maryland, tan usada contra nuestra soberanía. “Guaricha, retrechera, paracutana, paracutana”, sería la canción más linda para esta mujer, si se le puede llamar así, que la excita la guerra, el dolor, la sangre y la muerte.

santanajerez@hotmail.com


Esta nota ha sido leída aproximadamente 3339 veces.



Santana Jeréz Uzcátegui


Visite el perfil de Santana Jerez Uzcátegui para ver el listado de todos sus artículos en Aporrea.


Noticias Recientes:

Comparte en las redes sociales


Síguenos en Facebook y Twitter



Santana Jerez Uzcátegui

Santana Jerez Uzcátegui

Más artículos de este autor


Notas relacionadas

Revise artículos similares en la sección:
Movimiento Estudiantil, Educación


Revise artículos similares en la sección:
Oposición