Gaitán, Evita y Chávez, tres revolucionarios, tres países y tres seres visionarios ante el momento histórico que les tocó vivir. Éstos, los denominadores comunes entre esta mujer y dos hombres universales de nuestro continente.
Gaitán Jorge Eliecer, (Bogotá, 1902 - 1948) Dirigente político colombiano cuyo asesinato el 9 de abril de 1948 provocó el movimiento popular conocido como el Bogotazo. Carismático líder perteneciente al partido liberal de esa nación hermana. El debate de las bananeras sirvió a Gaitán de fundamento para su figura de líder popular. En 1931, con los liberales en el poder, fue elegido presidente de la Cámara de Representantes, presidente de la Dirección Nacional Liberal y segundo designado a la Presidencia. De abiertas ideas izquierdistas. Las tímidas reformas y los lentos programas sociales con los que Olaya Herrera pensó acostumbrar al país al cambio partidista en el gobierno parecieron insuficientes a los liberales de izquierda y, a pesar de los esfuerzos aglutinadores del director del partido Alfonso López Pumarejo, un grupo de decepcionados rompió con éste, en octubre de 1933. La estrategia de Gaitán residía en la idea de apoderarse del partido liberal y deslastrarlo de su corriente oligárquica y clasista y, de ese modo convertirlo en un partido popular y con tendencias izquierdistas. Este sueño de Gaitán no pudo ser consolidado, primero por la resistencia de miembros de esta organización, y luego por su repentino y cobarde asesinato, en vísperas de su potencial elección como presidente de la Republica de Colombia
El Historiador Aníbal Noguera Mendoza de la Academia Colombiana de la Historia, describió el día del asesinato de Gaitán así: “Primero fue el desconcierto, después la indignación, luego sopló una ráfaga de cólera que encegueció las conciencias. La historia de Colombia tomó otro rumbo. Ya el País no regresaría jamás a lo que había sido hasta la 1:15 p.m. del 9 de abril de 1948. Ni aún los sucesos en la antigua Roma con motivo del asesinato de Julio César, se pueden comparar con esa tarde en la que el pueblo bogotano se levantó en la más violenta protesta. Jorge Eliécer Gaitán había despertado las esperanzas de las gentes, que consideraron el magnicidio como la frustración de sus sueños democráticos”. Cabe destacar que ese fatídico día Jorge Eliecer Gaitán, se reuniría de nuevo con los jóvenes cubanos Fidel Castro y Rafael del Pino para tratar sobre el Congreso de Juventudes Latinoamericanas. A malaya, por designios de los poderes oligárquicos endógenos y exógenos colombianos muere este hombre quien no fue más que la esperanza de la población más desvalida y avida de liderazgos que contribuyeran a transformar la dura realidad de este país donde las desigualdades abismales se tornan aberrantes más que injustas.
María Eva Duarte, (Buenos Aires, 1919-1952) como se llamaba al principio; Eva Perón, como se la conoció en sus últimos años; Evita, como el pueblo que tanto la amo la bautizó, fue una figura que rompió todos los precedentes y definió una particularidad política nunca vista hasta entonces sobre todo en el rol de primera dama. Durante el breve período de su actuación, al lado del General Juan Domingo Perón, fue el centro de un progresivo e ineludible poder y se convirtió en el espíritu del movimiento peronista, en su esencia y en su voz. Adorada y a la vez repudiada por millones de argentinos, lo que jamás provocó fue la indiferencia. En su rol de primera dama, Eva Perón desarrolló un trabajo intenso, tanto en el aspecto político como en el social. En cuanto a la política, trabajó intensamente para obtener el voto femenino y fue organizadora y fundadora de la rama femenina del peronismo. Esta organización se formó reclutando mujeres de distintos extractos sociales por todo el país. Las dirigentes de la nueva agrupación recibieron el nombre de "delegadas censistas".
El otro bastión y tal vez eje principal de su popularidad fue constituido en torno a los sindicalistas y a su facilidad y carisma para conectarse con las masas trabajadoras, a quienes ella llamaba sus "descamisados”
Eva Perón falleció el 26 de julio de 1952, aun muy joven, por ocasión de una leucemia. El dolor popular no la abandonó en un velatorio que duró 14 días y a partir de entonces no la abandonaría jamás.
Chávez, quien tiene por nombre Hugo Rafael Chávez Frías (Sabaneta, Edo. Barinas, el 28 de julio 1954). De extracto social humilde, realiza sus estudios con la rigidez económica que su condición social le imponía. El 17 de diciembre de 1982, bajo la sombra del Samán de Güere, funda el Movimiento Bolivariano Revolucionario (MBR-200).
Prisionero militar por rebelión, 1992-94. Pero en 1994, como consecuencia de las demandas del pueblo venezolano, de las cuales se hizo eco el Presidente Rafael Caldera, obtuvo la libertad por el sobreseimiento de la causa. Se reinició, a partir de entonces, un nuevo capítulo en las luchas populares
En diciembre de 1998, Hugo Chávez gana la presidencia de la República y en febrero de 1999 asume la primera magistratura y promete realizar una Asamblea Constituyente para redactar una nueva Constitución que estuviere acorde a esos tiempos. En diciembre de este mismo año (1999) el pueblo venezolano va a un referéndum para decidir si se aprueba la nueva Constitución Bolivariana de Venezuela, votando a favor de esta. Con este acto se refunda la Nación, acto que se había convertido en un punto de no retorno para el comandante Chávez. Muchos procesos eleccionarios han seguido a estos, donde la voluntad popular y el amor inconmensurable hacia su indiscutible líder ha marcado la diferencia entre quienes quieren un modelo de país que dignifique al hombre y lo haga eje central de sus acciones y los que, movidos por intereses mezquinos y que responden a beneficios foráneos, siguen intentando incesantemente de mantener las prebendas y el status que les proveía la IV Republica.
Estos tres personajes o fenómenos políticos, han sido, son y seguirán siendo objeto de estudio en las más conocidas universidades del mundo. El comandante Fidel Castro merece un capitulo especial que me comprometo a abordar en un próximo articulo. Prosigo, los denominadores comunes de ellos son: su precaria condición económica de infancia, la alta sensibilidad social que los ha motorizado, su amor por el hombre, su visión futurista y universal del modelo país y del mundo a desarrollar con sus aciertos o no. Y el amor, la pasión, el frenesí que han despertado en sus seguidores que, con formación política o no, están dispuestos a inmolarse por lo que estos representan, porque simplemente son como ellos, sin eufemismos, sin posiciones genuflexas ante intereses de ningún tipo que no sean las del pueblo. Su fuerza y motor para dejar hasta su vida en aras de alcanzar lo que nuestro libertador Simón Bolívar llamo “La mayor suma de felicidad posible” no tiene límite.
Honor y Gloria a los caídos en la plausible lucha por alcanzar un mundo mejor!!!
Viviremos y venceremos Comandante Chávez, la historia reclama la conclusión de su obra y la de otros líderes de nuestro hemisferio movidos por la sed de Justicia Social!! Cuente con nosotros en esa nueva y definitiva Campaña
Admirable.
Virginia King
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