Se nos fue el comandante, el amigo, el padre, el guía. Nos fue un hombre, nunca un Dios. Se nos fue Hugo Rafael Chávez Frías, nuestro presidente, el que nos brindó la luz y nos ha permitido ir venciendo la oscurana en nuestro país, en nuestra américa, en nuestro mundo. Se nos fue el mayor de los socialistas, de los comunistas, el que se entregó en cuerpo y alma por nuestro país, por los oprimidos, por las clases explotadas, el que realmente creyó en nuestras capacidades y nos dio las mejores de las condiciones y oportunidades.
Te lloramos presidente, y desconsoladamente. Verte ahí, aún después de haber dejado el plano material, irradiando tanta energía en el salón de la Academia Militar, así como sentir que mis “gracias comandante” las estabas escuchando, así como las miles de palabras emotivas de los miles que siguen yendo a verte para darte un último adiós. Un adiós que no significa otra cosa que más compromiso, significa la profundización del proceso que dejaste comenzado, aun con sus fallas y desaciertos, pero que cambio la forma de hacer política y de sentir nuestra sociedad de forma positiva.
Nos dejaste un mensaje de unión que comienza a materializarse en la persona de Nicolás Maduro, “el elegido”. A pesar de haber pasado por momentos difíciles, peleas internas, descalificaciones, que quizás se profundicen a medida que el proceso avance, vimos como el PSUV y el PCV se unió en una sola voz, se reconocieron mutuamente. Y es que este proceso no le pertenece a un grupo, a un partido o a un colectivo, pertenece a una gran masa que poco a poco va construyendo un liderazgo colectivo desde las bases.
Presidente Chávez, tú te sacrificaste por este pueblo que ha creído en ti. Nunca te vimos descansando, tampoco ir a tus chequeos médicos, lo cual resultó en una terrible enfermedad que, físicamente, pudo más y te venció. Pero no hay enfermedad que mate tu esencia, tu energía no se eliminó, sólo se transformó y se ha expandido en cada uno de los hombres y mujeres de esta patria bonita, de este continente, del mundo entero. Porque muy claro fue Simón Bolívar al decir “el que lo deja todo para serle útil a la patria, no pierde nada y gana cuanto se le consagra” y tú has ganado presidente.
“Disculpa que te trate de tú pero para ser mi Libertador tuviste primero que ser mi amigo”, decía Alí Primera en Canción Bolivariana y eso eres COMANDANTE AMIGO, COMANDANTE ETERNO. Ante ti, ante tu honor, ante todo lo que has representado para nosotros y nosotras, lucharemos para unirnos con un solo fin, el Socialismo y dónde quieras que te encuentres, sé que sonreirás junto a Bolívar, el Che, Sandino, Martí, Miranda, Marx, Lenin y todos aquellos luchadores y luchadores revolucionarios y revolucionarias que han nutrido nuestra historia proletaria.
MAS UNIDOS QUE NUNCA
PATRIA SOCIALISTA
VIVIEREMOS Y VENCEREMOS
* Militante Socialista
carlosgrillet@gmail.com
