El coronel Rondón sin pelear desquició, desestabilizó, sacó de la zona de confort, "esperoló´", temblequeó, desarticuló, desbando, desmoronó, desbarrancó, trituró, trasformó en amasijo y deformó totalmente a la MUD. O sea, popularmente hablando "esguañangó" a esa entelequia llamada MUD, donde se cobija los restos de una política totalmente desfasada de la realidad. Una política que no es política, pues es ejercida por un viejo bozaleado, digno representante de lo más rancio de la IV y unos desquiciados y aprendices mediocres que poco a poco han venido perdiendo, ante sus seguidores, la poca credibilidad que una vez pudieron tener. No más de imaginarse a un país, como Venezuela, en manos de estos locos, genera temor e incertidumbre. Como prueba los videos y las palabras impregnadas de tinta, que hablan de la poca hombría de esta dirigencia opositora. De sus mentiras, de sus engaños, de su mediocridad en su accionar político. Por eso y por mucho más el coronel Rondón los fusiló, sin disparar un tiro, ante los ojos de todo el mundo el pasado 30 de julio.
Ahora están mostrando una cara tétrica. Una cara de derrota que no puede con ella. Lucen feos, ajados, estupefactos y sin saber para donde apuntar. No saben qué hacer. Unos dicen más calles, más muertos, más destrucción y más quemados. Esos son los más radicales. Son los pocos, pero a la a vez, son los más peligrosos. Son quienes presionan y chantajean a quienes no estén de acuerdo con sus actitudes violentas y criminales. Otros hablan y están de acuerdo con participar en las elecciones para gobernadores. Pero callan. No quieren asumir sus responsabilidades, so pena que los etiqueten como traidores. Y también hay quienes quieren dialogar, negociar o sentarse en una mesa con el gobierno para hablar sobre los diversos problemas que afectan a Venezuela, y buscar soluciones. Pero no dan el paso definitivo. Están desojando la margarita, mientras el tiempo pasa y se instale la Asamblea Nacional Constituyente.
Por cierto, Leopoldo López y Antonio Ledezma han vuelto a sus recintos carcelarios, después que la Sala Penal del TSJ de les había asignado casa por cárcel. Ambos han violado los parámetros bajos los cuales les otorgaron tales medidas. Desde sus respectivos hogares difundieron videos donde dan fe de sus posiciones políticas. En ese orden de ideas, llama la atención algunos señalamientos de Antonio Ledezma respecto a la dirigencia de la MUD. Dijo, en un video, que "le hemos quedado mal a los venezolanos. El país merece una explicación". Estas palabras apuntan hacia los dirigentes de la MUD. "No se puede ganar batallas cuando nos derrotamos a nosotros mismos". Contundente este señalamiento. Y sentencia: "Es importante que nos digamos que Venezuela no se rinde. Los venezolanos no somos perdedores, pero no sigamos buscando salvadores ni al hombre de a caballo, somos nosotros mismos los que debemos buscar el éxito". Antonio Ledezma, les da en la madre a esta pobre dirigencia que busca que Donald Trump, en compañía de sus adláteres, como la Unión Europea, y los lacayos como de Juan Manuel Santos y Peña Nieto, entre otros, les haga el mandado, mediante una intervención. Venden a su patria al mejor postor.
Agregado:
Voceros de la oposición se preguntan que cómo es eso que el chavismo haya sacado más de 8 millones de votos habiendo tanta hambre en el país, tanta escasez de comida y medicina, entre otros. La respuesta está en que aquí hay una Venezuela heroica, con cojones bien puestos, y que a la hora de las chiquitas se postra rodilla en tierra para defender a su patria de los apátridas. Allí, señores, está la respuesta. ¡Aprendan, que la ANC está a horas de instalarse!
Teófilo Santaella: periodista egresado de la UCV. Militar en situación de retiro. Ex prisionero de la isla del Burro en la década de los 60.