"Los hombres son los productores de sus representaciones, de sus ideas, pero LOS HOMBRES REALES Y ACTUANTES, tal y como se hallan condicionados por un determinado desarrollo de su fuerza productiva. La conciencia no puede ser nunca otra cosa que el ser consciente, y el ser de los hombres es su proceso de vida real". C Marx. "La Ideología Alemana".
En diferentes artículos de esta serie, venimos trabajando, para develar los peligros que se ocultan tras las prácticas culturales. A esta preocupación se le suma el papel de la ideología como "falsa consciencia", y de la fetichizasión como exaltación de la apariencia, lo que desemboca en la existencia de sujetos alienados y enajenados, dándole al capital hegemonía social, económica y política. De no ser por EL MÉTODO categorial y dialéctico de Marx, nos costaría mucho más, comprender y exorcizar el metabolismo y la fisiología del capital.
Toda sociedad tiene y ejercita su cultura, y desde esta dimensión, cada una enarbola sus peculiaridades. Cuando estas prácticas son creadas, incoadas, devenidas, o forjadas con propósitos dominantes y de control social, estamos ante la conjura de una clase que para hacer fortuna, tiene que dominar cotidianamente a sus oprimidos. El dominio no se ejerce solo por la fuerza, la cultura suele ser un excelente vehículo, para que la víctima se comporte como al victimario le conviene, con el agravante de que el controlado se cree libre.
Cultura son todas las prácticas humanas, y no hay sociedad que no las tenga. "Para nosotros, la cultura es el modo de organización de la utilización de los valores de uso" (Samir Amín). "organización de la utilización de los valores de uso", esto es lo que habitualmente nos ocurre. A esta precisión del intelectual egipcio Samir Amín, recordamos que Marx había colocado en el plano terrenal y cotidiano de la acción humana, señalando que: "los hombres son (seamos) los productores de sus (nuestras) representaciones…pero los hombres reales y actuantes…(así) el ser de los hombres es su proceso de vida real". Ni Marx ni Amín se refiere a un sujeto abstracto o etéreo, sino al real de carne y hueso, al que produce y consume, al que vive en la sociedad en un tiempo y espacio determinado, al que ejecuta prácticas en correspondencia con su ubicación social. En su propósito hegemónico, el capital (que tiene cuerpo y es mesurable), se provee y crea cuantos mecanismos requiera para su acción social controladora. Los medios de comunicación, propiedad privada, son poderosas herramientas para estos menesteres.
En términos contables, el sistema capitalista lleva más décadas en crisis de menor y mayor intensidad, que tiempos de estabilidad. Sus contradicciones insolubles, que lo son dialécticas, suelen estar presentes en toda sociedad separada en clases. Desde la década de los setenta, el capital vive una decadencia prolongada que se irá agudizando. Cuando el capital transitoriamente se estabiliza y es exitoso, es porque los pueblos padecen de precariedad progresiva. Si al mercado le va bien, al pueblo le va mal. Ciertamente como "relación social", el capital no puede ocultar que en el mercado, hay dos propietarios enfrentados: el capital y la fuerza de trabajo. Dialécticamente los dos se necesitan, pero a la vez se enfrentan. El capitalista, pone "su" capital (expropiación histórica y explotación consumada), el trabajador lo único que puede ofertar y vender; su fuerza de trabajo. Esta relación desigual, por ser fetichizada, aparece a los ojos comunes, como una relación entre cosas y no entre personas, más aún, entre clases. Este falseamiento de la verdad es ideología. LA CULTURA SE ENCARGA DE SU DESPLIEGUE.
El capital, tiene que estar permanentemente "revolucionando" las ciencias, lo que se suele llamar "revolución científica", so pena de perecer. Su "revolución" no es social, es científica. Hechas propiedad privada, las ciencias son ideologizadas, por lo tanto buscarán oscurecer la realidad, están al servicio del capital. La apariencia social da la cara, mientras que la realidad es ocultada. "La falsa consciencia", "el mundo al revés", la "verdad oscurecida" permean todos los espacios sociales. El aparato del Estado burgués, obviamente creado por el capital, vendrá a legitimar los intereses explotadores. Al capital especulativo neoliberal de hoy, le estorba el Estado-nación, criatura forjada por ellos. Ya no toleran las conquistas logradas por los trabajadores en estos espacios semi democráticos. Inclusive, "El Estado de bienestar" hechura demagógica suya, lo eliminarán. El capital no puede ser justo ni democrático. Su naturaleza es destructiva y su lógica la acumulación. Creer en la existencia de una burguesía nacionalista y antiimperialista, ES UNA RISA. Nuestras burguesías son profundamente dependientes del capital internacional. JAMÁS SERÁN AINTIIMPERIALISTA, PASO CLAVE PARA IR AL SOCIALISMO.
En carta de Engels a J Bloch en 1890: "si alguien lo tergiversa diciendo que el factor económico es EL ÚNICO DETERMINANTE, convertirá aquella tesis en una frase vacua, abstracta, absurda". Con esta afirmación, quienes ven en el marxismo una doctrina determinista, quedan descalificados. Tres años después, el mismo Engels le escribe a su amigo Mehring: "En lo que nosotros (Marx y él) más insistíamos, era en derivar de los hechos económicos básicos las ideas políticas, jurídicas, etc… Y LOS ACTOS CONDICIONADOS POR ELLOS". Así, en el capital, el salario parece contener dentro de sí, el trabajo excedente o trabajo no retribuido (plusvalía), como si se hubiese pagado, pero no lo ha sido. Esta parte del trabajo es gratuito para el dueño del capital, que se convierte en dinero y luego en capital. Este proceso de producción no es natural, pero de esto se encarga "la justicia" burgués; en los Contrato laborales con su justicia burguesa, legalizando la explotación. Esta práctica, ESTA CULTURA DEL TRABAJO, tiene sus imbricaciones en toda la vida de los trabajadores. Lo hemos recordado: el sistema se reproduce, su cultura reproduce los intereses del capital. Desideologizar es tarea de la contracultura.
El capital debe ocultar su esencia; debe fetichizar sus relaciones sociales, económicas y políticas. No puede aparecer abiertamente como lo que es: expoliador de naturaleza y de la fuerza de trabajo. Las relaciones que realmente son entre cosas (mercancías), debe hacerlas aparecer como relaciones entre personas. Sus crisis (las del sistema capitalista) son el resultado de la acumulación de sus contradicciones. La cibernética, la nano ciencia y nano tecnología, la robótica, todas ellas ideologizadas, aparecen como factores positivos en favor de la sociedad, se pretende hacernos creer, que estas ciencias marcaran "el fin del trabajo" duro, como erróneamente puntualizaron "el fin de la historia". Las ciencias pueden tener el prodigio de abaratar no solamente costos, también la mano de obra asalariada. La mano de obra barata, es un poderoso incentivo a la producción. Lo mismo lo es el desempleo o "ejército de reserva" que crea la dinámica capitalista. "El capital no tiene patria".
"La división del trabajo", nos explica la ubicación y las funciones sociales escalonadamente. No hablamos de personas en abstracto, hablo de clases sociales en concreto, por ende de intereses de clase. Hablamos de prácticas particulares de cada clase, pero de su articulación inducida por el capital para el control social. En esta intencionalidad del poder, es donde hemos querido enfocar nuestro ataque; la cultura hábilmente fraguada por el poder, para adormecer la conciencia, para oscurecer la realidad, para impedir irreverencias, levantamientos o conmociones sociales y FUNDAMENTALMENTE EL SOCIALISMO, así, LA PAZ DEL CAPITAL, ES LA PAZ DE LA DOMINACIÓN. IDEAS DE POCOS GOBIERNAN A MUCHOS. Y ESTOS, LOS MUCHOS (explotados) SE COMPORTARAN SEGÚN ESTAS IDEAS CONTENIDAS EN SUS PENSAMIENTOS, QUE SE HACEN PRACTICAS EN SUS VIDAS COTIDIANAS (CULTURA). Continuará el próximo sábado.
VIVA LA GLORIOSA REVOLUCIÓN BOLCHEVIQUE. LA MISMA QUE MURIÓ CON SU CREADOR: LENIN. DESPÚES, LO QUE SOBREVINO, FUE UN FEROZ CAPITALISMO DE ESTADO ALTAMENTE BUROCRATIZADO (ESTALINISMO).