Nos preocupa y ocupa EL HOMBRE CONCRETO, no el abstracto, el etéreo. El sujeto CONCRETO ES SOCIAL; LAS CLASES SOCIALES EN SU LABERINTO. Nos interesa el sujeto que "transforma la naturaleza", el ¿COMO LA TRANSFORMA? y ¿Cuáles sus consecuencias? Por esta vía, además de conocer el origen del sistema capitalista, descubriremos, que la verdad objetiva está en nuestra praxis, es decir; el conocer la verdad real y concreta CON NOSOTROS DENTRO DE ELLA, lo que nos dará, LA VERDADERA CONSCIENCIA DE LA REALIDAD; lo que somos donde estamos y cuales nuestras responsabilidades en consonancia con la clase social real en la que "vivimos". Es cierto: "El SER SOCIAL determina la consciencia". Esta última articulación, nos hace auto reconocernos, condición previa para conocer nuestra realidad concreta que queremos conocer, el origen y metabolismo del todo sistémico del capitalismo.
La ideología nos atrapa; nos oculta y oscurece la realidad. Para esto ella se usa, es una poderosa herramienta de domesticación. Lo que nos ocurre socialmente y hasta personalmente, puede "aparecer" como normal, natural apropiado e inevitable; es la ideología en su tarea de control social. Los científicos afirman, que desde El Homo Sapiens a hoy, los humanos tenemos más o menos un millón de años sobre la tierra. El raciocinio es construcción homo sapiens. Lo religioso y lo real fueron socializados. La etiología de LA PROPIEDAD PRIVADA DE LAS CLASES SOCIALES y sus consecuencias, son de menos data temporal. Propiedad privada y clases sociales son tardías; la humanidad existió sin ellas. Esta historia de la propiedad privada, de la división del trabajo y del Estado, se mueve "por opuestos", esto es, por contradicciones solubles e insolubles. Esta dinámica MUEVE A LA HISTORIA.
No hay una historia universal única común y uniforme, HAY HISTORIAS. La historia es UN CONSTRUCTO SOCIAL. No es lo ahistórico la esencia movilizadora. La historia no se mueve por casualidades sino por causalidades. Sus contradicciones dialécticas entre OPUESTOS SOCIALES concretos mueven las clases sociales. Para entender esta complejidad, la teoría sola no es suficiente, teoría y práctica son necesarias: LA PRAXIS de Marx.
Vladimir Ilich Ulianov mejor conocido como LENIN, fue un personaje de la PRAXIS. Conocedor del "racionalismo" de la Ilustración (la modernidad europea, esto es el sistema capitalista), prefirió y optó por defender al marxismo. Fue uno de sus mejores propagadores. Entendió que si el capital no hace "lo que hace" desaparece. Su barbaridad es su oxígeno y también su veneno mortal; asunto dialéctico. Su naturaleza es destructiva y su lógica es la de la mayor ganancia de riqueza: no tiene ética tiene intereses.
La II Internacional, desplegada en Europa en las últimas décadas del siglo decimonónico y primeras décadas del S XX, fue una mezcla de ideas, deseos, propuestas, e "intenciones", que en su mayoría defendían al sistema capitalista: deseaban solo reformarlo oxigenarlo o mejorarlo. Este rosario de falacias, no eran casuales, eran intencionadas. Esta mescolanza de "teorías", alimentaron el surgimiento de la Socialdemocracia y luego del progresismo. Así, en Socialdemócratas y en progresistas hay de todo: socialistas sin socialismo, socialismo sin revolución, socialismo solo con reformas, reformas que no quebrantes la esencia del capitalismo. Socialismos y progresismos A LA CARTA. En este maremágnum de teoría y práctica, debió moverse LENIN. Los socialdemócratas alemanes, con sus conductas vacilantes y conservadoras, abrieron espacios al nazismo alemán. También asesinaron a Rosa Luxemburgo. Lo que ocurre hoy en el mundo, con una izquierda famélica casi desaparecida no es casualidad.
Que Lenin fue etapista cierto. No pudo conocer toda la descomunal obra escrita de Max, no se habían publicado muchas de las obras del "Moro" (Aún hoy, aparecen obras inéditas suyas). El Marx "etapista" del Manifiesto, no lo será tan rígido en su carta/respuesta a Vera Zalsuchi. Lenin, tardíamente entendió la complejidad del etapismo. Que "hay" varios Lenin; cierto, debió moverse sobre terrenos movedizos, complejos y peligrosos, de aquí su movilidad teórica y práctica. COMO AÑORAMOS HOY UN LENIN. PERO…TENEMOS SUS TEXTOS, SUS PROPUESTAS Y SU EXPERIENCIA. Él nos advirtió, de los peligros de fundamentalismos ilusos y utópicos, como de los reformistas cómplices de lo existente.
Aplicar el marxismo clásico en una sociedad atrasada históricamente, es un asunto muy complejo; Lenin lo intentó. NO había experiencia humana referencial sobre socialismo oficial. Los títulos de la mayoría de los escritos de Lenin, muestran la complejidad del asunto. Cercado por reformistas, sobre salir por encima de ellos para inscribirse en la inmortalidad, fue una tarea titánica: Lo logró. El tiempo posterior es otra cosa.
Construir una teoría política y social cónsona con su tiempo. Organizar al pueblo en UN PARTIDO. CONSTRUIR UN PARTIDO, DISEÑAR SUS FORMAS INTERNAS Y EXTERNAS, COSA DIFÍCIL. En esto, también anduvo nuestro personaje Ulianov. Solo pensar en el descomunal territorio del imperio ruso, las adversidades y carencias de la mayoría de la población rusa, la ferocidad de sus gobernantes, y el acecho de países vecinos para fagocitarse territorios rusos, también da dolor de cabeza. Marx habló de las necesarias condiciones previas para "NO TOMAR EL CIELO POR ASALTO", pero en los tiempos de Lenin, los infiernos estaban en la tierra; VUELVEN….
La prisión, el exilio y el ajusticiamiento de su hermano querido, lo marcó. Quienes le buscan solo sus defectos y errores, no conocen la realidad política, económica, social y material de aquella Rusia. Lenin, fue un revolucionario "profesional", es decir PERMANENTE. Mantuvo diferencias con quienes admitían el espontaneísmo y hasta el oportunismo circunstancial en la política. El MILITANTE DEBE MILITAR PERMANENTEMENTE EN SU TAREA REVOLUCIONARIA. Es una entrega a una causa justa.
Prolijo en sus escritos, nos puede atisbar parte de las circunstancias de entonces. Superar las ilusiones, los "nacionalismos" peligrosos, las utopías irrealizables, los personalismos, los trepadores oportunistas, los fanatismos, el fraccionalismo político, la falta de claridad real y concreta de muchos, las maniobras de los agentes e intereses del capitalismo, requería una lupa potente. Lenin la tenía. Su genio dio para bastante. El LENINISMO EXISTE Y VALE SU ESTUDIO Y CONTINUIDAD: es de nuestra responsabilidad. CONTINUARÁ…