Este artículo se dirige particularmente a aquellos y aquellas lectores y lectoras que viven en el exterior y a quienes el acceso al sitio web Aporrea.org no está bloqueado o restringido por Nicolás Maduro, el actual presidente de Venezuela.
Aquí en Venezuela, Nicolás Maduro nos ha bloqueado el acceso a Aporrea.org.
¿Por qué?
Bueno …
Saben …
Conocí personalmente a Chávez.
Le hice varios trabajos de investigación muy importantes y claves a Chávez para la Revolución Bolivariana, pero lo hice siempre --- y únicamente --- con la intención de que esas investigaciones tengan relación directa con el bienestar de los más desposeídos y los más necesitados de nuestra sociedad, y jamás a favor de los políticos y de sus partidos políticos, aun si fueran "chavistas", ni a favor de los ricos o de las clases media o de sus imitadores.
Hice las cosas que hice para Chávez, y escribí durante unos 13 años (2002 – 2015) a favor de la hoy-inexistente Revolución Bolivariana porque creía en Chávez, y sigo creyendo en él.
Cuando él lo decía, lo hacía.
Siempre creí en sus buenas, sinceras, y honradas intenciones, en su honestidad, en su valentía, y en su audacia, pero no en ese tipo de audacia que la inmensa mayoría de los políticos utilizan para hacerse de la suya políticamente o materialmente así como lo hace Maduro por ejemplo, no, o ese tipo de audacia que sirve de mascara para esconder la cobardía, así como lo hace Maduro, o esa audacia que solo sirve para aparentar, así como lo hace Maduro.
No señor.
Como les dije, yo conocí a Chávez, y en mi estimación él era auténtico, él no tenía nada que esconder, ni nada que aparentar, ni nada que disfrazar, ni ocultar, o enterrar, Chávez no torcía la realidad ni la verdad para justificar quien era, qué hacía, o para justificar las cosas que él decía o no decía.
Así era el Chávez que conocí.
Así era la Revolución Bolivariana que Chávez impulsaba.
El Chávez que conocí no era presumido o pretencioso.
No, él tampoco mentía, más bien él rectificaba y enfrentaba la realidad en cada momento, cara a cara, sin temor, era valiente, era real, era verdadero, y por ser así Chávez jamás persiguió a sus oponentes o a sus detractores … porque … él no tenía nada que esconder.
Jamás (que yo sepa) les impidió hablar en su contra.
Chávez no le temía a la verdad, ni tampoco manipulaba o torcía la realidad para acomodarla a sus intereses personales o para tratar de encubrir sus errores y debilidades así como lo hace Maduro.
Chávez era admirable.
Maduro no lo es (para mí), por nada.
No señor.
Ven, ese principio de la vida --- de enfrentar la verdad cara a cara sin temor --- era la base fundamental de la Revolución Bolivariana impulsada por Chávez, y por esa razón me consideré y me considero chavista y Revolucionario, porque soy así, siempre lo fui, Revolucionario, pero con la R mayúscula de Chávez, no con la r minúscula de Maduro.
Por eso nació y existió la Revolución Bolivariana.
Pero por eso mismo la Revolución Bolivariana ha muerto.
Porque desde que Maduro ha estado al frente de la ahora-extinguida Revolución Bolivariana, no ha existido la valentía de enfrentar la verdad cara a cara sin temor.
Lo que Maduro maneja no es ninguna Revolución.
Ya van varios años que Maduro anda cerrando o bloqueando medios de comunicación, periódicos, emisoras de radio, canales de televisión, sitios web, etc., y ha estado despidiendo, amenazando, arrestando, encarcelando, y deportando a periodistas.
¿Por qué?
¿A qué le teme?
¿Eso es ser Revolucionario?
¿O es cobardía, mediocridad, e infantilismo?
Increíblemente, además de bloquear a los medios opositores (anti-chavistas), Maduro también ha estado bloqueando a algunos medios chavistas como Aporrea.org.
Sí señor, así es.
Desde febrero del 2019 Maduro nos ha bloqueado el acceso a Aporrea.org a nosotros los usuarios que vivimos aquí en Venezuela (los usuarios en el extranjero no están bloqueados ya que Maduro no puede bloquear a nadie fuera de Venezuela, miserable).
Ver: https://www.aporrea.org/medios/n341965.html
Son unos cobardes, mediocres, e infantiles.
Son unos antirrevolucionarios.
No son nada chavistas.
Creo que es muy importante entonces que los lectores en el extranjero que se consideran chavistas y Revolucionarios tomen muy en serio este miserable comportamiento profundamente antirrevolucionario de Maduro y sus colaboradores y seguidores.
Esto no es Revolución.
Aquí no hay Revolución.
Aquí lo que hay es una barata telenovela disfrazada de revolución, con r minúscula.