Bolívar expresa una posición muy bien definida que refleja los mas variados
aspectos en las concepciones políticas y en las realidades del momento que
él representaba, es un hombre sin lugar a dudas de una conciencia
estrictamente democrática, muy a pesar de que la situación de ese tiempo que
se vive, lo ha encaminado obligatoriamente a llevar otras circunstancias y
otras posiciones donde la lucha liberadora tenía que ser rescatada para que
la indolencia se disipara. La justicia social, como erradicación de la
miseria del hombre. Se trata de crear una nación soberana, libre en el
concierto del universo; y un ciudadano justo, hombre a carta cabal,
integrado en plan de igualdad a los otros hombres.
Sabemos que este documento político, como costumbre de historiadores y
escritores idealistas, se han empecinado a determinarla como una pieza
filosófica y literaria. Nosotros tenemos la obligación de demostrar su valor
social objetivamente. Aquí encontramos las quejas de una sociedad, que en
sus proposiciones y búsqueda de una estabilidad, los criollos no sabían
todavía como se podría obtener, en vista de las duras contracciones que se
vienen enfrentando desde 1810, tales como la anarquía popular.
Bolívar se considera como una especia de síntesis de la ciencia y de las
artes del tiempo que vivía. Bolívar dijo muchas veces algo parecido, con
clarísimo conocimiento de los factores históricos.
Nos encontramos dentro de las mas graves complicaciones de la independencia,
la mayoría de los sectores oprimidos por los criollos se colocaron, no de
parte de lo que ahora caracterizamos como progresivo en la historia, la
lucha anticolonialista, sino junto a los enemigos, de sus enemigos, los
mantuanos dueños de haciendas, donde imponían las leyes esclavistas, o
miembros de ayuntamientos, desde los cuales administraban impuestos,
regulaciones de tierras, ejidotes, toda clase de presiones políticas y
económicas contra indígenas y pardos.
Comprobamos las grandes dificultades de Bolívar “HURACAN REVOLUCIONARIO”,
“JUGUETE”, ¿Qué significa?:
Internamente existen dos grandes movimientos sociales:
Uno: El esfuerzo de los mantuanos por conquistar el dominio político de
Venezuela, la libertad del comercio con el mundo, y el reconocimiento de su
condición nacional.
Dos: La lucha de los sectores populares, con los esclavos a la cabeza, para
lograr la abolición del sistema esclavista, de las distinciones de castas y
de la explotación de negros, indígenas y pardos, a través de numerosos
procedimientos en el ámbito de la producción, así como en el de la
circulación y administración de lo producido.
“HURACAN REVOLUCIONARIO”, Bolívar conoce perfectamente lo que está
ocurriendo, políticamente y socialmente en el momento y lo expresa; es la
gran contradicción entre los colonizadores y los colonizados; la
contradicción fundamental del sistema de producción esclavista, entre los
esclavos y los mantuanos, sus amos. La contradicción entre los indígenas
explotados en servidumbre y sus explotadores, españoles y criollos. A ello
Bolívar ya le suma el circulo de intereses distintos entre criollos
propietarios de tierras y otros, poseedores de capitales mercantiles. Lógica
social: Cuando el movimiento liberador se extiende al sur, surge de
inmediato otro tipo de oposiciones, entre mantuanos de Venezuela, criollos
de Colombia y del Perú, quienes colaboraron en muchos aspectos durante la
época de la guerra, hasta Ayacucho, pero no posteriormente. Cuando
comenzaron los factores fundamentales en las incipientes economías
nacionales a reflejarse en el terreno de las rivalidades políticas y
regionales. (Inclusive hoy en día mas vividas que nunca)
Bolívar comprende el significado real de la esclavitud, ya PETION,
Presidente haitiano lo ha conducido a la necesidad de extender la lucha no
solo con los colonialistas, sino internamente, Bolívar viene de experimentar
las derrotas de 1814, cuando estos sectores populares, se han incorporado a
las filas realistas que les permiten saqueos, pillajes, violaciones, consumo
de aguardiente y toda clase de represalias contra quienes los habían llevado
al cepo, a los calabozos, al botalón de los azotes. En 1813 y 1814, ya hacia
mucho tiempo que los esclavos fugitivos, en grupos, cimarrones, sin
lineamientos políticos habitaban las cumbres montañosas de nuestras
sierras, comerciaban con los contrabandistas en las costas y en los ríos del
llano y combatían en forma permanente contra las guardias armadas que
enviaban los criollos para someterlos.
En el discurso de Angostura Bolívar muestra una clara conciencia como hombre
político, sus concepciones son socialmente científicas, juzga con propiedad,
convence con la realidad y se extiende como una lección no solo del momento,
sino a todos los tiempos, con franqueza expone una correcta interpretación
histórica.
Con entera claridad, es el examen del colonizado que ya había expuesto en
Jamaica.
Con el índice señala precaución desde ya, muestra históricamente una lección
sobre el verdadero sistema democrático lineado sobre la libertad abstracta.
Al hablar así Bolívar en realidad encontramos la imploración política por la
vida de la república. Ella no podrá existir sin que todos combatan para
liberarla y sostenerla, es la busca de la unidad de todos los sectores
frente a los colonialistas.
Estas eran unas verdades surgidas de las condiciones en que se habían
dictado leyes, durante la guerra, pero el acento de Bolívar era más bien el
de una crítica a los juristas quienes se enorgullecían de sus creaciones. El
cotejaba las jactancias con la realidad y así prevenía, el mensaje en
general coloca las dificultades en manos de los legisladores, como en
anticipo de las reconvenciones que contra él se harían.
Una y otra vez encontramos a Bolívar inclinado sobre el tema de su propio
significado histórico, que comprendió a cabalidad dentro de las estructuras
de su época y de su ámbito de acción. Al estudiar su documento científica y
socialmente, encontramos en definitiva que Bolívar fue solo un instrumento
aprovechado para una lucha liberadora, de ahí que se trate como el héroe, el
guerrero, el gran combatiente, el soldado, el libertador y tantos otros
muchos calificativos para su culto y su glorificación.
Políticamente se le pusieron todas las limitaciones en constituyentes y
congresos. En Angostura no logra la declaración definitiva de la libertad de
los esclavos, es decir, se improbaron en la práctica sus decretos de
Carúpano y de Ocumare.
En Cúcuta, la constituyente estableció la “libertad de Vientres” y los
procedimientos de manumisión que claramente también fueron burlados por los
propietarios, a quienes correspondió contribuir a la formación de los fondos
que habían de liberar a sus propios esclavos.
La soberanía nacional trabajada, luchada por Bolívar frente a España, se ha
derrumbado y sus escombros quieren presentarlos con la fachada formalista de
una supuesta Republica políticamente.
Pero como legado quedan sus lecciones de política nacional o internacional a
esta Latinoamérica caribeña ahora encaminada de nuevo en busca de su propio
destino. Es así, desde el punto de vista científico revolucionario que
Bolívar se hace político, el más grande estadista del siglo XIX
latinoamericano y porque no decirlo del mundo, él está por encima de
cualquier otro, no hay sino que revisar su obra, es la más desarrollada, la
más política, la más social de la época.