Nuestra Constitución Nacional ordena: "La soberanía reside intransferiblemente en el pueblo, quien la ejerce…mediante el sufragio…" (Art 5). Este mecanismo, creado para el ejercicio de la democracia burguesa, ha sido deformado y prostituido; la política, está siendo degradada. Las esperanzas languidecen, los gobiernos se deterioran, los gobernantes se corrompen y los pueblos se arrechan. "Lo terrible no es la caída, lo terrible es la pendiente".
Detrás del gobernante, suele estar el verdadero poder: El capital. Se trata de un sistema, que se reproduce permanentemente en todas las instancias del modelo: se auto reproduce para controlar. Para sus propósitos de continuidad, los espacios de la cultura, son de su interés.
El sistema capitalista vive, gracias a sus contradicciones solubles e insolubles. No es paradoja, es dialéctica. Hoy, todo su poder no puede impedir su deterioro. La pobreza aumenta, la cuerda se tensa, los conflictos pululan, las contradicciones dialécticas y sistémicas brotan. La izquierda socialdemócrata y "progresista", se adapta, se entrega o recula: se hace contra revolucionaria. "Por sus obras lo conocerás".
El capital se está topando con su agotamiento. En procura de su defensa, los dueños del mundo construyen el metaverso y manipula con controles ideológicos; movimientos evangélicos están siendo usados como instrumentos políticos maniqueísta. La política nos convoca. Otra racionalidad, es necesaria y posible. Descodificarlo todo para que brote la vida: "La libertad más allá de la necesidad".
El capitalismo construye un sujeto que encaje con sus intereses. Es también un sistema ideológico; una forma de vida y de mala vida. No escapamos a sus influjos. La revolución sólo es posible, cuando se rompen y destruyen estos anclajes. En esta tarea revolucionaria raizal, Lenin recomendaba "ir fuera de allí", de la fábrica, es decir, no quedarse sólo en la lucha económica. En esta confrontación, "La CONTRA CULTURA" es clave.
El gobernante en su gobernanza, suele reproducir al modelo: la ideología controla. Gobernar no debe ser solo gestionar lo que hay: "Inventamos o erramos". La revolución es la construcción más trascendente del colectivo. Si a los pueblos, le sierran los caminos de sus luchas, asumirá los de la pólvora. Es un asunto de vida o muerte. La paz social sólo es posible sin la pobreza.
Una alta funcionaria (ASALARIADA) de la OTAN, declaró: "no nos pueden impedir expandirnos". Por su boca habla el dinero. Un puñado de multimillonarios se imponen. Su ambición no tiene límites: quieren más. El ambiente es tenso. Libia, Siria, Afganistán, Irak, Irán y Yugoslavia, saben de lo que es capaz el imperialismo. En Venezuela, conocemos en carne propia de sus perversiones. La guerra es un gran negocio para pocos. Mueren los pobres, enfrentados desde la trampa del patrioterismo. Pobres matando a pobres que no se conocían ni se habían hecho daño. "El hombre lobo del hombre"
El Estado no es una abstracción ni una representación del interés general, es una concreción que representa los intereses de las minorías. Fue construido para legitimar sus andanzas: las del capital. La izquierda reformista lo oxigena; no quiere salir de sus espacios. La consciencia social, es conocimiento y praxis de la realidad concreta: historia dialéctica en marcha.
El pasado 15 del presente mes, el presidente Nicolás Maduro en su mensaje anual a la Asamblea Nacional dijo: "HEMOS LOGRADO ACTIVAR LAS FUERZAS ECONÓMICAS REALES, DE VENEZUELA". ¿A cuáles "fuerzas económicas" se refería el presidente? ¿A quiénes beneficia éste "activar"? ¿Se puede beneficiar por igual a clases opuestas? La ideología encubre, maquilla, legitima, naturaliza y defiende los intereses del capital. Desde la ideología no se puede hacer revolución. Toda ideología es contra revolucionaria. En verdad, cada clase social tiene un mundo distinto, que responde a sus particularidades.
Lo dicho por el presidente Maduro, concuerda con lo señalado por altos voceros del gobierno. El Dip Nicolás Maduro Guerra afirmó: "Apostamos por el sector privado". El Dip Vielma Mora pidió "alfombra roja para los empresarios". El ministro Castro Soteldo nos asombró con la existencia de una "burguesía revolucionaria". El Dip y EMPRESARIO Pérez Abad, dirige la trama. La Asamblea Nacional, que dice representar al pueblo, legisla contra él. Los intereses del capital, son opuestos a los intereses del pueblo. "Por sus obras lo conocerás". ¿Dónde está "EL PLAN DE LA PATRIA" escrito por el Comandante Chávez? DIOSDADO tiene la palabra. HASTA EL PRÓXIMO VIERNES.
NOTA: Por donde se le mire, el R R de darse, será un costosísimo error político para la oposición. ¿Con cuál plataforma política se cuenta? Fragmentados, somos arroz con mango.