De la lectura de la denuncia de Cécil Gerardo Pérez: "Personal de Industrias DIANA, echado a la calle de manera ilegal, injusta y antisocialista", saqué en claro varias ideas, la primera fue referirme a la frase "izquierda trasnochada", una expresión usada por Maduro para descalificar el chavismo crítico. La segunda es más bien una pregunta de reflexión, ¿Cómo se explica el cierre de industrias Diana, una empresa que en su momento fue definida de propiedad social y que aún tiene capital del Estado?, es decir, ¿qué tienen que ver las sanciones con la privatización de industrias Diana?
La frase de Maduro resume lo que el presidente define como el nuevo modelo económico, una "revolución socialista" hecha con las armas (melladas) del capitalismo. Todos esos directores asignados para privatizar "todo lo que deba ser privatizado" están claros en hacerse diferenciar del socialismo y de los socialistas críticos, de ahí el valor político del epígrafe que acentúa el escrito de Pérez: "Pobre de aquella clase obrera que se subordine a gobierno alguno. No, ustedes son libres, independientes, critiquen, critiquen, sean irreverentes". Hugo Chávez (*)
Como verán, el asunto de los "arreglos" injustos, las solas reivindicaciones laborales, aquí, dejan de ser importantes, son irrelevantes, puesto que está en la idiosincrasia del capitalismo violar las normas laborales, lo requiere el capitalismo y el capitalista, y el "nuevo modelo económico" que impulsa Maduro es esencialmente capitalista; así estos tontos directores no-trasnochados, sean solo los liquidadores de la empresa (¡algo tienen que ganar!), responde a su lógica y a su espíritu maximizar las ganancias.
Las sanciones tampoco pueden desviarnos de esta realidad, tampoco llegan hasta ahí. Asociar a Maduro y su gobierno con "toda la buena voluntad del mundo", y con ser la "víctima" de la maldad del imperio, ha sido hasta ahora la visión maniquea que se intenta imponer sobre las denuncias hechas por el chavismo crítico: imperio=maldad pura; Maduro=defensor de los pobres y víctima de la despiadada guerra económica… Pero, todavía privatizan empresas del estado. Las razones a estas medidas deben ser explicadas de otra forma, no acusando a los trabajadores críticos de "izquierda trasnochada". En todo caso ¿Digan cómo se define la izquierda NO trasnochada?. De eso se trata este escrito, de la verdad, de hablar con la verdad, sin subterfugios baratos.
Hasta ahora el gobierno de maduro ha combatido las sanciones, primero alentando, y ahora profundizando al capitalismo y a los capitalistas, a Fedecámaras y a los llamados inversionistas extranjeros; mientras más se acentúan las sanciones, mientras más presión, más se abre la economía al capital privado. El gran "golpe de timón" de maduro ha sido hacia la derecha, "profundizar" la anti-revolución y el anti-socialismo, el anti-obrerismo; sale chevron de Venezuela y maduro activa la vieja apertura petrolera a los capitales extranjeros, esa es su pobre idea de "soberanía", de potencia económica ¿Justicia social dentro del capitalismo?
El que no vea en esto una contradicción, ¡que nos acuse de comunistas trasnochados!, pero que nos explique cómo son y serán los nuevos revolucionarios NO-TRASNOCHADOS.
Lejos de definir los bandos, el maniqueísmo de maduro solo ha diluido las definiciones en un hybris, un cruce, solo conceptual, de capitalismo y socialismo, sobre el cual se ha enseñoreado el viejo reformismo oportunista, que tanto temió y denunció Chávez en sus alocuciones (de ahí, después de muerto Chávez, lo que Sanguino llamó la "actualización" del Plan de la patria, una vulgar mutilación y adulteración del documento). ¡Fácil acusarnos de radicales, de "trasnochados"!, así se les facilita a muchos no criticar ni pensar.
En medio de la ofensiva de Trump, en la radical política colonial, racista, belicista, no ser crítico a fondo, no ser radical a favor de los pueblos, de los trabajadores, de los que nada tienen es un crimen de lesa humanidad. La paz, en estas condiciones, es un chantaje de los que están dispuestos a esclavizarnos. Ahora más que nunca hay que tomar partido por la igualdad y la justicia social. Sin igualdad y sin justicia social no puede haber patria, y sin patria, el patriotismo es otro chantaje de los poderosos, útil para sacrificarnos por las causas de los que nos esclavizan. Radicalizarse es tener conciencia de clase, visión de conjunto y de rayos x, ver el alma primero que los ojos de los políticos, demagogos y mentirosos, de las dos derechas, la madurista y la pitiyanki. Volvamos por el camino de Chávez y de la lógica del socialismo para vencer la lógica del capitalismo.
Chávez es un símbolo de la revolución socialista en el siglo XXI
