El problema del movimiento global que ha surgido, que se autodenominan “Los Indignados”, es que no logran un discurso, plantean un reclamo, que a ciencia cierta no se sabe a quién se hace, se dice vagamente “contra el sistema financiero”, otros repiten con retóricas abstractas “el capitalismo es el culpable”, así no se llega a ninguna parte.
El G20 estuvo reunido en Europa, plantearon supuestas soluciones para combatir la crisis de deuda soberana, pero no dijeron como hacerlo, asomaron unas ideas de refinanciamiento de la deuda de Grecia por ejemplo, ofrecieron a la banca privada cambiar bonos de deuda con vencimiento de corto plazo por nuevas emisiones a largo plazo que tendrían la mitad del precio de los que se vencían, se espera todavía por el primer banquero a acceder a tal petición. Eso es aceptar el impago de Grecia de manera indirecta.
En los gobiernos de Europa y EEUU no hablan qué hacer con la especulación financiera, ni con las operaciones de futuros o derivados. El caso de Europa es terrible, porque los banqueros compraron bonos de deuda de los países, el endeudamiento lo hicieron apalancados, es decir con dinero de los ahorristas, no con sus propios recursos, al estallar la crisis “subprime”, la desconfianza en el sector bancario produjo quiebras y caída en las cotizaciones de los bancos, los gobiernos tuvieron que rescatar a las instituciones financieras que tienen la deuda de esos estados, los estados entonces quedaron con déficits, lo que ha generado la caída estrepitosa de los precios de los bonos de deuda y la pérdida de sus calificaciones (PIIGS, EEUU), de hecho, gracias a la especulación, los mismos banqueros que tienen endeudados a sus países, ahora mediante los derivados financieros especulan contra los propios bonos de deuda en su poder, el problema es ¿Quién rescata a los gobiernos? Más allá de hablar de un sistema, hay un asunto moral, de corrupción, esta última no es capitalista o socialista, es corrupción y punto.
Hank Paulson (1946) fue Secretario del Tesoro de EEUU, nombrado por George W. Bush y le tocó lidiar con la caída de Lehman Brothers. Antes de ello Paulson fue gerente general de Goldman Sachs uno de los bancos de inversión más poderosos en el mundo. Desde el gobierno de Ronald Reagan comenzó un proceso de desregulación de la banca y se fusionaron los bancos de inversión con los bancos comerciales. Allí comenzó todo.
La desregulación de la banca permitió la creación de derivados financieros, que según Alan Greenspan (Ex Presidente de la Reserva Federal de EEUU) sería para dar más seguridad a los mercados, actualmente los resultados son otros. Uno de los instrumentos más populares que se comerció en esa etapa fue el CDO (Obligaciones de Deuda Colateralizada), que implicaba la creación de bonos con activo subyacente deuda privada, hipotecas, vehículos y consumos, los mismos se vendían a inversionistas, como lo hizo por mucho tiempo Goldman Sachs con Paulson al frente, pero esa misma desregulación permitió los seguros, o los llamados CDS que comerció AIG. Goldman Sachs ofreció millones de dólares en bonos a sus clientes y al mismo tiempo se aseguraban contra la caída de los precios de dichos bonos, al final Goldman Sachs, especuló contra los mismos instrumentos de inversión que ofrecieron a sus clientes, produciendo pérdidas masivas a inversionistas, además de ser este uno de los factores claves de la crisis de 2008.
Bush nombró a Paulson como Secretario del Tesoro y este en 2008 tuvo que lidiar con la quiebra de Lehman Brothers, UBS, Merrill Lynch, la aseguradora AIG, un monstro que él mismo ayudó a crear. Para ello Paulson debió vender su capital en Goldman Sachs por unos USD 450 millones de dólares y con impuestos exonerados “por ese sacrificio” de aceptar el cargo público, porque había un “asunto moral” de por medio.
La desregulación debe ser una bandera del movimiento “indignados”, no es que necesariamente se requiere la intervención estatal como protagonista, pero si se debe tener la vigilancia a quienes con el dinero de los trabajadores y pensionados crean situaciones como la que se vive actualmente en el mundo. Recuerden a Alan Greenspan en 1998, después que Larry Summers (Ex Secretario del Tesoro de Bill Clinton) desde su cargo se confrontó a Brooskley Born (En ese entonces presidía la CFTC), para que parara una propuesta de regulación de derivados, presionado por los 13 banqueros más poderosos de Wall Street, Greenspan, para entonces presidente de la FED dijo: “la regulación de transacciones de derivados que son negociadas en privado por profesionales, es innecesaria” (Julio 24, 1998). Recomendó al Congreso legislar para prohibir la regulación de la banca y sus operaciones.
@alexvallenilla