CELAC Y LOS GRINGOS



Para gobierno de EEUU, preminente es la OEA. La MUD muda está.



Eligio Damas



Fue notorio el mutismo oficial gringo ante el nacimiento de la CELAC. No obstante, algún personaje tildado de experto, con vínculos en el Departamento de Estado, como quien no quiere la cosa, ha opinado que allá dentro, este acontecimiento no ha despertado interés y se ha visto con indiferencia, algo como “no les da frío ni calor.”

No obstante, en el día de hoy sábado, 03-12-11, después de haber escrito este artículo para un diario y enviado al mismo, lo hemos modificado, porque han aparecido unas declaraciones del Departamento de Estado, en las cuales para nada se menciona a la CELAC, un gesto prepotente que se redimensiona cuando afirman que para el gobierno de EEUU la OEA es la instancia “preminente” para tratar los asuntos de los países del continente.

Por supuesto quienes así opinan, con demasiada cobertura en la prensa internacional, quieren que esa sea la matriz. La Clinton, Obama – a éste en segundo lugar no le pongo por descuido – y quienes manejan los asuntos de política internacional en el congreso estadounidense, mantendrán esa actitud, porque justamente quieren que el pueblo de aquel país y del mundo todo, crea que el nacimiento de la CELAC, nada significa. Además, lanzan un cínico mensaje, según el cual, son ellos quienes deciden lo que los demás debemos hacer

Pero, no hay cabida para pensar que esa actitud se corresponde con los hechos y es verdadera esa “indiferencia” y subestimación de lo que acá ha acontecido. En el Departamento de Estado, están prendidas las alarmas y ahora mismo o desde tiempo atrás, no lo dude amigo lector, hay una o varias comisiones buscándole la caída a la jugada. Decir que la OEA es “preminente” para tratar los asuntos del continente, pone de manifiesto la intención gringa de sabotear el organismo que ahora nace.

Pero pese esa diabólica señal, se está dando en esta parte del mundo el cuadro soñado por Bolívar, cuando aspiró un organismo integrado “sólo por las antes colonias españolas” y, el gobierno gringo desbarató valiéndose de argucias y servilismo de ocasión, e impuso “América para los americanos”.

No es fácil oponerse a la CELAC, cuando treinta y tres países se han acordado para integrarla, por encima de las diferencias existentes entre ellos. No lo es, tanto que la oposición venezolana se ha quedado sin discurso. No apoya ni celebra pero tampoco dice nada en contra. Ha asumido ni más ni menos la conducta que emana de la Casa Blanca. No es casualidad pura. Mañana repetirán el discurso de la Casa Blanca, que “sin la presencia de EEUU ese organismo no tiene futuro”.

Pero el nacimiento de la CELAC, pese a lo que se diga, para no adelantar los acontecimientos y darle sostén a los enemigos, va a plantear problemas de competencia con la OEA y supone una instancia donde los pueblos latinoamericanos y caribeños pueden debatir sus asuntos sin injerencia extraña. Justamente, en muchos de los discursos hasta ahora pronunciadas en las reuniones de cancilleres, se ha celebrado, aunque discretamente, la ausencia de intereses ajenos al ámbito de los pueblos que acoge la CELAC.

Además, la Casa Blanca, no tuvo la prudencia y precaución de escuchar los discursos y enterarse debidamente de lo que los países que acaban de integrar la CELAC aspiran de este organismo, antes de pronunciarse como lo hizo, que va mucho más allá de lo que dio origen a la OEA y malamente ha cumplido; aparte de servir a los intereses de los Estados Unidos del norte del río Grande.

Por ello, la aparente indiferencia gringa, es sola una pose. Esperemos el juego se desarrolle. Se escucha el ronco cantar de cisnes.


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