En el viejo continente, donde los monopolios económicos quieren vivir más del fútbol que de la producción de alimentos, más de la religión que de la política propiamente dicha, más de la ilusión que del realismo, más de las patadas a un balón que del cerebro planificando políticas para el bien común, hay un caso digno de destacar y de admirar porque nos demuestra que no todo es fútbol y dinero.
Oleguer Presas ha sido un extraordinario jugador de fútbol, un defensa de primera línea, muy emblemático por cierto y nada tiene que envidiarle a los grandes futbolistas que más destacan los medios de comunicación deportivos. Militó en el Barcelona, en el Ajax, pero siempre ha tenido una visión de mundo distinta a la que tiene la inmensa mayoría de los grandes futbolistas, los entrenadores y los dueños de equipos. Precisamente, para no responder afirmativamente a una convocatoria para formar parte de la selección de España, Oleguer Presas le señaló al entrenador Luis Aragonés: “…cómo veía el mundo y que creía que si no hay la suficiente implicación o sentimiento, es mejor que vayan otras personas…”. Ni el fútbol ni el dinero nunca han estado por encima de la convicción de Oleguer de servir con lealtad a su pueblo de Cataluña.
Oleguer entiende por independencia el “…el hecho que los ciudadanos puedan decidir todos los aspectos de su vida…”. Pero aunque considera complicado hablar de independencia hoy día, no deja de luchar por ella. Reconoce que ha habido otros deportistas o futbolistas como él “… pero con ellos no se ha hecho tanta polémica”. Imaginémonos a Messi y Ronaldo luchando por la independencia de las provincias o regiones donde han nacido. No sería los golazos ni la calidad de futbolista lo que destacaran los medios de comunicación sino sus posiciones políticas por considerarlas contrarias no tanto al deporte rentado sino a las “buenísimas” bondades del capitalismo salvaje que no puede vivir, entre otras cosas, sin monopolios o mafias que dominan el fútbol a escala internacional.
Oleguer Presas es militante de la agrupación que plantea la independencia de Cataluña. Eso es muy mal visto por el Gobierno falangista que está en el poder político en España. Por eso se hacen polémicas las opiniones del futbolista Oleguer. Este va como candidato de la CUP (Candidatura d’unitat popular) en la elección del 25 de noviembre. A lo mejor ya esa elección se haya producido antes que sea publicado este artículo, pero en todo caso le deseo todo el éxito del mundo al camarada Oleguer Presas. En verdad, se lo merece porque, aunque no lo ha dicho o no sé si lo ha dicho, Oleguer cree en que son los trabajadores los que deben ser fundamentales protagonistas en la lucha política por alcanzar los objetivos que generen verdadera justicia en su tierra natal.
Algo admirable y que desafió todo ese oleaje perverso de todas las organizaciones políticas de España que han perseguido con saña el sueño de una nación vasca fuera del dominio del Estado español y su monarquía, fue cuando Oleguer Presas, en 2007, publicó un artículo en el diario Berría manifestando su solidaridad con el etarra Iñaki de Juana Chaos. Pero Oleguer no se detuvo allí, fue más allá, traspasó la frontera en que el Gobierno español reprime, acosa, amenaza y actúa en contra de los independentistas cuando criticó al Estado monárquico y capitalista español por desarrollar o aplicar éste políticas antihumanas con los presos de ETA. ¡He allí una demostración que a Olaguer le importa mucho más la dignidad de la gente de su pueblo que el dinero! La firma deportiva Kelme le revocó el contrato a Oleguer porque éste se atrevió criticar al Estado español.
Oleguer se ha hecho inquebrantable en su posición política independentista. En cualquier parte donde ha jugado ha seguido expresando sus opiniones. Se solidarizó con el movimiento social okupa, creado por esas masas necesitadas de vivienda o de trabajo, dedicados a tomar posesión de edificios abandonados con el objeto de transformarlos en tierras para el cultivo o viviendas, lugares de reuniones o centros con fines sociales y culturales. En fin: Oleguer es un luchador social por el derecho de la gente a la vivienda, al trabajo, a decidir su propio destino. ¡Viva Oleguer!
Exitos, camarada Oleguer, éxitos. Has demostrado, camarada Oleguer, que en Europa no todo es fútbol y dinero, que la vida humana con justicia y dignidad es mucho más importante que los chorros de dinero que llegan a los bolsillos de futbolistas, entrenados y dueños de equipos.. ¡Viva Oleguer!