La máxima tragedia geopolítica de 2012 seguirá siendo la máxima tragedia geopolítica de 2013: la violación de Siria.
Tal como de vez en cuando me refiero a mis pasajes preferidos de Hemingway, he estado volviendo últimamente a algunas secuencias que filmé hace años en el zoco de Alepo –el más extraordinario de todos los zocos de Medio Oriente-. Es como si me dieran un tiro por la espalda; me gustaba la arquitectura del zoco así como su gente y los comerciantes. Hace semanas, la mayor parte del zoco –el pulso vivo de Alepo durante siglos– fue incendiado y destruido por los “rebeldes” del llamado Ejército Libre Sirio (ELS)
En esta tragedia siria no hay un joven héroe de Hemingway, ningún Robert Jordan en las Brigadas Internacionales combatiendo junto a las guerrillas republicanas contra los fascistas en la Guerra Civil Española. En la guerra civil siria, las brigadas internacionales son sobre todo las del tipo mercenario, salafista-yihadista, decapitadores y atacantes con coches bomba. Y los (pocos) jóvenes estadounidenses en el lugar son básicamente peones de alta tecnología en un juego escenificado por el rapaz club OTAN/CCG (la Organización del Tratado del Atlántico Norte y sus títeres árabes del Consejo de Cooperación del Golfo).
La tragedia continúa, el Estado sirio, y su aparato político y militar de seguridad mantendrán sus mini guerras relámpago sin preocuparse del “daño colateral”. Al lado opuesto, comandantes “rebeldes” apostarán a un nuevo Consejo Militar Supremo alentado por saudíes y cataríes.
Los salafistas y salafistas-yihadistas del Frente al-Nusrah –fanáticos del Siglo VII, entusiastas de las decapitaciones y operadores de coches bomba que realizan la mayor parte de los combates– no fueron invitados. Después de todo, el Frente al-Nusrah ha sido calificado de “organización terrorista” por Washington.
Y ahora veamos la reacción de un mandamás de la Hermandad Musulmana (HM), el contralor general Mohammed Farouk Tayfour, nacido en Hama; dijo que la decisión fue “demasiado apresurada”. Y veamos la reacción del nuevo dirigente de la oposición siria,
Ahmed Moaz al-Khatib, en una reunión de los “Amigos de Siria” en Marruecos: la decisión debe "reexaminarse”. Prácticamente todos los grupos “rebeldes” declararon públicamente su eterno amor a los duros de al-Nusrah.
Por lo tanto, con fanáticos de al-Nusrah disimulando probablemente sus barbas de corrección islámica bajo una prosaica capucha, podemos esperar muchos progresos “rebeldes” contra Damasco, a pesar de dos grandes palizas (en julio pasado y en este mes), por cortesía de las contraofensivas del gobierno sirio. Después de todo, el espléndido entrenamiento por parte de las Fuerzas Especiales estadounidenses, británicas y jordanas tiene que producir algunos resultados, por no mencionar los cargamentos de armas extra letales suministradas por esos parangones de la democracia del Golfo Pérsico. A propósito, el Frente al-Nusrah controla sectores de Alepo devastada.
Reglas de odio sectario
Ahora tenemos la orwelliana, novísima Coalición Nacional de Fuerzas Revolucionarias y de Oposición Sirias, una coproducción de Washington y Doha. El nuevo jefe es el mismo (pésimo) jefe que fue del Consejo Nacional Sirio (CNS). Es solo retórica; lo único que importa a la “Coalición Nacional” es conseguir más armas letales. Y adoran a al-Nusrah, incluso si Washington no lo hace.
Catar descargó toneladas de armas “como golosinas” (según un traficante de armas estadounidense) en Libia “liberada”. El Pentágono y el Departamento de Estado solo se dieron cuenta después del revés de Bengasi de que armar a los rebeldes sirios puede ser el camino hacia más reveses. Traducción: Catar seguirá descargando toneladas de armas en Siria. EE.UU. seguirá “dirigiendo desde atrás”.
Se pueden esperar más horribles masacres sectarias como la de Aqrab. Ésta es la versión mejor documentada de lo que puede haber sucedido en realidad. Prueba una vez más que lo que los rebeldes de OTAN/CCG están ganando es en realidad la guerra en YouTube. Por lo tanto hay que contar con más olas masivas, interminables, de sesgo y propaganda en las que los medios corporativos occidentales vitorean a los “combatientes por la libertad” sirios, superando con mucho a la yihad de los años ochenta en Afganistán.
Esperad más distorsiones del contexto, como cuando el ministro adjunto de Exteriores ruso Mikhail Bogdanov dijo: “Los combates serán más intensos y [Siria] perderá decenas de miles, tal vez cientos de miles de civiles… Si un precio semejante os parece aceptable para derrocar al presidente, ¿qué podemos hacer? Nosotros, por cierto, lo consideramos absolutamente inaceptable”.
Ergo, trata de hacer todo por impedir que esto suceda. Y si los “rebeldes” de OTAN/CCG realizan sus amenazas de atacar las embajadas rusa y ucraniana en Damasco, más vale que se corten las barbas y corran a ponerse a cubierto frente a las inflexibles Spetsnatz, las Fuerzas Especiales rusas.
Habrá más odio sectario, como en Sunni Sheikh y el teólogo estrella de al-Jazeera, Yusuf al-Qaradawi, emitiendo de paso una fatua legitimando la matanza de millones de sirios, sean militares o civiles, mientras sean alauíes o chiíes.
El odio sectario dominará, con Catar a la cabeza, seguido por saudíes con grandes monederos y una variedad de islamistas de la línea dura. Agenda: guerra contra chiíes, contra alauíes, contra seculares, incluso contra moderados, no solo en Siria sino en todo Medio Oriente.
Un enfrentamiento de Patriots contra Iskanders
La nueva estrategia del Ejército Sirio se resume en una gran retirada de los lugares apartados y bases en el campo, concentrando sus tropas en ciudades y pueblos.
Se puede esperar que la estrategia general del club OTAN/CCG siga siendo más o menos la misma: Atascar al ejército sirio en tantas áreas como sea posible; desmoralizarlo; y seguir preparando el terreno para una posible intervención de la OTAN (la histeria sobre las armas químicas y las inexorables quejas sobre una “catástrofe humanitaria” que forma parte del amplio paquete de operaciones de guerra psicológica).
El ejército sirio podrá tener las armas pesadas; pero cuando se enfrenta a un tsunami de mercenarios y salafistas-yihadistas totalmente entrenados y armados por el club OTAN/CCG, todo el asunto puede tardar años, al estilo de la guerra civil de Líbano. Eso nos lleva a la siguiente “mejor” opción, que en realidad es un resultado: la muerte del Estado sirio mediante mil, o más bien un millón, de cortes.
Lo que es seguro es que la “coalición de los dispuestos” contra Siria no tendrá problemas para desintegrarse una vez que el juego final haya concluido. Washington apuesta a un régimen post-Asad dirigido por la HM. No es ninguna sorpresa que el Rey Playstation de Jordania esté enloqueciendo; sabe que la HM también se apoderará de Jordania y que lo expulsará para que vaya permanentemente de compras a la gran tienda londinense Harrods.
Esos parangones de la democracia –las medievales petromonarquías en el Golfo Pérsico– también están enloqueciendo; temen el atractivo popular de la HM como a una plaga. El Kurdistán Sirio –que ahora va definitivamente en camino a la autonomía total y finalmente a la libertad– ya enloquece a Ankara. Para no mencionar la perspectiva futura de un tsunami de salafistas-yihadistas desocupados festivamente refugiados en la frontera siria-turca y listos para causar estragos.
Y luego está la compleja relación entre Turquía e Irán. Teherán ya ha dado una advertencia muy clara a Ankara respecto al sistema de defensa de misiles de la OTAN que está a punto de instalarse.
Tiene que ser la obra maestra en neolengua de finales de 2012. El portavoz del Pentágono, George Little, ha insistido en que “EE.UU. ha estado apoyando a Turquía en sus esfuerzos por defenderse… [contra Siria].”
De ahí el envío de 400 soldados estadounidenses a Turquía para operar dos baterías de misiles Patriot, a fin de “defender” Turquía contra “potenciales amenazas provenientes de Siria”.
Traducción: Esto no tiene nada que ver con Turquía, todo se refiere a los militares rusos en Siria. Moscú ha entregado a Damasco no solo muy efectivos misiles Iskander tierra-tierra hipersónicos (virtualmente inmunes contra sistemas de defensa de misiles) sino el sistema de defensa tierra-aire Pechora 2M de múltiples objetivos, una pesadilla para el Pentágono si se llega a imponer una zona de exclusión aérea sobre Siria.
Bienvenidos al enfrentamiento Patriot contra Iskander. Y directamente en la línea de fuego encontramos al primer ministro turco Recep Tayyip Erdogan –un sobredimensionado ególatra que alberga un profundo complejo de inferioridad en relación con los europeos– que se quedó al margen según el plan general de la OTAN.
El talón de Aquiles de Turquía (fue de los kurdos) es su autopromovido papel de encrucijada energética entre Oriente y Occidente. El problema es que Turquía depende de suministros de energía de Irán y Rusia; neciamente enfrenta a ambos, al mismo tiempo, con su confusa política siria.
Todo lo que oigo es de mal agüero
¿Cómo solucionar esta tragedia? Nadie parece escuchar al vicepresidente sirio Farouk Al-Sharaa. En esta entrevista al periódico libanés Al-Akhbar, subraya “la amenaza de la actual campaña para destruir Siria, su historia, civilización, y su pueblo… Cada día que pasa, la solución se aleja más, militar y políticamente. Tenemos que estar en condiciones de defender la existencia de Siria”.
No tiene “una respuesta clara de cuál puede ser la solución”. Pero tiene una hoja de ruta. Cualquier solución comienza por conversaciones o acuerdos entre capitales árabes, regionales o extranjeras; no puede existir sin un sólido fundamento sirio. La solución tiene que ser siria, pero mediante un arreglo final histórico, que incluiría a los principales países regionales, y a los miembros del Consejo de Seguridad. Esta solución tiene que incluir la detención de todo tipo de violencia y la creación de un gobierno de unidad nacional con amplios poderes. Esto debería ir acompañado de la resolución de expedientes difíciles relacionados con las vidas de la gente y sus legítimas demandas.
No es lo que quiere el club OTAN/CCG, incluso si EE.UU., Gran Bretaña, Francia, Turquía, Catar y Arabia Saudí están involucrados en sus propias agendas divergentes. Lo que ya ha logrado la guerra OTAN/CCG es un objetivo muy similar, a propósito, al de Irak en 2003; ha desgarrado completamente el frágil tejido social de Siria.
Estamos ante el capitalismo de desastre en acción, fase I; el terreno ya está preparado para una lucrativa “reconstrucción” de Siria, una vez que se instale un gobierno dócil, favorable al turbo-capitalismo pro occidental.
Pero en paralelo, las consecuencias negativas también tienen lugar en sus modos misteriosos: millones de sirios que inicialmente apoyaron un movimiento pro democracia –desde las clases empresariales de Damasco a los comerciantes de Alepo– ahora han aumentado la base de apoyo al gobierno como contragolpe contra la horripilante limpieza étnica-religiosa promovida por los “rebeldes” del tipo de al-Nusrah.
Sin embargo, con la OTAN/CCG a un lado e Irán-Rusia al otro, los sirios comunes y corrientes atrapados en el fuego cruzado no tienen adónde ir. OTAN/CCG no conoce límites para labrar –en sangre– cualquier entidad dudosa, desde un emirato pro EE.UU. a una “democracia” pro EE.UU. dirigida por la HM. No es difícil ver por quién doblan las campanas en Siria; no doblan por ti, como en John Donne, sino por mal agüero, muerte y destrucción.
Pepe Escobar es autor de Globalistan: How the Globalized World is Dissolving into Liquid War (Nimble Books, 2007) y de Red Zone Blues: a snapshot of Baghdad during the surge. Su libro más reciente es Obama does Globalistan (Nimble Books, 2009). Contacto: pepeasia@yahoo.com