Cuando el comandante supremo de la revolución socialista venezolana bolivariana del siglo XXI afirmó “¡¡¡ah muchacho p´a bobo, yo no debato con la nada”, negándose a darle promoción electoral en un debate a semejante pitiyanqui antinacional, no estaba equivocado Chávez, no lo estaba pues analizó a semejante bazofia polìtiquera con antecedentes execrables. Si algo faltaba para darle la razón al Comandante Supremo fue lo ocurrido el 19 de Julio 2013 en Chile, donde el biderrotado candidato de la ultra derecha fascista internacional, venezolano de nacimiento pero gringo hala mecate de corazón, “Hail Hitler” de saludo, actuación y conducta, fue recibido en Santiago capital de la nación austral por representantes de la dictadura de Augusto Pinochet, régimen asesino neoliberal repudiado en el mundo entero desde 1973 hasta entrados los ochenta, que infortunadamente tiene una minoría de defensores aún engañados. Caprinochet integra las filas del fascismo mussoliniano capitalista salvaje latinoamericanizado, grupo viudo de la dictatura pinochetista de ultra derecha, oprobioso régimen multihomicida. Es urgente explicar detalladamente en la medida de lo posible, el proyecto de metida de extremidades inferiores…, presentado ante el CNE por Enrique Caprinochet Rarosky para gobernar a Venezuela, es decir, hacer saber, dar a conocer las intenciones de esta despreciable férula de dirigentes derechistas encumbrados mediante la canalla promocional mediática, conocidos entreguistas enajenados mentales. Si engatusándonos logran convencer la población votante utilizando cierta prensa, volveríamos a colocar frente a los destinos de Venezuela -país número uno del mundo en reservas de petróleo-, a la corriente que representa un desvergonzado aspirante a regresarnos a las administraciones demócrata representativas mercantilistas. No volverán al poder en Venezuela los defensores de ideas disfrazadas de democracia dizque “representativa”, porque somos mayoritariamente bolivarianos, socialistas y chavistas Siglo XXI, bajo la imagen siempre presente del legado de Hugo Rafael Chávez Frías y sus hijos ideológicos, futuros Presidentes o Presidentas, Gobernadores o Gobernadoras, Diputados, Concejales y Alcaldes o Alcaldesas, desde Nicolás Maduro en adelante.
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