El próximo día 26 de este frío mes de diciembre (2013) se celebrarán los 120 años del natalicio de Mao Zedong. ¿Cómo lo celebrará el Partido Comunista Chino (PCCh),? Lo conoceremos ¿Cómo lo celebrará la sociedad china? Lo sabremos pero ojalá y podamos conocer cómo lo celebrarán los campesinos y cómo lo harán los citadinos. El cómo lo recordará el resto de las naciones, probablemente, irán desde la crítica más exacerbada hasta los comentarios más “polite” dependiendo del comercio bilateral entre naciones referidas aunque les parezca cínica nuestras apreciaciones pero “…lloverá y veremos…”
Mao Zedong, hunanés, esa provincia mediterránea del centro de China y al sur del río Yangtzé, hijo de un terrateniente menor, escribió sus primeros textos políticos a los 18 años de edad trasladándose, posteriormente, a Beijing para continuar sus estudios en la Universidad de Beijing donde conoció y trabajó como ayudante del encargado de la biblioteca de dicha universidad, Chen Duxiu, quien, años posteriores, fuera designado como el primer Secretario General del PCCh durante y por acuerdo en el 1r. Congreso fundacional de dicho partido supuestamente obrero-campesino.
Mao Zedong asistió a dicho congreso fundacional como representante de su provincia natal, Hunan, siendo uno de los catorce asistentes a dicho e importante evento para la Historia Contemporánea de China y sus influencias y consecuencias en los aledaños países de ese importante país asiático. Para poder acercarse al pensamiento de Mao Zedong debemos conocer algunos detalles de su personalidad. En ese orden, nos permitimos trasladar a sus conoceres, señores lectores y damas lectoras, parte de una conversa sostenida por quien osa escribir estas líneas con el historiador oficial de la Historia del PCCh de la oficina correspondiente del Comité Central del PCCh; conversa celebrada en Beijing en algún verano. El señor Li Xin nos informó que en una conversación que sostuviera Mao Zedong con algunos personajes del PCCh a la pregunta sobre cuándo, con cierto grado de precisión, fuera celebrado el 1r. Congreso, en referencia, la respuesta del Gran Timonel fue, además de interesante, curiosa porque en reconociendo que no se acordaba con exacta precisión datística sí recordaba que tenía que haberse celebrado durante el verano porque los estudiantes estaban de vacaciones y, además, el calor que siempre alumbra con energía a la ciudad de Shanghai se encontraba en su máxima expresión calórica; es decir, Mao consideró que se habría celebrado durante el mes de julio. En conociendo tal descripción aquel grupo de dirigentes del PCCh decidieron imponer como fecha de la fundación del PCCh, el 1º de julio. Este suceso se celebraría en las montañas de la provincia de Shanxi.
En una otra conversa pero esta vez con uno de los líderes del partido nacionalista, Guomindang, de aquellos viejos y adustos líderes nacionalistas chinos, quien había participado en el plantel de profesores de la Academia militar de Whampoa, nos comunicó que Mao Zedong había ejercido como “enseñador” de la situación del campesinado chino (año 1924) en dos (2) diferentes oportunidades renunciando en desacuerdo con el “suave” perfil ideológico que se le estaba impartiendo a los nóveles y futuros oficiales del ejército nacionalista chino con la asesoría expresa de militares ruso-bolcheviques. El Mao polémico.
Nos podríamos discutir en profundidad y nos permitimos considerar que hay dos (2) personalidades políticas de Mao Zedong. En primer lugar, tendríamos al Mao guerrillero y, seguidamente, nos tendríamos que encontrar obligatoriamente con el Mao presidente. Dos (2) personalidad diferentes y controvertidas.
En líneas generales, la historia occidental capitalista siempre ha conversado con sus lectores sobre el Mao presidente pero, rara vez, con el Mao guerrillero. Es decir, por la lógica ideológica capitalista, era más conveniente además de muy prudente referirse al Mao presidente y a los errores por encima de los aciertos del proceso de “cambios profundos” que se fueron desarrollando durante el periodo cuando Mao Zedong ejerció las responsabilidades como el “Gran Timonel”. Por ejemplo, la literatura occidental ha resaltado los fracasos del “Gran Salto Adelante”, la “Revolución Cultural” y la política de “Cien flores” pero sin adentrarse a definir y desglosar aquellas realidades y las objetivas responsabilidades que hubiera podido tener el Mao presidente. Ello nos lleva a inquirirnos: ¿realmente Mao Zedong ejerció la Presidencia como un Presidente y/o como el líder permanente de la Revolución China?
Regresemos al Mao guerrillero. La primera manifestación de inquietud política, como lo expusimos más arriba, fueron sus tres (3) escritos sobre la composición del Gobierno de la provincia de Hunan sustentando su tesis en el modelo republicano estadounidense para aquellos momentos históricos de 1918. Posterior a su paso por la Academia militar de Whampoa, el fracaso de la “Comuna de Cantón” (14 de diciembre, 1927), Mao se retira hacia el centro de China, a su provincia natal, Hunan, y escribe un análisis sociológico de la sociedad china para así poder fundamentar su tesis referida a los diferentes componente sociales en sus diferentes participaciones y responsabilidades en el proceso del desarrollo de la Revolución china. Participa y promueve los levantamientos campesinos en las épocas de cosecha del sur de China (1927) resultando todos ellos en fracaso lo que lo obligó a redefinir su estrategia militar sustentándola en el “Levantamiento de los Taiping” (siglo XIX) llevándolo a realizar la “Gran Marcha” siendo acompañado, en diferentes etapas de la trayectoria, por UN millón de campesinos hasta alcanzar las montañas de la provincia de Shanxi donde sentó su base guerrillera.
Durante los periodos de la década de los años 30 y 40 hasta la derrota de la invasión japonesa durante la 2da. Guerra Mundial en el Pacífico (1945), su contradicción y su enemigo fundamental y principal fue su contrafigura en la persona del general Chiang Kaishek quien fungía como líder del partido nacionalista, Guomindang, y Presidente de la República de China en la ciudad de Nanjing. Los sentimientos de odio que ambos personajes desarrollaron no fue obstáculo para alcanzar acuerdos inter-partidistas para enfrentar al invasor japonés (1937-1945) a pesar de las continuas desavenencias y enfrentamientos militares entre ambos grupos partidista-militares. Era el escenario del enfrentamiento entre el Mao guerrillero y profundo estudioso de la Historia de China y el militar chino adoctrinado en la escuela militar del Japón con conocimientos en el proceso ruso-bolchevique durante sus meses de estancia en Moscú; es decir, era el enfrentamiento entre el líder comunista y el líder anti-comunista.
El Mao guerrillero transformado en estratega demuestró sus conocimientos y capacidades militares durante el desarrollo de la “Guerra Civil” (1947-1949) cuando logra desarrollar su tesis militar de “las fortalezas y debilidades” ante el enemigo que, en este periodo concreto, eran los ejércitos de la República de China adoctrinado por la ideología imperante en el partido nacionalista, Guomindang, adobada por toda la ideología maccartista estadounidense de la guerra. En un proceso de ocupación paulatina de los espacios geográficos, en un proceso de no permitir la corrupción entre los miembros de sus ejércitos, en un proceso de repartición de las tierras a los campesinos, en un proceso de profundo adoctrinamiento nacionalista-chino, Mao Zedong va permitiendo que sus diferentes ejércitos vayan avanzando sobre los estratégicos lugares tanto militares como poblacionales. Cabe destacar el avance de Lin Biao y Deng Xiaoping, éste como comisario político sobre la provincia de Shandong como, también, debemos rescatar el avance militar del denominado como el “General tuerto” sobre el río Amarillo y el río Yangtze.
Mao Zedong fue un líder guerrillero, un líder en estrategia militar, una figura que se imponía en las discusiones, un profundo conocedor de la Historia de China y un hombre implacable en sus decisiones en el marco tanto del PCCh como del desarrollo de la revolución hacia la toma del poder. Ese Mao histórico es el Mao Zedong cuasi desconocido por las sociedades occidentales. Pero el Mao presidente es otro Mao. En ese contexto, nos, nos hemos permitido pensar que, realmente, a Mao Zedong le molestaba el ejercicio de la Presidencia como tal; lo único que le importaba e interesaba era que cada decisión del Ejecutivo estuviera en “permanente revolución”; es decir, en nuestro modesto criterio, el Mao presidente fue un Mao impaciente cual es una realidad poco conveniente en el marco de un proceso revolucionario cuando ya esa revolución está ejerciendo las responsabilidades del Poder y el desarrollo de los obligantes y necesarios “cambios profundos” del Estado “semi-colonial” para este caso concreto de la realidad que se vivía en la China de la primera mitad del siglo XX.
Deng Xiaoping, quien no tenía “pepitas en la lengua” para exponer sus ideas en plena libertad, calificó el desempeño de Mao Zedong en “…un 70% bueno y un 30% equivocado…” cual ha sido traducido como “malo”. Pero lo que Deng no explicó, al menos nos desconocemos, dónde se deberían ubicar cada una de las mediciones propuestas porque, reiteramos, una cosa es el Mao guerrillero y una otra es el Mao presidente. Claro sí fuera por el tribunal de los opinadores de los DDHH al mejor estilo capitalista, evidentemente, Mao Zedong debería estar en esa zona oscura de la eternidad.