Sin duda, en esta trama conspirativa que hoy vivimos en nuestro país, a través del Sistema Bolivariano de Comunicación e Información, se ha tratado de mostrar el paralelismo de la Venezuela Bolivariana de 2015 con el Chile de Allende de 1973. Nos separan 42 años de historia y de distancia.
Nixon fue aquel que señaló, a propósito del triunfo de Allende en 1970, que debían “hacer aullar a la economía chilena”, y vaya que lo hicieron. A toda una campaña de “desabastecimiento programado”, de especulación, usura y boicot, unos medios de comunicación totalmente hostiles a la gestión socialista de Allende, fueron detonantes del golpe militar por parte de una Fuerza Armada elitista, clasista y sin arraigo popular.
No podemos dejar de mencionar, el paro del transporte que se dio también en Chile, sobre todo de aquel que se encargaba del traslado y distribución de los alimentos del pueblo chileno, de sus bienes y servicios.
La Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, en su artículo 50, establece lo siguiente: “Toda persona puede transitar libremente y por cualquier medio por el territorio nacional, cambiar de domicilio y residencia, ausentarse de la República y volver, trasladar sus bienes al país o sacarlos, sin más limitaciones que las establecidos en la ley. En caso de concesión de vías, la ley establecerá los supuestos en los que debe garantizarse el uso de una vía alterna. Los venezolanos y venezolanas pueden ingresar al país sin necesidad de autorización alguna.
Ningún acto del Poder Público podrá establecer la pena de extrañamiento del territorio nacional contra venezolanos y venezolanas” (Subrayado del articulista).
Pues bien, haciendo el paralelismo de la situación del transporte en la Chile de Allende, y citando el artículo de nuestra Constitución que consagra el libre tránsito en nuestro país, es que me permito señalar y alertar sobre la siguiente situación.
Pese a ser un servidor de nuestro pueblo residenciado en la ciudad de Caracas, suelo con frecuencia viajar a Ciudad Guayana, lugar muy querido por mí y en donde se encuentran amistades y familiares. En razón de economía, más no de preferencia, debo hacerlo vía terrestre, a los fines de cumplir con mi derecho humano a la recreación, y de compartir y hasta de “pelear” con los afectos más queridos por mí.
Utilizando el portal aporrea.org y otros que han tenido la deferencia de publicar mis modestos aportes, en algunas oportunidades me permití denunciar a la empresa de transporte Rodovías de Venezuela, por prestar un servicio tan malo para los precios tan altos que cobran. Una de esas denuncias, tuvo eco y respuesta en ese entonces por parte del camarada Eduardo Samán, quien en ese entonces fungía como Presidente de Indepabis, y la empresa fue sancionada.
Pero, lo insólito es que, esta empresa no solo reincidió en las prácticas y en el atropello contra los usuarios del mismo, a los que prácticamente hay que suplicarles para que lo atiendan a uno como si eso fuera una caridad y no un servicio el cual uno paga de su bolsillo. Este servicio desmejoro mucho, al punto que empezaron a eliminar unilateralmente horarios, y a dejar de viajar a ciertos y determinados sitios, como por ejemplo, y por supuestas remodelaciones a su terminal privado en Lecherías, dejaron de viajar a Puerto La Cruz.
También la venta de boletos la empezaron a restringir, tres meses antes de la realización de cualquier viaje que podías planificarte, tu podías comprar tranquilo. Luego esto cambio a la venta con una semana de anticipación a la planificación de tu viaje. Imagínense lo que ocurrió en diciembre, siendo temporada alta, como Rodovías de Venezuela por que la oferta no pudo satisfacer la ingente demanda que hay de viajes en esas fechas.
De igual manera, mi segunda opción en este tipo de situaciones es utilizar la empresa “Aeroexpresos Ejecutivo”, cuyo terminal privado se encuentra en Bello Campo, en el Municipio Chacao. Incluso, para los que tienen tarjeta de crédito, es muy cómodo comprar, ya que solo con presentarte con tu cédula y localizador en la taquilla de la empresa en sus taquillas en los terminales que ellos tienen por toda Venezuela, emiten tu boleto y viajas tranquilo, hasta con una comodidad superior a la de cualquier otra línea. Pero, por extrañas circunstancias que aún no han sido explicadas, suspendieron todos los viajes hasta nuevo aviso a Puerto Ordaz.
Pero, volviendo al tema de Rodovías, y ya para cerrarlo, con tantos cuentos y vicisitudes que tengo con dicha empresa, en estos días cuando voy a su terminal privado en Caracas, para proceder a comprar mi boleto rumbo a Puerto Ordaz. Además de constatar la soledad en la que se encontraba dicho terminal, sin unidades, baños cerrados y cajeros inservibles, me topé con la desagradable sorpresa, me dijo la vendedora que me atendió, que no estaban viajando a Puerto Ordaz porque “cerraron su terminal privado”, sin mayores explicaciones. Que tal???
Aunado a este estado de cosas, ni hablar de los “carritos” que en los terminales se prestan también para disminuir sus servicios y cobrar como les da la gana, y especular contra el pueblo. Por ejemplo, un carro que debe llevarte de Puerto Ordaz a Maturín, que son dos horas y media, no deja de cobrarte 600 Bs el pasaje. De Maturín a Puerto Ordaz ronda por el orden de los 400, 450 bolívares, ya que el Alcalde opositor de dicha entidad, Warner Jiménez no permitió el alza de esos pasajes, pero, ¿Que sucede?, que las personas que hacen este tipo de transporte no viajan, reducen su oferta y servicios, se hacen unas colas terribles, como medio de presión y chantaje: “Si no me das lo que te pido, colapso y boicoteo este servicio”. Además de hacer irritar al pueblo que necesita hacer este tipo de traslados.
Conversando con algunos compañeros, me señalaban que en diciembre hubo una merma en la afluencia de viajeros, tanto a nivel terrestre como aéreo por esta especie de boicot de estas empresas, mas que todo las del transporte extraurbano como las antes mencionadas. De igual forma, por lo menos en lo que a Ciudad Guayana se refiere, no sé si en otras ciudades de mi país se da este fenómeno, que siempre ha tenido un transporte intraurbano muy deficiente, se complica cuando después de las 5 de la tarde, no consigues ni tan siquiera taxi para trasladarte hasta tu casa, y las calles parecen pueblos fantasmas como en el lejano oeste. Hay que tener a juro carro propio para poderte trasladar.
Pero no conforme con todo esto, luego me entero, y esta es una información extraoficial, que ninguna línea de autobuses esta viajando para Puerto Ordaz, en el mejor de los casos, los autobuses están llegando hasta Ciudad Bolívar, que esta a una hora de dicha ciudad. Los únicos buses que llegan hasta allá son por cuenta propia o los denominados “piratas”. ¿Y entonces? ¿Que está pasando Dios Mío?
¿Será que esta derecha busca que el pueblo humilde, el chavista de a pie, el pela bola que no puede pagar un pasaje en avión se caliente y se le voltee a esta Revolución? ¿Piensan que se pueden ganarse este pueblo así? ¿Creen que haciendo pasar trabajo al pobre, al humilde acabarán con esta Revolución? ¿Creen que negándoles el libre tránsito incendiarán las calles de Venezuela?
A esta derecha le duele que en la clase social más humilde, a los más pobres están los agradecidos sociales que amaron y aman a Hugo Chávez, y no negamos que entre ellos hay muchos que están descontentos, pero de ahí a que ellos se vayan a apoyar a la derecha, hay una diferencia y un trecho muy largo.
Nicolás Maduro, nuestro Presidente Obrero y chavista, le hago respetuosamente este llamado de alerta, puesto que sé que usted se caracterizo por ser lo que en el Metro llaman un “Operador de Transporte Superficial”, es decir, chofer de Metrobus, y sé que sabrá comprender esta petición que no es mía solamente, sino de millones de usuarias y usuarios que usamos transporte terrestre urbano y extraurbano. Sugiero que le meta la lupa al sector transporte, ya que es evidente que ellos también, al igual que en la Chile de Allende, están metidos en el complot en su contra.
Pero solo que en esta oportunidad hay drásticas diferencias. La Venezuela Bolivariana y chavista de 2015, no es la Chile de 1973, país rodeado de gobiernos de corte de derecha y la Cuba revolucionaria no estaba en ese momento en condiciones para apoyar a Allende; la geopolítica internacional y los bloques de poder mundial han cambiado tremendamente. Venezuela no está sola en este continente y en el mundo; nuestra Fuerza Armada Nacional Bolivariana no es más que el pueblo armas, su concepción es totalmente distinta a la de hace cuarenta años. Por eso,aunque nunca podemos decir que sea imposible que intenten derrocar a este Gobierno y a esta Revolución, pero si la van a tener muy cuesta arriba.
Sin embargo, nuestro Gobierno debe atender este problema, de este bloqueo y limitación a nuestro derecho al libre tránsito no declarado pero si aplicado, porque la revolución no debe estar reñida de la calidad y la eficiencia. Nuestro Gobierno debe resolver este problema, y garantizar la mayor suma de felicidad, estabilidad política y seguridad social a nuestro pueblo y golpear duramente al delito y a la trampa que pretende hacer daño y hacer sufrir a nuestro pueblo.
¡Bolívar y Chávez Viven, y sus luchas y la Patria que nos legaron siguen!
¡Hasta la Victoria Siempre!
¡Independencia y Patria Socialista!
¡Viviremos y Venceremos!