I
Los extremos
Los extremos de un lado y otro me van a criticar, pero eso es lo que menos me importa. He aprendido que cuando uno emite una opinión sesgada o no, recibe lo suyo. Esa es la vida. Nunca podremos complacer a todos por igual. Mis años de lucha, y, posteriormente, mis años en prisión, me sirvieron para comprender al hombre y su naturaleza. A estas alturas nada me sorprende. En ese sentido, debo continuar en mi línea recta. Zigzagueante algunas veces, pero sin perder la línea. Eso es lo que me importa como revolucionario. Aproveché los días santos para continuar escribiendo mi libro dedicado a mi nieta, así como algunas cosas que parecen poemas, y, por otro lado escribiendo para Aporrea. Este portal sirve para todo. Les estoy muy agradecido a sus fundadores y actuales directores. En efecto, estuve atento al desarrollo de la visita de Barack Obama a Cuba. Pues, unas relaciones trabajadas diplomáticamente por más de cincuenta años, ahora, en la administración Obama y de Raúl Castro, se concreta lo que tanto se ha buscado: establecer una relaciones de tú a tú. A todos los niveles, cuyos resultados finales tienen que desembocar en la suspensión del bárbaro bloqueo de Estados Unidos hacia Cuba, y la entrega a este país, la zona de Guantánamo.
II
Los entretelones
Mucha gente creerá que este acercamiento entre Cuba y Estados Unidos, fue a causa de la claudicación de los cubanos, o a un buen gesto del Obama. Ni lo uno ni lo otro. Esos resultados son el producto de muchas décadas de conversaciones secretas. En efecto, el escrito Peter Kornbluh, acaba de lanzar al mercado latinoamericano un libro titulado "Diplomacia encubierta con Cuba". Después de varios años de intensa investigación, el autor, nos entrega un libro que habla de las intrincadas, prolongadas y fructíferas conversaciones entre diplomáticos cubanos y estadounidenses desde la era de Kennedy hasta Obama. El libro recoge todo cuanto se pudo investigar, a puestas cerradas, sobre estas relaciones, rotas desde que los cubanos bajaron de Sierra Maestra y tomaron el poder, liderados por Fidel Castro. Un ejemplo: "Para resolver la crisis de los balseros, el 23 de agosto de 1994, Bill Clinton y Fidel Castro se acercaron a través de intermediarios de alto nivel. Con dos llamadas telefónicas, Clinton y Castro, iniciaron lo que se convertiría en uno de los capítulos más rebuscados de conversaciones secretas, en la historia del diálogo entre Washington y La Habana", eso dice el libro de referencia.
III
García Márquez, emisario
Narra el libro: (Habla el presidente de México, Carlos Salinas de Gortari): "Necesitaba una conexión con el gobierno cubano, alguien que fuera muy discreto y que tuviera acceso directo e inmediato con Fidel Castro", recordó Salinas. "De inmediato supe quien sería la persona adecuada. Llamé por teléfono a Gabriel García Márquez". En menos de treinta minutos, el ganador del Premio Nobel llegó a la residencia presidencial. Salinas le habló sobre la petición de Clinton. García Márquez, un gran amigo de Fidel, cogió el teléfono, y llamó a La Habana. Poco después Salinas estaba en línea con el líder cubano". Carlos Salinas de Gortari era el presidente de México, para ese entonces, y tenía acercamiento con Fidel. Así que en ese contacto fue necesario llamar a García Márquez, quien tenía su residencia en México. Una muestra de cómo la diplomacia utiliza todas las herramientas disponibles para poner en funcionamiento un diálogo de alto nivel, sin que las partes cedan un milímetro de sus creencias políticas o religiosas. Cada quien mantiene su posición, pero se abre el diálogo como único mecanismo para que los pueblos y sus gobierno se entiendan.
IV
La dignidad no se negocia
¿Por qué los Estados Unidos abrió el compás para restablecer relaciones diplomáticas ahora, comerciales, después? ¿Por qué esa apertura? Porque un día amaneció el señor Obama con ganas de ser bueno. ¡No, mil veces no! A él lo convencieron de que no podía el gobierno estadounidense seguir de espaldas de la historia, respecto a Cuba, ya que todos los métodos usados para acabar con la revolución cubana no habían funcionado, y mientras tanto Cuba se estaba creciendo en el ámbito internacional por su política inteligente, ante la torpeza de los Estados Unidos. Cuba siempre ha sido un pueblo con dignidad. Derrotó al ejército de Batista, en 1959, cuando los barbudos entraron a La Habana. Derrotaron a los gringos en la invasión de Playa Girón. Y defendió a su líder de múltiples atentados promovidos poa la CIA. Eso no lo digo yo. Eso lo dicen los archivos del Pentágono, y los del Departamento de Estado de Estados Unidos. Pero la prueba mayor de este pueblo glorioso, fue el de haber resistido más de 50 años un bloqueo criminal por parte de los gobiernos estadounidenses. Que nadie se equivoque con los cubanos. El pueblo está férreamente cohesionado con sus líderes, y apoyan lo que ellos están haciendo, respecto a las relaciones con Estados Unidos. Fidel Castro, el máximo arquitecto de la revolución cubana, advirtió hace más de un año, cuando se inició la apertura que él no se confiaba de los gobiernos de Estados Unidos. Y como prueba no recibió a Barack Obama, quien se fue a Argentina dolido por no haber hablado con la verdadera historia viviente de Cuba.
Frase de Fidel: "Nacimos en un país libre que nos legaron nuestros padres, y primero se hundirá la isla en el mar ante que consistamos en ser esclavos de nadie".
¡Para dignidad, caballero! ¡Volveré!