No se cual de los dos es mejor, creo que los dos son peores que Barack Obama, como Barack Obama que se mostró mas humano resulto ser peor que George W. Bush, porque en fin no se trata de nombres, se trata de un sistema perverso en trance existencial.
Pero tu aplastante derrota Hillary no me da alegría pero al menos me da la satisfacción de no ver tu cínica sonrisa.
Esa perversa sonrisa que mostraste cuando tu ejército de mercenarios con toda la saña del mundo, asesinaban al coronel Muamar el Gadafi y tu frase de felicidad morbosa; "Venimos, vimos y él murió".
Esa perversa sonrisa que mostraste cuando tus adoradas armas convertían al país más rico y prospero de África como lo era Libia en un territorio devastado, con uno, dos y tres gobiernos, con cientos de miles de seres humanos desaparecidos y miles de desplazados.
Esa perversa sonrisa que mostraste cuando tus adoradas armas asesinaban madres y niños en Siria, y como si fuera poco mostraste tu predilección por la diplomacia de las armas y la muerte, al expresar; "si hubiéramos tardado menos en entrenado y equipar al grupo central del Ejército Libre de Siria… habría ayudado a poner en pie a una oposición política creíble"
Hoy Hillary, sentí satisfacción, al ver tu rostro fúnebre y sin esa atroz sonrisa decir; "es doloroso y va a seguir doliendo durante mucho tiempo".
Tal vez tu dolor es menos que el que sentimos nosotros, por Libia, Siria, Irak, porque el nuestro es amor, el tuyo es la codicia frustrada de no obtener el poder imperial, de no entrar en la historia como la primera mujer presidenta de EEUU, de dejar de ser noticia, de entrar en el proceso agónico del ciudadano Kane.
No me alegra, ¡¡pero que refrescante Hillary!! No ver hoy en los medios de comunicación tu victoriosa y perversa sonrisa.
ABREBRECHA Y DESPUES HABLAMOS
José Ovalles