"Está permitido,
en tiempo de gran peligro,
andar con el diablo
hasta haber atravesado el puente"
Proverbio húngaro
En Latinoamérica y de manera muy destacada en Venezuela, encontramos tantos refranes, dichos y proverbios, que utilizándolos sirven para retratar las costumbres y maneras de vivir de nuestros pueblos y muchas veces sirven para alertar a los que andan desorientados o negando de manera interesada la triste realidad de los Estados Unidos, en medios de las constantes amenazas, como si todo el tiempo le van a servir para mantener atemorizados a pueblos enteros, cuando tratan de quitarse el yugo manejado, desde el norte y más en estos momentos, cuando los candidatos a la presidencia son los mismos, sin ninguna señal de renovación y por lo tanto no inspiran ninguna confianza, como bien lo dice un refrán ¡loro viejo no aprende hablar! y menos, cuando lo poco que balbucean es para defender al gran capital y por eso podemos repetir sin temor a equivocarnos ¡Si, nos pela el chingo nos agarra el sin nariz! Ya que, Trump y Biden al final son, como reza el refrán ¡El mismo musiu con diferente cachimbo!
Los dos personajes son un peligro de proporciones alarmantes y más en estos momentos, cuando la situación en los Estados Unidos está, como reparto de botín entre bandas, con los implementos para realizar las fechorías encima de la mesa. Los problemas son tantos y en constante aumento, que si echamos una mirada a las estadísticas nos encontramos con cifras aterradoras empezando por la pobreza, corroborado por la inquietud de asiduos usuarios de las redes, el cual es un mal irreversible propio del capitalismo salvaje y en proyección en los países, donde aplican sus recetas monetaristas y por eso la dolarización, es una verdadera trampa para cazar bobos, ya que, al comienzo se convierte en una ilusión, el cual va desapareciendo a medida, que la economía del país escogido para aplicar el veneno se va amoldando a los intereses del gran capital, teniendo al dólar, como el gran impulsor para el saqueo. Ahora, es muy frecuente oír ¡como cuesta ganarse 100 dólares, pero que fácil es gastarlos!
La forma tan rastrera, como algunos dirigentes de la oposición se prestan de manera morbosa para defender los intereses de los Estados Unidos es imperdonable. En tiempos de definiciones el entreguismo y servilismo no puede pasar por debajo de la mesa, así, como las ratas dispuestas a devorarse todo a su paso y después a esconderse para hacerse presente, como maquillados para entrar nuevamente en escena. De ahí surge la siguiente interrogante ¿Quién es más peligroso Trump, Biden o la propia inhabilitada María Corina Machado, después haberse desinflado el porfiado, terco, pero destacado pitiyanqui saqueador: Guaidó? En política no existen las casualidades y menos, cuando sabemos de antemano de lo que es capaz el gran enemigo de los pueblos, el imperialismo, con o sin careta.
La gran estrategia del momento, nadie se la imaginaba, cuando los últimos gobiernos de los Estados Unidos, han largado bien lejos la careta para cometer sus trastadas. Se destaparon definitivamente, van por la calle del medio y esto es producto de estudios con resultados muy claros para aplicar de inmediato, no hay tiempo para esconder nada, porque la situación apremia y los problemas se les han desbordados, como impulsados por un tsunami salido de las mismas entrañas del capitalismo y tienen que recurrir a la misma trampa y saqueo, pero con métodos diferentes. El tal "sueño americano" se ha desmoronado y los que se atrevieron a jugarse la vida en interminables travesías muchos de ellos se encuentran viendo el espejismo, con el cual fueron engañados. Ahora, empiezan hablar de las ayudas humanitarias, pero también han encendido las sirenas para avisarles del retorno tan limpios y empobrecidos como llegaron, para no hablar de darlos, como si fueran pacientes recuperados.
El peligro siempre está latente y no puede ser de otra manera, cuando es el propio imperialismo el que se encuentra en una profunda crisis, pero ni aun así, podemos repetir la expresión de Mao Tse-Tung, cuando en medio de la euforia se atrevió expresar de viva voz ¡El imperialismo es un tigre de papel! Esto dio motivos suficientes para que Nikita Jrushchov, dirigente de la desintegrada Unión Soviética, le respondiera ¡el tigre de papel tiene dientes nucleares! Esto parece repetirse, guardando el tiempo, ya que, los candidatos a la presidencia de USA, están muy deteriorados y pasados del almanaque y pueden ser inhabilitados, sin en verdad funcionara la ley: uno por la edad y los escándalos a su alrededor y el otro porque el reloj del cerebro anda con la energía un poco desgastada produciéndole intermitentes olvidos, chispazos muy peligrosos, ya que, maneja las claves de las defensas de los Estados Unidos y hay pruebas de la destrucción, cuando han utilizados sus bombas atómicas. Por eso la diplomacia de Nicolás Maduro, adquiere un valor incalculable, así aparezcan los críticos encendidos, queriendo apagar la realidad con el odio desbordado.