Hay un feo asunto en la vida política dominicana que es generado por la irrupción del negocio de la droga en lo público, según se desprende de las informaciones de los medios de comunicación. Veamos el asunto.
El fiscal del Distrito Nacional, Alejandro Moscoso Segarra, expresó el jueves 5 de este mes, que dará curso al expediente que relaciona al diputado del Partido Revolucionario Dominicano, Julio Romero, con ¨dos hombres señalados como jefes del microtráfico. Son ellos, Manuel Emilio Mesa Beltré, alias El Gringo y Rafael Cordero Martínez, El Chino¨, según informa el diario Hoy (www.hoy.com.do).
Por cierto, El Chino se presentó a la Fiscalía a fin de responder por la acusación que se le hace y dijo que nada tenía que ver con El Gringo, apresado con 4.3 millones de pesos dominicanos y 900 euros. Y en su visita a la Fiscalía, El Chino prendió el ventilador y dijo que un grupo de policías intenta eliminarlo y otros cuatro fueron dados de baja por intentar extorsionarlo con 10 mil dólares para dejarlo en libertad, en un caso ocurrido hace meses. El hombre siguió esparciendo cosas y refirió que un capitán, de apellido Manzueta, quiere desaparecerlo.
En todo este interín de cosas que vienen ocurriendo, la Comisión Política del Partido Revolucionario Dominicano, PRD, conocerá un informe legal de esa organización política que habla de los casos en los que se ha involucrado el diputado Julio Romero.
Una información firmada por Tania Hidalgo y Rosa Alcántara en el diario Hoy, escriben que el citado legislador ¨habría participado en un encuentro en 2007 con El Gringo, apresado por lavado de dinero y narcotráfico¨. Por otro lado, parlamentarios de diversos partidos, entienden que su colega debe ¨despojarse de su inmunidad parlamentaria y someterse a una investigación seria a fin de aclarar la situación¨. Pero eso no es todo, sino que sus colegas en el Congreso consideran que Romero debe retirar su precandidatura con miras a las elecciones de 2100.
Mientras, en otro rollo, también feo, el juez Franny González es cuestionado –según información que escribe Llennis Jiménez, del mismo diario- por variar¨la prisión preventiva por libertad bajo fianza a un presunto traficante, apresado con 50 kilos de cocaína, en la avenida Rómulo Betancourt de Santo Domingo. Y el juez, sin entrar en detalles, dice que hay diferencias entre el apresamiento del sujeto, que habría ocurrido a las 7 y 40pm y es a la 7 y 55pm cuando se hace el registro de persona. Lo que pasó en 15 minutos no se dice y además, que el registro del vehículo del presunto traficante habría ocurrido a las 8pm en un lugar lejos del hecho. La nota periodística la cierra Llennis Jiménez al indicar que ¨Lo raro del caso es que los errores de las actas se dieron actuando un único fiscal, Jonathan Barón, y con un solo equipo de agentes del organismo antidrogas.
El problema de las drogas está afectando las cosas en la sociedad dominicana, al punto que se habla de ello en casi todos los programas de televisión. Lo último que se conoció fue la captura de 935 kilos de cocaína, por parte de la Dirección Nacional de Control de Drogas, en el Puerto Multimodal Caucedo, Boca Chica, en un contenedor que habría salido presuntamente de Venezuela rumbo a España. Así están las cosas por estos lados con el imperio de las drogas.
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