En cualquier país del mundo –capitalista, socialista o lo que sea- no solamente donde se respete la condición humana y la no violación constante a los principios democráticos y además que se marchiten, los derechos humanos a toda hora del día y de la noche, a que cada persona tiene derecho, cualquiera sea su condición social, ese canal no existiría o, por los menos sería cerrado constantemente por el atropello y los abusos a que nos tiene acostumbrado con toda la soterrada perversión de que acá no se respeta el derecho de informar a como ellos les dé la gana de hacerlo –que así es siempre- y con la “vaya” del día a día con que afirman que, no van a declinar ni bajar la guardia en seguir adelante en contra del Gobierno Nacional, por no decir, en particular del presidente Chávez por su abusivo secuestro de los demás poderes según su lema de distracción a que nos han sometido por su pantalla chica como desacato de costumbres, normas, principios, leyes y en general a la Constitución Nacional que la interpretan a lo Germán Escarrá que les da por tirársela sin ningún parecer de convivencia ni de consideración por el respeto de sus televidentes.
Es costumbre decir que, el que no la hace no la teme, pero esa gente no. Ellos son el Centro del Universo y como tal tienen el derecho de pasarse por el forro de las estrellas, cualquier situación que quieran degenerar para mantener atraídos a los escuálidos de su susurro contagioso y predisponernos ante el mundo por la desidia institucional de irresponsables y buscando atraer odio y prejuicios que en nada nos resalta a la vista de la Comunidad Mundial y el canal en particular, queda con una imagen que está muy lejos de ser la que es, pero, así ellos la entienden y es motivo por el cual están las veinticuatros horas del día bombardeándonos dentro de sus diferentes programas con un triquitraque de angustias que reflejan en las imágenes preparadas mediante técnicas nadas fortuitas de comunicación que, destrocen sin piedad al poder nacional que haya que minimizar dentro de la armonía ciudadana.
Los dueños del canal Globovisión como son Guillermo Zuloaga, Nelson Mezerhane y Alberto Federico Ravell, son personas de dudosa reputación –deshonestos hasta más no decir- dentro de la ética de responsabilidad y evolución humana que debe acompañar a los principios morales de cada individuo de acuerdo a las leyes y a las normas de convivencia dentro de la sociedad venezolana, pero que va: cada uno de ellos tiene una negra historia que no sirve de ejemplo a mortal alguno que se quiera y se respete a no ser de comprometidos sujetos dentro y fuera del país que avalan con su apoyo irrestricto a esos fulanos y a su canal, creyendo que van agotar con ello la paz y la alegría de la mayoría de los venezolanos que no comparten esos ideales y que sensatamente los tienen sentados en el banquillos de los acusados con tanta rabia que no habrá consideración de ninguna clase al oprobio que nos infringen al querer desprestigiar a la revolución venezolana y a los doce años de democracia participativa en que el poder reside en el pueblo y, no en la burguesía apátrida como ellos se habían malacostumbrado en la IV-R de Teodoro.
Ya el pueblo hace rato que dejó de ser pendejo, de no darse cuenta quién lo respeta y quién no actúa bien, quién engaña y cuáles son sus métodos permanentes de incitación a lo absurdo a la complicidad y de tatuaje distraccionista de maldad que nos clavan traicioneramente cuando resaltan lo malo como fracaso y esconden lo bueno, lo que les da un crucifijo de bendiciones al pueblo que tiene actualmente un Presidente y un Gobierno que se preocupa por tratar de solucionar sus problemas inmediatos y a largo plazo que no entrega el territorio a otros estados para que vengan a traficar con nuestra voluntad de ser libres y a llevarse lo que no le pertenece sin pagar su costo, ni destrozar nuestro ambiente ni a codificar nuestras ideas ni nuestras angustias.
De Conatel han dicho y dirán lo que quieran, pero, tienen que pagar máximo diez días, la multa que se les aplicó por pasarse de vivos y conjurar con el bullicio de las malas noticias a su antojo de planes, lejos de toda realidad y jugar con la suerte de reos y familiares del Rodeo I y II y manipular las informaciones con disparos de metralletas y, ruidos lejos del lugar y censurar delante del público televisivo las instituciones y jefes involucrados a resolver el caos que provocaron los presos y se dedicaron por días enteros a confrontar y desvalijar las iniciativas de alivio a la situación planteada y, por tal motivo después, de días de estudio y análisis frente al desarrollo anormal de la jugosa información dada por ese canal, se llegó a la irrefutable medida que les duele como pinchados por un clavo caliente como pichirres capitalista de cancelar la suma millonaria de las ganancias obtenidas en el 2010 sin cuantificar las actuales y, eso ha motivado que María Fernanda Flores, haya dicho todo el ensarte de disparates que en vez de tratar de actuar como una pecadora comprometida con sus atrocidades mediáticas de provocación, se derritió más en ofender y seguir en la misma dirección de atizar sus intrigas de ansias de poder y, como vicepresidenta de ese canal político se ofusca de tanta rabia concentrada al no poder tumbar el gobierno como son sus deseos tardíos que ella como representante de aquéllos y como una más de los cuatrocientos cincuenta personas que laboran en esa planta que, hacen posible que sus dueños arrumen grandes sumas de billetes en los bancos como ganancia que les dé un respiro de “libertad” como cobardes huidizos dos de ellos y, el otro peor, abrazado a un narcocanal de malas intenciones fuera del país y. entrevista del mataduras a Guillermo Zuloaga. Éste dejó caer una gota de la inteligencia de su propiedad al contestar que Venezuela no hay un medio que dé buena información e inmediatamente pensé en Globovisión –por qué sería- traición de subconsciente.
-¿Hasta cuándo Globovisión –amigo: Chávez?
