Los dueños de los medios del continente (SIP), pretenden evaluar la “libertad de prensa” en el hemisferio, reiterarando su enfrentamiento contra los gobiernos progresistas de Bolivia, Nicaragua, Cuba, Ecuador, Venezuela, y todos aquellos que estén en contra de los intereses imperiales; la SIP va a seguir con bastante interés, a cada país que sea una piedrita en el zapato para el imperio norteamericano. Siempre dirán cosas como esta “el Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela ha sido contrario a la libertad de expresión, de pensamiento, a la libertad de prensa, al derecho a la información”; echando esto por tierra ó mejor dicho contradiciéndose, a raíz que la SIP y sus pitiyankis se reunirán con plena libertad en Caracas desde este viernes en el Hotel Caracas Palace, lugar donde militares golpistas se albergaron en noviembre de 2002 hasta febrero de 2003, luego de revelarse contra el Gobierno constitucional del presidente Hugo Rafael Chávez Frías; es bueno aclararle al mundo que aquí en la República Bolivariana de Venezuela; en 8 años de gobierno del comandante presidente Hugo Rafael Chávez Frías, no se ha prohibido ninguna “información” emitida por Medios de desinformación alguno; es la República Bolivariana de Venezuela donde se ejerce y se practica la verdadera democracia a nivel mundial. Lejos de defender la libertad de prensa, tal como se define esta organización apoyada por el Gobierno de Estados Unidos (EEUU), la Sociedad Interamericana de Prensa es la principal promotora del terrorismo mediático. Esta reunión de la SIP en la capital de la República Bolivariana de Venezuela servirá para atacar a nuestro país, a Ecuador y también a las deliberaciones de la Cumbre de Río, que condenaron claramente la violación de la soberanía de Ecuador por parte del ejército colombiano.
Los dueños de los medios del continente (SIP), pretenden evaluar la “libertad de prensa” en el hemisferio; pero estos señores no se ven su rabo; hay un dicho muy sabio “como puedes criticar la paja en el ojo de tu hermano, si en tu ojo tienes clavada una viga”; miren la perlita del expediente sangriento de la SIP; desde su fundación desviaron el fin o su objetivo para lo que fueron creado: Han sido el soporte comunicacional de las dictaduras más sangrientas que ha padecido nuestro continente. Tal como aconteció en los 17 años de la dictadura fascista de Augusto Pinochet en Chile, de Jorge Rafael Videla en Argentina, de Anastasio Somoza en Nicaragua, de Alfredo Strossner en Paraguay o de los dictadores que se turnaron en Brasil, después del derrocamiento de Jao Goulart. Por el contrario, dieron su apoyo incondicional a este tipo de regímenes, tal como sucedió en Venezuela, durante el golpe de Estado fascista de abril de 2002, en el que se pretendió derrocar a el gobierno popular, más relegitimado del mundo, como es el gobierno del comandante presidente Hugo Rafael Chávez Frías; que ha pasado y enfrentado todos los procesos electorales, habidos y por haber en la República Bolivariana de Venezuela.
El 11 de abril, de manera insólita, la SIP condenó y repudió que el estado venezolano no le renovara la concesión a RCTV para transmitir a través del canal 2 VHF de señal abierta; las patrañas y manipulaciones en contra del pueblo venezolano; para la SIP este acto fue un “cierre” del canal de televisión privado RCTV ordenado por el presidente Chávez. Al día siguiente, el 12 de abril la SIP elogia la instauración del gobierno de facto de Pedro Carmona Estanga, al expresar “que la situación venezolana brinda nuevamente la enseñanza y el ejemplo a todas las naciones del mundo sobre que no puede haber verdadera democracia sin libertad de expresión y de prensa”. El día 17, sin haber demostrado ningún tipo de arrepentimiento ni rectificación ante los hechos del golpe de Estado del 11 y 12 abril, la SIP vuelve a arremeter contra Venezuela y alienta la esperanza de un cambio a favor de la plena vigencia de la libertad de expresión y el derecho a la información. Derechos violentados de manera flagrante por las televisoras, emisoras de radio y periódicos privados, durante los escasos días que duró la dictadura de Pedro Carmona Estanga; y que a esta fecha siguen las violaciones de manera flagrante por estos mal llamados señores.
La SIP se presenta ante el mundo como la dueña de la libertad de expresión. Se ha convertido en la dueña de la verdad y la única que puede dictaminar cuándo un gobierno viola o no la libertad de expresión. Cuándo un gobierno es dictatorial o democrático. Pero en esencia, la SIP no ha hecho otra cosa sino secuestrar a la verdadera libertad de expresión y los derechos humanos fundamentales. La SIP simplemente es un triste y notorio órgano é instrumento intervensionista a las ordenes del gobierno de los Estados Unidos; es punta de lanza de la guerra de cuarta generación, manipulación y control mental de la opinion pública de Latinoamérica y el mundo, a favor del gobierno de los Estados Unidos.
¡Patria Socialismo o Muerte Venceremos!
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