Cuando nosotros vemos las perversas, pero bien hechas cuñas de “cedice”; construidas con toda la intención de activar el miedo en la sociedad, de manipular afectos, de mentir; pensamos en cómo responder a tanta manipulación, y a tanta infamia. Sin ser expertos algunas cosas reflexionamos.
Las cuñas revolucionarias deben desenmascarar las cuñas oligarcas, y al mismo tiempo exponer al Socialismo.
Imaginamos por ejemplo, una cuña respuesta a la del muchacho de la moto que aparece desnudo en la cuña oligarca. Diría el mismo muchacho:
“En el capitalismo yo estaba desnudo, desprotegido: las razias en el barrio eran frecuentes, no tenía donde estudiar, ni a donde ir si me enfermaba. Era un marginal perseguido. Ahora estudio en una Misión, estoy dignificado: compro alimentos en Mercal, si se enferma Mamá, la llevamos a un módulo, allí nos tratan bien.
A Papá, antes de la Revolución lo despidieron de las empresas de los oligarcas dueños de cedice, le robaron las prestaciones, a él los capitalistas también lo dejaron desnudo, no tenía seguro, enfermó y perdió una pierna por falta de atención. Era un esclavo.
Mi hermano minusválido fue atendido por la Misión José Gregorio, la abuela gracias a la Misión Milagro por fin me pudo conocer después de tantos años ciega.
Yo defiendo este camino hacia el Socialismo, porque se siente que construimos un mundo mejor, de paz, pero con justicia. Ahora nos queremos más”.
La señora preñada de las cuñas oligarcas, podría decir en nuestras cuñas:
“el capitalismo fue quién me dejo desnuda, mi hijo enfermó de gastroenteritis lo llevé a una Clínica Privada y allí nos arruinaron. Vendí mi empresita que tanto me costó, mi marido vendió la camioneta con la que trabajaba, quedamos en la calle.
Ahora mi marido, gracias al Socialismo consiguió trabajo en Lacteos los Andes, esa empresa nadie no las quita, está contento trabajando para nosotros mismos, para la sociedad. Ahora si nuestro hijo se enferma lo llevamos a un módulo, a la Abuela le salvaron la vida allí.
Actualmente ninguno de mi familia está desnudo, yo defiendo el camino al Socialismo, porque en el Socialismo el trabajo de todos es para todos y no para enriquecer a unos pocos oligarcas que gastan fortunas cazando tigres en África y a nosotros nos desnudan.
Mi hijo mayor estudia en la Misión Sucre, ya fue como voluntario a Cuba y a Bolivia, allí comprendió la solidaridad y ahora es un hombre altruísta, con conciencia social.”
Y un locutor preguntaría:
“¿si la propiedad está en peligro por qué en las cuñas no salen los grandes oligarcas, queremos verle la cara?. Y se responde: “la respuesta es muy sencilla, los oligarcas propietarios de grandes empresas y grandes latifundios, que son instrumentos para explotar a los humildes, para especular con la sangre y el sudor del pueblo, nunca dan la cara, engañan para que los pobres peleen por ellos.”
¡Que nadie coma cuento de oligarcas cuidando pueblo!
¡Chávez es Socialismo!
http://www.ungranodemaiz.blogspot.com/