No hay que subestimar la arremetida política electoral de la derecha con su supuesto apoyo a las misiones. Pueden llegar a crear una enorme confusión apoyada por su gran ofensiva mediática. No es posible dejar que se produzcan dudas, interrogantes o incertidumbres en los millones de usuarios de Barrio Adentro y las demás misiones porque la oposición estaría así logrando otra vez su objetivo electoral como lo hicieron, con las mentiras inventadas, para adversar las reformas propuestas a la Constitución.
La oposición viene con todo, ya se apropiaron del símbolo tricolor y de allí a proclamarse cínicamente bolivarianos les falta poco. Lo que jamás podrán hacer porque sus contradicciones los llevarían a plantearse “hasta aquí nos trajo el río”, es reivindicar a Fidel Castro, a la Revolución Cubana y al gobierno comunista de la Habana. No sé como va a hacer la oposición para desvincular a la Misión Barrio Adentro de la innegable amistad, de la solidaridad mutua y de la compenetración existente entre Chávez y Fidel.
El fundamento teórico práctico de la Misión Médica Barrio Adentro está contenido en el Convenio Venezuela Cuba. Si el papeleo, el compromiso burocrático y las firmas entre los dos gobiernos no fueran suficientes allí están los treinta mil colaboradores cubanos de Barrio Adentro, hombres y mujeres resteados con Fidel Castro hacedores de una labor internacionalista cumplida a favor del pueblo venezolano sin distinciones de usuarios por razones religiosas, políticas o de cualquier índole. Los miles de cubanos que trabajan en las misiones sociales, diseminados por todo el país, no pueden ser ignorados ni tampoco el concepto ideo político de solidaridad recíproca entre los gobiernos de Chávez y Raúl Castro que está implícita en el Convenio Venezuela Cuba.
La misión médica cubana Barrio Adentro en Venezuela es un desafío a la política de bloqueo imperialista a Cuba. Barrio Adentro reivindica, confirma y ratifica el humanismo de la revolución cubana y es una de las cartas de presentación convincentes de la vigencia de un modelo alternativo al capitalismo. El pueblo venezolano, gracias a Chávez, ha dado un salto ideológico en la comprensión del significado de la amistad y solidaridad recíproca con la patria de Martí. En la mayoría del pueblo venezolano quedó atrás, enterrado para siempre el coco macarthista, la supuesta amenaza del castro comunismo sembrado por la CIA.
Los chavistas no esconden sus solidaridades, sus amistades internacionales y su intercambio recíproco con los cubanos a quienes el mismo comandante Chávez ha confiado el cuidado esmerado de su salud. El Comandante Presidente es un beneficiario más del Convenio Venezuela Cuba al cual tienen acceso sin discriminación todos los venezolanos cuando sea necesario. Por el contrario la oposición escuálida oculta debajo de la manga, como una fiera acechando a su presa, la dependencia económica del imperialismo, el modelo de dominación neoliberal y los acuerdos conspirativos con la CIA.
Las Misiones Sociales, en su conjunto, son ya parte estructural de la democracia bolivariana y todas tienen un signo ideológico marcadamente socialista, antagónico a la ideología de la burguesía llámense Corazón Adentro, Mercal, Vivienda, Amor Mayor, Robinson, Ribas, Sucre, Saber y Trabajo, Negra Hipólita o Milagro. Esta convicción ideológica de los chavistas no impedirá que la oposición haga su trabajo para tratar de horadar el reconocimiento de los beneficiarios de las misiones a la obra social del gobierno. Para ello la oposición cuenta con los mecanismos depravados de la democracia burguesa enteramente a su disposición.
Lo que la oposición no ha previsto en sus planes escuálidos y no sabe lo que le espera, es cuando tenga que enfrentar a Chávez en su campaña electoral por un nuevo período a la Presidencia de la República. El Comandante Presidente la va a batear de jonrón, los va a volver trizas, al defender su obra cumplida con la demoledora contundencia de la verdad y la razón. No será el líder de la revolución bolivariana quien se deje arrebatar las banderas de redención social de su gobierno por la acción demagógica de los escuálidos y su candidato majunche. Después de 13 años continúan subestimando a Chávez. Seguirán siendo oposición para siempre. En la lápida de los anticomunistas rabiosos rezará: “Vivieron deseando las muertes de Chávez y de Fidel, pero murieron viendo florecer el triunfo imperecedero de la Revolución Cubana y de la Democracia Bolivariana a despecho de una cubazuela sólo existente en la infamia de sus mentes retorcidas.”
*Profesor universitario jubilado